𝓣𝓻𝓪𝓭𝓲𝓬𝓲𝓸𝓷𝓮𝓼 𝔂 𝓓𝓮𝓼𝓪𝓯í𝓸𝓼

246 7 0
                                    

Narra Emily

Tras un largo y silencioso trayecto por carretera, finalmente llegamos a la cafetería donde mi padre acordó encontrarse con Rebekah. Nos sentamos y pedimos café.

- ¿Por qué no contestas? - le pregunté al ver que solo observaba su celular con una sonrisa y lo guardaba sin responder la llamada. No obtuve respuesta; simplemente mantuvo su mirada fija en alguien en la barra.

- Dígame ¿Alguien fuera de lo común pasó por aquí? - preguntó a la camarera que pasaba por nuestra mesa.

-Solo ustedes - dijo de manera simple. Intentó servirnos más café, pero accidentalmente lo derramó en la manga de mi padre.

- Lo lamento, déjeme...

- No. Está bien. Gracias - la interrumpió, haciendo que la mujer se retirara.

- Papá ¿Estas bien? - le pregunte al ver que comenzaba a limpiar compulsivamente su manga, pero el simplemente me ignoró - Oye, ya basta. ¡Padre, basta! - le dije levantándome de mi lugar para detenerlo, pero el me rompió el cuello. 

°°°♥°°°

Un rato después, desperté con un dolor atroz en el cuello, y el lugar estaba plagado de cuerpos sin vida mientras mi padre acababa con su última víctima. Sin que se diera cuenta, le quebré el cuello y comencé a limpiar el desastre para que Rebekah no lo viera al llegar. Al caer la noche, Rebekah entró en la cafetería.

- Rebekah - la saludé al verla cargar un portabebés.

- ¿Emily? - preguntó sorprendida, colocando el portabebés en la mesa y mostrando a una hermosa bebé.

- Tiempo sin verte - le dije abrazándola.

- Pensé que estabas muerta

- Lo sé, Nik me contó todo - dije simple, volteando a ver a la bebé - Mírate, tan bella, tan perfecta. No puedo imaginar la alegría de pasar cada día con ella. Es...

- Es hermosa, se siente tan humana - dijo, mirando a la bebé con adoración.

- Sí, diría que es de las experiencias más humanas

- Sé que tengo que devolvérsela a Hayley cuando el momento llegue, pero me ayudó a darme cuenta lo mucho que quiero un hijo propio que sé que no puedo tener - dijo con expresión triste, sabiendo cuánto anhelaba formar su propia familia.

- Hermoso sueño, por desgracia está fuera del alcance, considerando la maldición de nuestra existencia.

- ¿Y Elijah? - me pregunto después de unos segundos de silencio.

- Con el cuello roto. Parece que Esther está atacando con su entusiasmo usual, torturó por días a mi padre con recuerdos - comencé a decir - luego hizo una oferta para volverlos a todos mortales. Cree que metiéndolos en cuerpos nuevos podrían reclamar algo de pureza hasta comenzar sus propias familias - la expresión de Rebekah me decía que podría llegar a considerarlo -Tengo que confesarte esa invitación a pesar de su crueldad tiene algo de llamativa.

- Deberíamos llamar a Nik - ofreció, así que solo asentí con los brazos cruzados.

- ¿Dónde estás? - preguntó Nik en cuanto respondió.

- Nik, soy yo. Algo anda mal - respondió Rebekah – Elijah sacrificó a doce personas sólo por su mal gusto por la comida. ¿Recuerdas que no mata porque solo puede hipnotizarlos? Es el tipo de acto que llamará la atención de madre.

- ¿En dónde está?

- Emily lo ha mantenido con el cuello roto para estar a salvo... pero no sabemos que hacer ahora - explicó.

𝓤𝓷 𝓵𝓪𝓽𝓲𝓻 𝓮𝓷 𝓶𝓲 𝓲𝓷𝓽𝓮𝓻𝓲𝓸𝓻 ~ 𝓝𝓲𝓴𝓵𝓪𝓾𝓼 𝓜𝓲𝓴𝓪𝓮𝓵𝓼𝓸𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora