𝓔𝓵 𝓡𝓮𝓼𝓬𝓪𝓽𝓮 𝓭𝓮 𝓝𝓲𝓴𝓵𝓪𝓾𝓼

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Narra Emily

Con la llegada del amanecer, nos topamos con un camión que transportaba reclusos, así que decidimos detenerlo para que los Mikaelson pudieran alimentarse.

- Por Dios, ese sí que grita fuerte. Debería haber sido cantante de ópera. Hubiera tenido un final más adecuado - comentó Rebekah al escuchar los gritos de la presa de Kol.

- ¿En serio esto es necesario? Esos gritos me distraen y solo intento romper un hechizo - Dijo Freya molesta

- ¡Kol! Te lo suplico - gritó mi padre - Gracias ¿Qué decías, Freya? - le preguntó al escuchar cómo Kol terminaba de alimentarse.

- Puedo sentir que Klaus sigue en Nueva Orleans, en algún lugar subterráneo, pero no puedo saber exactamente donde esta hasta que esté en la ciudad - explicó Freya.

- Sí, eso será un problema. Tengo contactos en Nueva Orleans y como ya saben la ciudad está llena de vampiros, los cuales nos odian a todos así que tendremos que ser rápidos - informé.

- Esperen, no vamos a hacerlo hoy ¿cierto? - preguntó Kol.

- Nik ya sufrió suficiente - Rebekah

- Sí, y yo he muerto dos veces. No permitiré que Marcel me mate de nuevo. ¿Qué tal si lo sacamos de la ciudad y cuando no esté...? - empezó a sugerir.

- He estado lejos de mi hija suficiente tiempo, si tienes miedo... - comencé a decir molesta.

- Solo estoy siendo sensato. Hasta que Freya no pueda hacer más cura con esa mujer lobo, Marcel puede cortar nuestro cuello - me interrumpió.

- Basta, está decidido. Hoy iremos por Niklaus aunque tenga que destruir la ciudad - afirmó mi padre molesto, caminando de nuevo hacia el auto mientras todos lo seguíamos.

Después de un rato, llegamos a Nueva Orleans y nos dividimos en dos grupos. Kol y Freya fueron a un campanario a realizar los hechizos necesarios y Rebekah, Elijah y yo fuimos al antiguo departamento de Marcel que al parecer ahora era de Josh y puede que nuestra llegada interrumpió su velada con un chico.

- Gracias por esperar y no llegar a asesinarlo - dijo Josh después de correr a su conquista mientras nosotros salíamos del escondite.

- Somos monstruos por necesidad, Joshua - comentó mi padre.

- Además, ya comí - añadió Rebekah.

- Oh que mal, les iba a dar unos wafles de bienvenida - dijo Josh sarcásticamente.

- ¿Era tú novio? parece lindo - le pregunté - y bastante vulnerable como lo son los humanos.

- De acuerdo, solo díganme qué quieren y acabemos con esto. 

°°°♥°°°

Después de un rato, comenzamos a debatir sobre el plan.

- Yo lo distraeré Elijah, soy la única a la que Marcel no matará - comenzó a proponer Rebekah.

- No discutas cosas que son absurdas, entrarías a la boca del lobo - dijo mi padre molesto.

- Voy a estar bien, solo debo convencerlo de que vengo sola y todo lo que quiero es hablar - insistió Rebekah.

- Ni se te ocurra, Josh - dije apareciendo detrás de él al ver que tomaba su celular y luego se lo arrebaté.

- Iba a ordenar pizza, ya sabes por si nos da hambre - dijo nervioso al ver que los otros dos centraron su atención en nosotros.

- Fabuloso, porque aún tengo hambre asesina - dije guardando el celular en el bolsillo de su chaqueta.

𝓤𝓷 𝓵𝓪𝓽𝓲𝓻 𝓮𝓷 𝓶𝓲 𝓲𝓷𝓽𝓮𝓻𝓲𝓸𝓻 ~ 𝓝𝓲𝓴𝓵𝓪𝓾𝓼 𝓜𝓲𝓴𝓪𝓮𝓵𝓼𝓸𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora