𝓜𝓪𝓭𝓻𝓮𝓼 𝓜𝓪𝓵𝓿𝓪𝓭𝓪𝓼 𝔂 𝓢𝓮𝓬𝓻𝓮𝓽𝓸𝓼 𝓡𝓮𝓿𝓮𝓵𝓪𝓭𝓸𝓼

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Narra Emily

Después de que Rebekah se quedara para vigilar a Elena, me dirigí a buscar a Klaus y Kol para advertirles sobre el plan de su madre.

- Ooh, ahí está Wolfy. Una cosita tan sabrosa - se burló Kol al verme entrar en el Mystic Grill.

- Di otra palabra y te arrancaré el hígado - advirtió Klaus.

- ¡Emily! - llamó Klaus con una sonrisa de adoración.

- Genial, todavía estás aquí - murmuré aliviada, notando las expresiones confundidas de los dos originales. Con un par de ojos sobre mí, busqué a Damon en la barra, cuyo rostro mostró rabia al verme hablar con Klaus.

- ¿Te unes a nosotros para tomar una copa? - El híbrido preguntó, atrayendo mi atención.

- Mmm, no gracias - dije seria, lanzando al híbrido una mirada de que me siguiera.

Necesitaba informar a Klaus del engaño de su madre y del plan para detenerla, pero no podía hacerlo delante de Damon. Con una última mirada al híbrido, me dirigí fuera del Mystic Grill.

- ¡Emily! - gritó Klaus al cruzar la carretera, casi siendo atropellado por un auto mientras me seguía.

- ¿Estás loco? ¿Dónde está Kol? - grité mientras él se detenía delante de mí. La cara de Klaus se torció en un ceño fruncido mientras me miraba confundido.

- ¿Kol? Está dentro - dijo, haciendo qué sacudiera la cabeza con exasperación.

- Eres increíble - murmuré con incredulidad.

- No te enfades, amor - dijo con una sonrisa burlona en su rostro que me irritó. Trataba de advertirle que su madre planeaba matarlo, y todo lo que él hacía era coquetear.

- Nik, no tenemos tiempo para esto - murmuré, haciendo que el híbrido sacudiera la cabeza.

- Siempre hay tiempo para esto. Me gustas, pequeño lobo. - dijo suavemente.

- Ya basta, soy demasiado inteligente para ser seducida por ti - murmure con una pequeña sonrisa que hizo reír a Klaus.

- Puede que te sorprenda, pero tu terquedad es una de las muchas razones por las que me gustas - Sonrió brillantemente. Antes de que tuviera la oportunidad de responder, sentí un dolor repentino en el pecho como si hubiera sido apuñalada. Me agarre el pecho mientras el dolor empeoraba causando que el híbrido entrara en pánico al sentirlo también.

- ¿Emily? ¿Qué está pasando? - preguntó frenéticamente mientras me abrazaba.

- Kol - susurré con aspereza, jadeando en agonía mientras el dolor se intensificaba. Asintiendo con la cabeza, el híbrido me tomó en sus brazos estilo nupcial antes de dirigirse rápidamente al callejón junto al Mystic Grill. Allí, nos encontramos con Alaric, Damon y Stefan de pie sobre Kol, quien sostenía una daga. Con precaución al colocarme en el suelo, Klaus se abalanzó sobre ellos, golpeando a Alaric contra la pared antes de arrebatarle la daga a su hermano menor. Stefan se lanzó hacia él, a punto de derribarlo, antes de que yo interviniera, rompiéndole el cuello y dejándolo inconsciente con éxito.

De pie, Klaus se volvió hacia mí, sorprendido, con una mirada de orgullo al ver mi sonrisa maliciosa. El híbrido desvió su mirada hacia el vampiro frente a él.

- Debí haberte matado hace meses - espetó Klaus con ira, estrechando los ojos frente al vampiro de cabello negro, lo que provocó una sonrisa descarada de Damon.

- Hazlo. No va a impedir que Esther te mate - se burló, avivando aún más la ira de Klaus.

- ¿Qué dijiste de mi madre? - siseó el híbrido, acercándose peligrosamente al vampiro sonriente.

𝓤𝓷 𝓵𝓪𝓽𝓲𝓻 𝓮𝓷 𝓶𝓲 𝓲𝓷𝓽𝓮𝓻𝓲𝓸𝓻 ~ 𝓝𝓲𝓴𝓵𝓪𝓾𝓼 𝓜𝓲𝓴𝓪𝓮𝓵𝓼𝓸𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora