𝓤𝓷 𝓵𝓪𝓽𝓲𝓻 𝓮𝓷 𝓶𝓲 𝓲𝓷𝓽𝓮𝓻𝓲𝓸𝓻 ~ 𝓝𝓲𝓴𝓵𝓪𝓾𝓼 𝓜𝓲𝓴𝓪𝓮𝓵𝓼𝓸𝓷

𝓓𝓮𝓼𝓹𝓮𝓻𝓽𝓪𝓻 𝔂 𝓒𝓸𝓷𝓯𝓻𝓸𝓷𝓽𝓪𝓬𝓲ó𝓷

Narra Emily

- Dijiste que querías deshacer el mal que habías creado, pero esto, esto es igual de malo - escuché a Elena llorar cuando recobré la conciencia, abriendo los ojos para encontrarla consternada junto al cuerpo de Alaric. Entonces, recordé lo que había sucedido. Esther nos había llevado al bosque, donde también se encontraba Alaric.

El plan de Esther era convertirlo en un cazador, potenciando su odio por los Originales. Usando la sangre de Elena, realizó magia oscura para llevar a cabo el hechizo que había usado para crear vampiros, y me había obligado a convertirme también. No estaba inconsciente como pensaba; estaba en transición.

- Alaric y Emily nunca serán lo que mis hijos se convirtieron. Les he otorgado suficiente poder para completar su tarea. Entonces, cuando llegue el momento, morirán - explicó Esther de manera casual mientras me esforzaba por incorporarme, sintiendo un dolor sordo y punzante en el pecho, como si hubiera un vacío.

- ¿Y si son inmortal? - preguntó Elena, entre lágrimas, provocando una sonrisa sádica en Esther.

- Todo lo que necesitas saber es que cuando esto termine, habremos liberado a la tierra de los vampiros de una vez por todas - respondió la bruja de manera simple, desatando la burla de la doble.

- Sí, pero estarás matando a los buenos junto con los malos, ¡no eres mejor que Klaus! ¿Y qué hay de Emily? ¿Por qué le has hecho esto? - exigió la morena.

- ¿No lo soy? Deseo un mundo en el que tú y tus seres queridos no sufran a manos de los vampiros, como hizo tu tía Jenna - se burló Esther - En cuanto a Emily. No es más que un daño colateral en todo esto - En la revelación de la anciana - Puede que te consuele saber que tu tía no está en el lugar en el que yo estaba. No conoce el tormento del Otro Lado. Aunque se convirtió en vampiro, permaneció pura. Ella conoce la paz. Que es todo lo que cualquiera de nosotros puede esperar - aseguró Esther a Elena, mientras la doble miraba al suelo con tristeza. Gruñí mientras intentaba ponerme de pie; mis músculos dolían y el dolor en mi pecho empeoraba.

Escuchando un ruido a mi derecha, me volví para encontrar a Matt y Jeremy de pie con armas, ambos apuntando a Esther.

- No te muevas - gritó Matt mientras levantaba su arma, con la mirada fija en la bruja original - ¿Dónde están Elena? - Jeremy exigió

- ¡Jeremy! - Elena exhaló en shock, haciendo que el joven Gilbert suspirara aliviado antes de endurecerse de nuevo mientras dirigía su mirada hacia la bruja.

- ¡Déjalas ir! - gruñó, provocando una risa divertida de Esther - Qué tontos son, al arriesgar sus vidas en defensa de aquellos que los matarán. Pero si esa es tu elección... - escupió Esther antes de levantar las manos, usando sus poderes para forzar a Jeremy y Matt a apuntarse con sus armas.

- ¡Matt! ¡Matt suelta tu arma! - Jeremy gritó preocupado - ¡No puedo! ¡No lo estoy controlando! - Matt volvió a gritar con pánico.

- ¡Basta! - Elena le gritó a la bruja original, solo para ser ignorada, aumentando el miedo en su interior. Sin embargo, antes de que la bruja pudiera obligarlos a disparar, reuní toda la fuerza que me quedaba, me impulsé desde el árbol y me dirigí hacia Esther, utilizando la estaca de roble blanco para apuñalarla. La bruja cayó al suelo instantáneamente, Jeremy y Matt recuperaron el control de sus cuerpos, sonreí a la pareja antes de caer inconsciente una vez más. 

°°°♥°°°

Me moví un poco más tarde, sintiendo que recobraba la conciencia.

- ¿Klaus? - Gruñí, mis ojos se movían mientras mi rostro se retorcía en confusión.

- Está bien, amor. Te tengo - respondió el híbrido mientras me sacaba del cementerio, asintiendo con la cabeza a Damon, quien miraba con preocupación a la morena - Vamos a llevarte a casa - murmuró Klaus antes de alejarse a toda velocidad, hacia la mansión Mikaelson.