𝑨 𝒍𝒂 𝑺𝒐𝒎𝒃𝒓𝒂 𝒅𝒆𝒍 𝑬𝒍𝒆𝒈𝒊𝒅𝒐 || 𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐 𝑴𝒂𝒍𝒇𝒐𝒚 ღ

💎Capítulo 7💎

Era finalmente el día del partido de Quidditch Slytherin contra Gryffindor. Estaba muy nerviosa, después de todo, era el primer partido que mi hermano jugaría. No era que no le tuviera fe, solo que no quería que se matara en su primer juego. Esperaba se llevará un buen recuerdo y yo un hermano sano y salvo.

- ¿Por qué no comes un poco? - preguntó Ron.

Harry jugaba con su comida desanimado.

- Ron tiene razón - asintió Hermione -. Hoy necesitarás energía.

- Pero no tengo ganas - protestó.

- Son solo los nervios, hermanito - dije, acariciando su mano -. Come y ya se te pasara.

- Que tenga suerte, Potter - era la voz del profesor Snape.

Todos nos giramos sorprendidos a mirarlo.

- Aunque después de derrotar a un troll, un tonto juego de Quidditch será pan comido. Inclusive en contra de Slytherin.

Dicho eso, nos estudió a todos con la mirada y siguió su camino.

- Eso explica la pierna - murmuró Harry.

- ¿Pierna? - lo mire confundida.

- Escucha, anoche imagino que Snape trajo ese troll para distraernos y así evadir al perro de tres cabezas. Pero el perro lo mordió, por eso está cojeando.

- ¿Por qué querría acercarse a esa cosa? - preguntó Hermione.

- Cuando estuve en Gringotts Hagrid sacó un paquete de ahí - explicó mi hermano.

- Dijo que era algo importante, muy secreto - añadí.

- Entonces el perro está...- dedujo ella.

- ¡Está cuidando eso! - afirmó Harry-. Es lo que Snape quiere.

En ese momento escuchamos el chillido de Hedwig. Se acercaba a nuestra mesa cargando con un paquete bastante grande.

- ¿No es temprano para el correo? - comente.

- Pero... Jamás recibo nada - Harry miraba el paquete con mucha intriga.

- Hay que abrirlo - dijo Ron, aún más curioso.

Entre las cuatro deshicimos las amarras del paquete y retiramos el papel envolvente. Quedamos alucinando al verlo. Era una escoba.

- Es una escoba - exclamó Harry.

- Creo que es bastante obvio - me burlé.

- Es que no es solo una escoba, Grace. ¡Es una Nimbus 200!

- Pero... - Harry volvió a mirar hacia donde se había posado la lechuza y sonrió.

Seguí su mirada y entendí. La profesora Mcgonagall le había obsequiado a Harry una escoba para su juego de hoy. Yo también sonreí.

- ⚡︎ -

Después de decirle a Harry unas mil veces que no se matara. Él se había ido con el equipo y yo me fui a las graderías con mis dos amigos y Dean Thomas. Nos acomodamos en los mejores lugares que encontramos, tratando de no ser aplastado o pisado por uno de los más fanáticos del Quidditch. Mientras tanto, yo trataba de no entrar en crisis.

- Respira, Grace - dijo Ron.

- ¿Y si no está listo? - murmuré preocupada.

- Por Dios, es Harry Potter - exclamó Hermione -. Sobrevivió a un mago oscuro ¿y crees que no puede con un partido de Quidditch?

Dicho así, tal vez si estaba siendo un poquito exagerada.

En ese momento los dos equipos salieron sobrevolando el campo con sus escobas. Preparándose para la posición inicial y dar inicio al juego. Logre identificar a Wood, el capitán; a los gemelos, Fred y George, volaban juntos alrededor de una bandera; y por último encontré a mi hermano volando un poco más cerca. Contuve la respiración al verlo tantos metros sobre el suelo. Sin embargo, sentí cierto orgullo al imaginar cuánto le habría gustado a mi padre que uno de los dos siguiéramos su legado.