𝑨 𝒍𝒂 𝑺𝒐𝒎𝒃𝒓𝒂 𝒅𝒆𝒍 𝑬𝒍𝒆𝒈𝒊𝒅𝒐 || 𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐 𝑴𝒂𝒍𝒇𝒐𝒚 ღ

🏆 Capítulo 8 🏆

- Entonces es verdad ¿no? - preguntó Harry, por segunda vez.

- Si, Harry.

- ¿Estás segura?

- Si

- ¿No te obligo?

- No.

- ¿Te gusta lo suficiente?

- Que si.

- ¿Te trata bien?

- Si, Harry.

- Bien... Supongo.

Suspire divertida, Harry parecía estar en un difícil momento procesando que Cedric Diggory era mi novio. Después de que salió de la enfermería se lo había contado, cuando se lo había dicho se había puesto completamente pálido y Hermione fue a traerle agua. Me había sentado frente a él en el comedor para poder hacerme todas las preguntas con respecto al tema.

- ¿Entonces todo está bien? - pregunté nerviosa.

Harry se quedó en silencio unos minutos mirándome. Suspiró y dejó caer su cabeza hacía atrás, viendo el techo encantado.

- Eres mi hermanita. No tengo idea de como debo tomármelo.

- Fácil - intervinó Hermione -. La apoyas en todo lo que puedas y si le rompe el corazón, matas al idiota.

- ¡Herms!

- Me gusta la idea - asintió Harry.

- Yo te ayudo a esconder el cadáver - completó Ron.

Puse los ojos en blanco, divertida. Dirigí mi mirada a la mesa de Hufflepuff donde Cedric estaba estudiando, captó mi vista y me sonrió, le correspondí la sonrisa y me mando un beso que me hizo sonrojar. Volví a comer mi desayuno para calmarme. El correo había empezado a llegar y el periódico aterrizó frente a Hermione que no tardó en abrirlo para leer. Harry estaba tomando jugo de calabaza de su copa.

- Hola, Harry - saludaron las hermanas Patil.

Harry se giró a verlas pero ellas siguieron su camino sin detenerse, sin embargo, se quedó mirando al otro lado del gran comedor, miré de reojo y me di cuenta que miraba a Cho Chang. Sus amigas advirtieron a la chica Ravenclaw que se giró a ver, Harry trató de sonreír derramando su jugo sobre sí mismo. Puse los ojos en blanco y las niñas rieron.

- Así no vas a conquistar ni a una mosca, hermano - murmuré mordiendo mi tostada.

- Gracias, Grace - ironizó.

Sonreí divertida, amaba a mi hermano con todo mi corazón pero también me encantaba molestarlo y ahora que empezaba a interesarse en las chicas podía burlarme a un nuevo nivel. Disfrutaría mucho eso.

- ¡No puede ser! - exclamó Hermione.

Me sobresalté por su repentino gritó y me incliné sobre el periódico, en la página se veía la foto en movimiento donde ella abrazaba a Harry y otra de Víctor Krum. Mire la hoja con el ceño fruncido.

- No puedo creer que haya escrito esto - completó Hermione.

- ¿Qué cosa? - pregunté -. ¡Sí sigues moviendo la hoja así no voy a poder leer!

- "La señorita Granger, una ambiciosa chica parece tener cierto gusto por los magos famosos. Su última presa, según nuestras fuentes, es nada menos, que el bombón Búlgaro Víctor Krum. Aún no se sabe cómo ha tomado Potter esta decepción amorosa".

- Será estúpida - murmuré releyendo las líneas con el ceño fruncido -. ¿En el mundo mágico no existe la denuncia por información falsa?

- ¿Qué? - Ron me miró desconcertado con la cuchara en la boca.