Sacrificios por amor

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*2 meses después

— ¿Quieres decorar el pastel? — preguntó Junkyu dándole las frutillas ya cortadas a su pequeño.

Junghwan se levantó del suelo, donde jugaba con algunos juguetes.

Tomó las fresas y empezó a repartirlas por el pastel.

Junkyu sonreía mientras lo veía tan feliz y emocionado de hacer el pastel.

Era su cumpleaños, cumplía 3 años. Junkyu le había pedido a Jihoon para hacerle un pastel, aunque fuera pequeñito, a costa de eso tubo que hacer un par de cosas y ahora la verdad no se sentía muy bien, pero valía la pena, con tal de ver esa sonrisa en la carita de Junghwan.

— ... Feliz cumpleaños a ti...~ — terminó de cantar Junkyu, dando palmas mientras Junghwan sonreía emocionado. — ¡Feliz cumpleaños, mi niño!

Junghwan pidió un deseo y sopló las velitas de su pastel.

Junkyu se acercó a prender la luz y después regresó a la mesa con dos platos en manos.

— ¿Pediste tu deseo? — preguntó Junkyu quitando la velita.

— Si. — respondió mientras tomaba una muestra de la crema y se la llevaba a la boca. — Hay muchas cosas que quiedo, pedo yo sólo pedí lo que más quiedo en el mundo.

Junkyu cortó una rebanada de pastel y se la dio a su niño.

— ¿Me quieres decir qué es?

— Mi deseo fue que mi papá ya no te lastimada.

El omega volteó, borrando su sonrisa mientras llevaba su mano al moretón que Jihoon le había hecho la noche anterior en su mejilla.

— Me siento tidste cuano te veo tidste, mami... no me gudsta cuano mi papá te ladstima...

— Ay, mi niño... — dijo acercándose para abrazarlo. — No sabes como me gustaría que no escucharas nada de eso. Lo siento, mi bebé... te prometo que pronto te voy a sacar de este lugar y vamos a ir a un lugar donde vamos a ser muy felices.

— Yo soy felid contigo, mami... te amo mucho, mami...  — respondió el pequeño dando un beso en su mejilla. — y tamien a mi hedmanito.

Antes de que alguno pudiera decir algo más, ambos escucharon la camioneta de Jihoon que se estrellaba con los arbustos. Segura venía tomado... y sólo ellos sabían lo que significaba eso.

— Junghwan, vete a tu cuarto... — dijo Junkyu dándole su pastel. — Vete a tu cuarto y no bajes a menos que yo vaya por ti, ¿me escuchaste?

— Pedo mami... te va a lastimad...

— Por favor, mi niño, escúchame... — Junkyu lo hizo voltear a él mientras lo ayudaban a levantarse. — obedeceme, ¿si? Tú hermanito y yo vamos a estar bien, pero para eso necesitamos que te vayas a tu cuarto y te escondas del monstruo, ¿está bien?

Junghwan asintió y obedeció. Inmediatamente se fue corriendo a su cuarto.

Junkyu recogió sus juguetes y los guardó en un cajón de la vieja cocina.

Se apresuró a servir su comida y a poner una cerveza en la mesa también.

Jihoon entró a la casa finalmente. Ebrio como casi siempre.

Entró a la cocina, bebiendo aún de una botella y sin poder siquiera sostenerse bien.

Se dirigió a la cocina, donde lo primero que enfocó fue a Junkyu.

— No sabes el asco que me da saber que te acostaste con un mocoso y que ahora tengo que aguantar al producto de tus calenturas, maldita zorra. Siempre lo dije, para lo único que sirves es para darme placer.

Gone - [HaruKyu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora