Las horas pasan muy lentas aquí, o quizás eso me parece ya que me he pasado los dos días que llevo aquí comiendo y durmiendo.
Nunca había dormido tanto en mi vida como lo estoy haciendo ahora.
Nicolas pasa la mayor parte del tiempo conmigo, hablando de cualquier cosa.
El es quien habla, yo normalmente no digo mucho, por suerte el tampoco insiste en que lo haga y no parece molestarle ser quien habla, además sabe que no me apetece hablar pues no es necesario decírselo con palabras para que sepa que toda esta situación es difícil para mi.
Obviamente estoy muy feliz de que todo ese infierno se halla acabado por fin, sin embargo también hay cosas en las que no puedo dejar de pensar, cosas que me carcomen la cabeza y me hacen sentir muy mal.
Tres personas en particular a las que no puedo sacar de mi mente.
Una de ellas es Rossi, mi mejor amiga, que aunque en un principio no le parecerá raro que no le hable, a la larga se preocupará pues no sabrá nada de mi.
Luego está Dylan, le hablé muy mal la última vez que lo vi y aunque estaba muy estresado y nervioso por la situación eso el no lo sabe, quien sabe que estará pensando, daría lo que fuera por poder hablar con el, me duele tener que dejarlo solo sabiendo todo lo que ese chico ha pasado y sigue pasando.
Por ultimo pienso en mamá, que a pesar de todo la sigo queriendo muchísimo y me duele el hecho de no volver a verla, de que nunca más sepa nada sobre su único hijo y que se quede junto a ese maldito que puede hacerle cualquier cosa.
Salgo de mis pensamientos al oír el sonido de la puerta siendo abierta, retiro inmediatamente la vista de la ventana para centrarme en la persona parada en la entrada de la habitación.
- despertaste temprano. - dice comenzando a acercarse a la cama. - creí que aún estabas durmiendo.
Nicolas duerme en la habitación de alado, me lo dijo el primer día y también dijo que si necesitaba algo podía llamarlo y el vendría enseguida sin importar la hora que fuera.
- duermo todo el día, literalmente no hago más que dormir, ¿como quieres que no me despierte temprano?
Ríe asintiendo y se sienta en la cama a mi lado.
- tienes razón. - pone su mano sobre mi rodilla. - pero hoy viene el doctor a verte y si dice que estás mejor podrás caminar, podremos salir al patio y eso, que no es mucho pero porlomenos es algo comparado a estar acostado todo el día.
Eso hace que mi ánimo se eleve de inmediato, el saber que por fin podré levantarme de esta maldita cama me pone muy feliz.
Aunque la idea de que un médico me revise no me gusta tanto, sin embargo si es lo que tengo que soportar para poder moverme de aquí estoy dispuesto a hacerlo.
- ¿A que hora viene?
Pregunto mientras me acomodo mejor quedando sentado.
- me dijo que después del medio día, a eso de la una o algo así.
- okey.
Nos quedamos en silencio por unos segundos, el simplemente me mira, pero no es una mirada cualquiera, es una mirada dudosa, quiere preguntarme algo pero no sabe si hacerlo.
- ¿Que pasa?
Digo finalmente al ver que tarda mucho en decirlo. Se sorprende por el hecho de que me halla dado cuenta, pero de inmediato sale de la sorpresa y se aclara la garganta para hablar.
- Jay... - busca mi mirada así que levanto la mía de inmediato. - pues el médico me ha dicho que... Le gustaría no solo analizar tu estado físico sinó también... - hace una pausa. - también le gustaría tratarte psicológicamente porque cree que lo necesitas, que necesitas ayuda también en eso por todo lo que te pasó.
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Sálvame (BL)
RomanceJayden cree que su vida no puede ser peor. Vive en una constante tortura cada día de su vida gracias a un contrato que su padre firmó antes de morir. En este contrato vendía el cuerpo de su hijo para pagar una gran deuda. Jayden se pasa las noches...