Capítulo 18

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El doctor está un buen rato hablando con Nicolas fuera, supongo que contándole todo lo que vio y sobre cómo estoy.

Eso me avergüenza un poco a decir verdad, espero que no le de demasiados detalles.

Me concentro en seguir armando el rompecabezas, las pocas piezas que me quedaban, no tardo mucho en tenerlo hecho, la verdad no me ha costado tanto hacerlo, eso me sorprende bastante ya que generalmente siempre he tenido problemas para poder concentrarme en algo.

La puerta se vuelve a abrir poco después y Nicolas ingresa a la habitación con una sonrisa en el rostro, espero a que se siente a mi lado como siempre.

- mira, lo he terminado.

Señalo el rompecabezas, Nicolas lo mira con atención y sorpresa.

- valla, no sabía que eras tan bueno.

- ni yo. -Suelto un poco de aire en forma de risa, medito unos segundos y al final no puedo contenerme. - ¿que dijo?

Pregunto refiriéndome al doctor.

- dice que estás mucho mejor, que has mejorado bastante rápido, los hematomas van a permanecer por un tiempo,  aún no estás recuperado del todo pero has ganado peso, aunque no es suficiente pero de a poco te vas acercando a tu peso ideal.

- ah.

Digo simplemente.

- también me dijo que puedes caminar, aunque no puedes hacer fuerza y debes seguir descansando suficiente para mejorarte aún más, pero ya no tienes que estar todo el día postrado en la cama.

Eso me emociona de una manera increíble y hace que mis ánimos suban de manera brusca.

- genial. - sonrío. - por fin.

- si. Ahora debo hacer algunas cosas, pero por la tarde saldremos a caminar ¿que te parece?

- está bien.

- ¿Quieres mirar televisión?

- si.

- muy bien.

Las horas pasan y llega la tarde, Nicolas justamente como me dijo viene a mi habitación para ayudarme a levantarme para caminar.

Lo que había recorrido el día que desperté aquí no fue ni la mitad de la enorme casa, Nicolas me lleva ahora por todos los pasillos mostrándome donde está cada habitación.

Son seis dormitorios en total, una enorme cocina, una sala de estar, un comedor y más salas que ni siquiera tienen un uso en concreto.

Salimos al patio por la misma puerta que había salido yo la otra vez.

Comenzamos a caminar, voy sujetado de la mano de Nicolas, se me hace algo tan natural, no me siento nada incómodo de estar así por alguna razón, me gusta su compañía.

Me doy cuenta de que hay muchas flores en el patio, flores de todo tipo.

- a mi mamá le gustan mucho las flores, ella cree que pueden mejorar cualquier cosa y hacerla ver más bonita. - comienza a contar al ver que me quedo mirandolas - Nunca usamos mucho esta casa así que a ella se le ocurrió que sería una buena idea poner flores para que no se viera abandonada, para que siguiera viéndose bonita a pesar de que no hay nadie habitando en ella.

- pero... ¿Como se mantienen, como no se secan?

- tenemos personas que vienen a ver todos los días que todo esté en orden por aquí, ellos se encargan de regarlas. Mamá viene también de vez en cuando a verlas.

- pues... Si está casa está así no me imagino como te estará la suya.

Río.

- oh no, no puedes imaginarte, literalmente está minada de flores y plantas, habitan más que mi propia madre.

Sálvame (BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora