Capítulo dedicado a: Dayan_a1703 :D
Capítulo 28: La habitación de tortura
Me sobresalté cuando el plato sonó, los pedazos de vidrio estrellándose por todo el suelo y algunos trozos pinchando la piel de mis piernas.
«Mierda».
Voltee hacia él con brusquedad sobresaltándome aún más cuando lo vi acercarse a mí, sabía que esto era malo; demasiado malo.
Parecía demacrado; con un semblante decaído, oscuras ojeras estaban alrededor de sus ojos enrojecidos, su ropa estaba sucia y rota, como si no se hubiera bañado en mucho tiempo, su cabello crecido en muchas direcciones pareciendo un completo vagabundo.
—¡ALEJATE! —grité lo suficientemente alto para que alguien dentro de la casa me escuchara.
—¡No Nube!, ¡no te muevas! —dijo abriendo mucho los ojos mientras se detenía en su lugar—, te puedes cortar.
Yo ahora no me movía porque estaba petrificada, no porque pudiera cortarme.
—¿Qué haces aquí? —repliqué.
—Shh, por favor —susurró llevando uno de sus dedos a su boca rogándome para que guardara silencio—, solo quiero hablar contigo.
Se acercó más a mí pero levanté una mano en advertencia.
—Alejate de mí si no quieres que llame a la policía.
De repente su semblante cambió rápidamente a uno tenso, enojado, sus ojos oscureciéndose, su quijada apretándose y sus manos empuñándose.
—¿Ahora soy demasiada poca cosa para ti? —replicó con voz resentida—, ¿soy tan poca cosa para ustedes que ahora solo me rechazas?
Me lo quedé mirando confundida, sin comprender qué era lo que estaba ocurriendo.
¿Qué? ¿de verdad tenía el descaro de estar molesto cuando él fue el que casi nos asesinó? Taylor debía de estar mal de la cabeza.
—Te lo diré solo una vez más, no te acerque o yo voy a... —empecé a decir, sin embargo, él se precipitó hacia mí agarrándome del torso y otra de sus enormes manos me cubrieron la boca.
—¡No! ¡No puedes llamar a la policía! —susurró a mi oído con molestia—, tú y Hades van a pagar por esto, van a pagar por todo.
¿Pagar por todo?
¿Pero es que Taylor estaba demente? Definitivamente parecía que se había vuelto demente.
Aferró más su mano en mi boca clavándome las uñas; haciéndome daño, ahogué un gemido.
—Debieron morir, ¡debieron desaparecer! —gritó.
Su mano rodó hacia mi vientre y me tensé cuando aferró sus uñas en mi barriga.
No. Con mi bebé no.
Este bebé lo iba a cuidar con mi vida entera.
Reaccioné alzando el codo dándole un golpe directo en el pecho, él se quejó soltándome y de repente se encogió, moviendo la cabeza de un lado a otro aguantándosela como si estuviera a punto de explotársele.
—No, no, escúchame, joder, yo no lo hice —susurró y me miró pero sin lograr enfocar la vista en mí—, ¡TIENES QUE CREERME!
Gruñó otra vez retorciéndose de un lado a otro y cayó al piso arrastrándose en los trozos de vidrio.
—¡HIJOS DE PUTA! ¡VAN A MORIR! —Gritó y sacó un arma de su bolsillo.
«Ay mierda».
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Tuya y mío #4 (completa)
RomanceNube se encuentra embarazada de un amor que se disputa entre la vida y la muerte en una camilla de hospital, pero parece haber un buen pronóstico para esto cuando Hades por fin despierta... Pero hay un problema, Hades tiene problemas para caminar t...