Tuya y mío #4 (completa)

Capítulo 17: Lasaña (Parte II)

Minimaratón 3/3

Capítulo 17: Lasaña (Parte II)

—Ya por la sonrisa, es seguro que se lo va a quedar. —dijo Andrew soltando una ligera carcajada.

—Vale, ya es muy tarde y debo irme —dijo el señor Parker mirando su reloj y que ya el sol se había ocultado—, ¿nos devolvemos?

Iba a afirmar con la cabeza cuando Andrew dijo:

—Espera —me tomó de la muñeca—, quiero saber que ha sido de tu vida, hace mucho que no hablamos, tengo... —sacó su bolsillo unas cuerdas de zapatos— unas trenzas para hacerle una cuerda improvisada al perro mientras le compras una correa, así te será fácil llevártelo.

—¿Está bien? —me preguntó el señor Angel.

—Está bien. —le contesté.

—Vale, despídeme de Hades. —dijo el señor Angel y le hizo un asentimiento de cabeza a Andrew.

—Adiós —dije moviendo la mano y continué acariciando al perro mientras Andrew le adhería la cuerda al cuello.

—¿Escuché mal o sigues con el profesor Hades Parker? —preguntó Andrew con una sonrisa incrédula, pero no me miraba a mí, miraba a Lasaña.

—Es una larga historia, pero sí. —me limité a decir.

—Asumo que él es el padre. —comentó y no tuvo que aclarar su comentario, sabía que se refería al bebé.

—Asumes bien.

—Guao.

Nos quedamos en un ligero silencio llenado solo con las olas del mar y los jadeos de Lasaña jugando con mis dedos.

—¿Y tú que ha sido de tu vida? —pregunté porque realmente me daba algo de curiosidad.

Él tenía la mirada fija en el mar, parecía muy tranquilo, y los años que habían pasado le habían acentuado muy bien.

—Estoy trabajando en una empresa en New York —comentó—, vine de vacaciones, tengo un yate y lo tengo aparcado aquí por si me apetece pasear.

—Oh, que bueno —dije, ahora que lo pensaba, realmente me hubiera gustado seguir con mi carrera, pero mientras estuviera embarazada de alto riesgo era preferible esperar a dar a luz.

El perro ladró y empezó a chillar de la nada, me quedé quieta sin saber qué hacer, Andrew se levantó y tomó al perro examinándolo, no dejaba de chillar, hasta que Andrew le sacó una asilla que se le había metido y el perro cuando estuvo en el suelo se sentó sobre mis piernas quedandose tranquilo.

—Ya está —dijo Andrew.

—¿Como sabías lo que tenía? —pregunté.

—He tenido muchos perros a lo largo de mi vida —dijo—, buscale un veterinario que le coloque las vacunas, no lo bañes tan seguido. Uhm, y si algo pasa y no puedes comunicarte con el veterinario puedes preguntarme, al menos mientras siga aquí de vacaciones puedes contar conmigo, ten mi numero.

Sacó una tarjeta del bolsillo y me la entregó, era de su carta profesional como ingeniero y abajo su numero.

Sonaba como una despedida.

—¿Ya te vas? —pregunté, no sabía por qué sentía melancolía.

—Sí, he quedado con mi madre en una hora —me extendió una mano y yo se la estreché—, fue un placer verte, Nube.

Pareció dudar un poco, pero finalmente agregó:

—Se que ha pasado tiempo pero, discúlpame por todo lo que hice en el pasado.

Fruncí los labios.

—No pasa nada, ya es... pasado —me limité a decir.

Él afirmó con la cabeza y se fue, me quedé pensativa con una ligera sonrisa, hacía mucho que no había pensado en Andrew, no desde lo desastroso que fue cuando me acusó de mi relación con Hades y casi me expulsan...

Suspiré, era mejor no recordar esas cosas, ya era el pasado.

Miré a mi perro que ya se estaba quedando dormido.

—A ver Lasaña, hay que llevarte a limpiar. —susurré y él ladró como si me entendiera.

Me levanté y me devolví a la casa, apenas iba a entrar, Demetri abrió la puerta que daba al patio, sus ojos fijos en el perro, pero mis ojos estaban fijos en la Barbie Rusa más allá en la sala, ella estaba a los pies de Hades flexionándole las rodillas pareciendo estúpidamente sensual frente a mí hombre, por suerte Hades tenía los ojos cerrados, pero jadeaba como soo lo hacía conmigo en la cama.

«Como odio que lo toque».

—Señorita Queen —dijo Demetri pareciendo confundido.

—¿Pero qué se supone que ella está haciendo? —cuestioné presa de los celos.

—Su trabajo —replicó Demetri—, por favor, no interfiera.

Lo miré frunciendo el ceño, me estaba molestando ese tono que estaba usando conmigo.

Sus ojos bajaron a Lasaña.

—¿Y ese perro? —preguntó pareciendo agotado.

—Es mío —repliqué.

—Al señor Parker no le gustan las mascotas —dijo Demetri como si estuviera demente—, va a tener que dejarlo afuera en el área de la piscina.

¿Dejarlo afuera?

No.

Estaba muy pequeño para dejarlo afuera.

—Va a dormir conmigo —dije.

—No puede —replicó Demetri—, no se lo volveré a repetir.

¿Pero este quien se creía? ¿el director de la casa? ¿mi padre?

Ya me estaba cayendo pésimo por ser tan estricto y ni siquiera darme mi lugar.

—Demetri estas a un paso de que te despida. —lo amenacé molesta.

Él no hizo ninguna expresión aparente.

—No me puede despedir por hacer mi trabajo —dijo Demetri—, además, eso solo el señor Parker lo puede hacer y él está ocupado con la Rusa. Le pido nuevamente que deje el perro afuera o estará en graves problemas si lo veo dentro de la casa.

Me cerró la puerta en la cara.

Este hijo de...

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OOOOOkeeeeeeeeeeyyyy aquí deje un muñeco enojado si está enojado con Demetri como yo:

Jajajajja okeeey conejitas, ¿como estan? espero les haya gustado la minimaratón, ven que hay nuevos y viejos personajes, se pondrás complicadas las cosas, ¿creen que Andrew se quede al final con Nube o Nube se terminará casando con su suegro? ¿Hades tendrá un romance con la Barbie Rusa? chan, chan chaaan, descubrelo en los proximos capítulos deeee tuyo y Mio wuajajaaa jajaja, les cuento que esta semana no actualicé ninguna de las demás historias porque fue una semana muuuy agitada, con esto de lo que poco he hablado del nuevo pais donde me encuentro, pero ya estoy liiibreee para ustedes :D asi que vota para más actualizaciones ¿sí?

Instagram: Ysarisareinamoo el que no me siga le huelen los pies u.u

Las amo con mi higado y mi pulmón.