Maldito Amor - The Hoffmans #3

33. Frank

- ¿Disfrutas de restregarme tu felicidad en la cara? - pregunta Neeja a mis espaldas, me tenso de inmediato y la ira ciega surge momentaneamente de mi pecho, aprieto los puños, pero me obligo a mantener la calma mientras sostengo a Matt en brazos.

- Creí que estabas "indispuesta" - me quejo, mirándola y apretándo la mandíbula, estaba vestida de negro, porque claro, mantenía luto por Vikram incluso hoy, su expresión es amarga y su cabello oscuro a comenzado a ponerse gris, y sus ojos permanecían llenos de resentimiento, los entrecierra en mi dirección.

- Es dificil descansar cuando mi hijo mayor ha decidido ejercer de rey para tu benefecio, los criados están...especialmente activos hoy - dice las palabras casi con asco antes de poner sus manos en la espalda - Pero no vine a discutir, no pienso intervenir...por Harold.

- No es como si fuera a permitirlo - añado, tomando una nota mental para preguntarle a mi hijo que tánto había hablado con su madre desde que llegamos, la situación es tensa por ambos lados y es evidente, pero por demasiados tecnisismos legales, y por el trato que habíamos hecho sobre el compromiso de Harold, Neeja era intocable.

No que a Alenna le importe, pero es una decisión que aunque me encantaría tomar, me abstengo, por mi hijo.

Neeja gruñe lígeramente pero mantiene la compostura, evidentemente molesta por mi falta de respuesta, era una mujer a la que le gustaba tener el control, y desde lo de Vikram, lo había perdido sobre lo que más le importaba.

- Solo quiero...saber, como fue la reunión con Radha - dice a regañadientes - Es la futura esposa de mi hijo, es la mujer que me va a remplazar, tenía derecho a estar en esa reunión, y...

- Harold no te quiso allí, Radha está bien, es una niña por Dios ¿Qué demonios quieres, Neeja? - Me quejo, deseando alejarme lo más pronto posible de allí, Rose debía estar con Natasha y los quintillizos ahora mismo, y quiero ver a mis niños.

- ¿A Harold le gustó? - pregunta ella, luciendo casi...esperanzada, lo que consigue irritarme, pero no pienso darle explicaciones, así que me limito a asentir, ella suspira aliviada, y por un momento creo que será todo, pero se detiene un momento - ¿Puedes al menos decirle que lo siento?

- Eso debiste hacerlo tú hace muchos, muchos años, Neeja - escupo antes de dar media vuelta y continuar con mi camino, cabreado ante el cinísmo de su petición, pero intento controlarme para no despertar a Matt, sus horarios de siesta y luego de correr todo el día con los hermanos de Harold lo han dejado completamente fuera de juego antes de lo planeado, y era mi chico de los anillos, así que lo necesitaba en acción pronto.

La reunión de esta mañana, para conocer a la futura esposa de Harold había sido...intensa, primero, mi hijo había tenido una crisis nerviosa que me había tomado por sorpresa, luego de aquella noche que nos contó a Natasha y a mi sobre sus presiones y como se sentía, era más abierto a informarnos sobre sus ataques de ansiedead, y finalmente verlo en acción había sido algo un poco aterrador, como padre, me volvía loco la idea de no poder hacer nada para ayudarlo más que ejercicios de respiración y recordarle que estaba con él.

Pero mi hijo era fuerte, se había recuperado y me había mirado con seriedad, demosstrándome que ya no era el niño pequeño que se escondía detrás de mis piernas en el zoologico cuando los leones rugian, comenzaba a convertirse en hombre, incluso si para mi siempre sería mi bebé.

Así que la reunión había sido algo tensa cuando finalmente los planes de boda habían comenzado enserio, la familia de la chica parecía exactamente lo que había esperado, aristocratas que habían criado a su hija menor con la esperanza de ser escogida por la familia real, completos lamebotas y con complejo de superioridad, la expresión de disgusto de Harold no daba precisamente una buena señal, pero Radha era...bueno, una niña, con catorce años realmente no es la gran cosa, sí, evidentemente conoce todo el libreto y protocolo que su madre probablemente le había enseñado, pero como adulto, me siento cocmpletamente asqueado ante la forma arcaica en que se maneja todo aún, la chica debería estar en la escuela, escuchando a las bandas de rock populares o lo que sea que hagan las niñas de su edad, no practicamente siendo vendida como una vaca en un concurso.