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T/N miraba asombrada al hombre paralizado frente a ella. Aún no podía creer que estaba viendo al mismo Drex, totalmente inmóvil y atrapado en el almacén de la capicueva, y que lo único que lo detenía era una máquina construida por Schwoz.

— Entonces... ¿está inconsciente o...? — cuestionó dando media vuelta para mirar a Henry, quien buscaba baterías en una caja.

— Ah... no lo sé, Schwoz dijo lo que hizo es como poner en pausa su cerebro.

T/N miró de nuevo a Drex, se acercó más a la estructura para verlo mejor, intentando descubrir si quedaba algo de aquel hombre o solo un cuerpo inerte.

— Pobre hombre — Expresó con pena.

— ¿Pobre? — Henry la miró enarcando una ceja — Sí sabes que es un criminal y que quiso destruirnos, ¿no?

— Sí pero, ¿no crees que es un tanto inhumano mantenerlo aquí así? — volvió a mirar al rubio — si ya lo habían derrotado y tenían la situación bajo control, pudieron haberlo llevado a prisión y asegurarse de que estuviera en una celda aprueba de niñas en su quinto cumpleaños.

Henry se mantuvo en silencio por unos segundos.

— No pensamos en eso... en fin, las cosas ya están hechas. — contestó restándole importancia — Hay que ir a arriba; ya va a comenzar Corte perruna.

Henry caminó a la plataforma de los tubos en el almacén, T/N iba detrás de él. Antes de irse la castaña miró a Drex una última vez, teniendo una sensación extraña en el pecho. No sabía si sentía pena por el hombre o un mal presentimiento sobre él.

— Volvimos — mencionó Henry una vez que los tubos se elevaron — ¿Alguien sabe a qué hora- — fue interrumpido.

Detrás de ambos apareció Schwoz corriendo sujetando un bote lleno se palomitas, en su camino hacia el sillón empujó a Henry, haciendo que se golpeara contra el suelo.

— ¡Qué alguien ponga la corte perruna! — gritó Schwoz subiendo al sillón, mientras T/N ayudaba a Henry a levantarse.

— Oye, ¿puedes darme las baterías? — pidió Ray extendiendo su mano hacia Henry, quien le entregó el paquete en cuanto se puso de pie.

— ¿Para qué querías baterías de 8 voltios? — cuestionó Charlotte.

— Para mi jabón vibrador.

— ¿Y para qué quieres-? ay, olvídalo, no quiero saber que harás con eso — T/N hizo una mueca mientras se sentaba en el sillón junto a Charlotte y Schwoz.

Mientras todos se preparaban para ver la televisión, Ray envió a Jasper al almacén para que buscara nuevas baterías.

— ¿Podrías bajar al almacén y traerme un paquete de baterías de 8 voltios?

— ¡Claro que sí, capitán! — respondió Jasper con entusiasmo a través del comunicador. 

— Siempre me avergüenzas. — Ray dejó el comunicador en su lugar debajo del panel de controles para después acercarse al sillón cuando escuchó que el programa estaba comenzando. Saltó por encima del respaldo golpeando a T/N con su pie al hacerlo. — Cuidado con la pierna.

— ¿Qué haces, Raymond?

— Muévete — expresó intentando acomodarse entre ella y Schwoz.

— ¿Si te sabes sentar?

— ¿Tú sabes como moverte?

— Por supuesto, encima de Hen- — El rubio la detuvo antes de que terminara la oración poniendo su mano en la boca de la castaña, quien solo lo miró frunciendo el entrecejo.

Captain Man's DaughterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora