Me desperté al notar una pierna pesada sobre mi cuerpo, me giré poco a poco y vi a Jordan completamente desnudo a mi lado, me asusté por completo, y mi instinto fue taparme con una sábana prácticamente transparente, Jordan, al notar mi movimiento brusco, comenzó a despertarse poco a poco.
Sus ojos se abrieron como platos al verme a su lado en la cama, se echó a un lado quitándome la trasparente sábana.
—¿Qué coño haces en mi cama? —me reclamó.
Agarré una almohada para taparme y le dejé la sábana a él.
—Eso me gustaría saber a mí —me excusé mientras bajaba poco a poco de aquella cama.
Miré alrededor de la habitación; ropa tirada por el suelo, mi pecho ardía, al agachar mi cabeza, noté los arañazos que llevaba.
—Maldita rusa —murmuré.
Jordan también miró su pecho al ver el mío. Él también había sido marcado como yo.
—¿Esto nos lo hicieron hace unas horas?— preguntó mientras miraba como el sol estaba en su punto más álgido por su ventana.
Asentí, no muy convencido.
Jordan abrió el primer cajón de su mesita de noche y sacó una bolsita transparente con cocaína, se colocó un poco de aquel polvo en la mano y esnifó.
Lo miré desagradablemente, él me ofreció, pero me negué rotundamente.
—Deberías probarlo, hoy se viene un duro día de trabajo —insistió.
Nuevamente, negué con la cabeza mientras recogía mi ropa del suelo; mi traje de $300 estaba en el suelo y arrugado, comencé a ponermelo.
Jordan decidió ponerse unos calzoncillos nuevos y se sentó en la cama.
—Creo que debería irme ya, necesito explicaciones y sobre todo necesito ver las acciones.
Jordan asintió mientras se dirigía al baño a vomitar.
Escuché todo.
Me quedé pensando en algo que tenía que hacer con Jordan, pero no sabía el qué.
—Jordan, sé que estás ocupado, pero ¿tú te acuerdas de lo que teníamos que hacer?
La respuesta de Jordan fue una arcada, sabía que si yo no recordaba lo que teníamos que hacer, él mucho menos, me dirigí hacia el salón para ver si encontraba a alguna chica, miré el reloj, eran las cinco de la tarde, lo más sorprendente de todo fue ver a la rusa tomando el sol en la terraza de Jordan.
—Buenas tardes, dormilón —dijo con su acento ruso.
Me puse nervioso al escuchar su acento, era imposible olvidar lo que había hecho hace unas horas, la saludé mientras me sonrojé; ella estaba tomando el sol completamente desnuda, me tapé los ojos cuando noté que se levantaba para venir a saludarme; soltó una carcajada ante mi hazaña.
Mi sorpresa fue aún mayor cuando aquella rusa me besó, sabía a alcohol.
—¿Me invitas a cenar? —colocó sus manos sobre mi cuello.
Sentí como se me erizaba la piel, no supe qué decir y simplemente asentí mientras ella asentía.
Aquella chica me quitó la americana y se la puso ella, alegando que tenía frío, Jordan no tardó en salir; se había echado un agua y ya tenía mejor cara.
—Espero no interrumpir algo, parejita —bromeó.
Le miré mal a Jordan, mientras ella se limitaba a darme besos por toda la cara.
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Los Chicos De Harvard •Madison Beer• Megan Fox• Sofía Carson•
RandomEn las brillantes y deslumbrantes calles de la alta sociedad de Beverly Hills, donde el poder y la riqueza se entrelazan en un juego peligroso, se encuentra Connor Carter, un joven ambicioso con un talento innato para los negocios y una determinació...