Los Chicos De Harvard •Madison Beer• Megan Fox• Sofía Carson•

Capítulo 76

El coche avanzaba en silencio, el rugido del motor era el único sonido que llenaba el vacío entre nosotros. Las luces de la ciudad pasaban como destellos borrosos a través de las ventanas. Las palabras que acababa de decir resonaban en mi mente, y el dolor que había tratado de reprimir durante tanto tiempo finalmente se había liberado.

Jordan seguía mirando hacia adelante, sus manos firmemente sujetas al volante. Finalmente, rompió el silencio, su voz apenas un susurro.

—Connor, ¿estás loco? —dijo, su tono una mezcla de incredulidad y preocupación—. ¿Estás diciendo que Kevin Hunt arruinó a tu familia?

Asentí, sin poder evitar que las lágrimas siguieran cayendo, todo el odio y la frustración que había acumulado  se desbordaba.

—Sí, Jordan. Hunt estafó a mi padre, lo llevó a la ruina. Lo perdimos todo por su culpa, mi madre y mi hermana nos abandonaron, y tuvimos que vivir en un barrio de mierda, mi padre nunca se recuperó, y antes de morir, me contó toda la verdad, me advirtió que tuviera cuidado con los estafadores, pero nunca pensé que me encontraría cara a cara con el mismo hombre que destruyó a mi familia.

Jordan dejó escapar un suspiro profundo, procesando toda la información, finalmente, se detuvo en el arcén de una calle tranquila, apagando el motor, se volvió hacia mí, su expresión seria pero comprensiva.

—Connor, ¿tienes pruebas de que es el mismo Kevin Hunt del que hablaba tu padre? —preguntó, su voz llena de preocupación—. ¿O podría ser solo una coincidencia? puede haber muchos Kevin Hunt en Estados Unidos.

Me quedé en silencio por un momento, pensando en su pregunta, luego, recordé algo que encontré en la casa de mi padre después de su muerte.

—Cuando fui a casa de mi padre a buscar algún número de teléfono de mi madre o mi hermana, encontré una foto —dije, mi voz temblando—. Era una foto de mis padres junto a Kevin Hunt. Estaban en algún tipo de evento, sonriendo como si fueran amigos, mi padre nunca mencionó esa amistad, y después de lo que me dijo antes de morir, todo tiene sentido.

Jordan se echó las manos a la cabeza, su expresión llena de incredulidad.

—Todo esto es una locura, Connor —dijo, su voz baja—. Pero si es verdad, entonces tenemos que hacerle pagar, no quiero saber como te sientes después de todo lo ocurrido, eres muy fuerte. 

Asentí, sintiendo una mezcla de alivio y determinación.

—Gracias, Jordan, sé que esto es mucho para asimilar, pero no puedo hacerlo solo. 

Jordan asintió, su expresión resuelta.

—Estamos en esto juntos, Connor, vamos a asegurarnos de que Hunt pague por lo que hizo, de una vez por todas.

El semáforo se puso en verde y Jordan volvió a conducir, escuchaba como su respiración era fuerte, él también tenía muchos sentimientos encontrados. 

 Finalmente, habló de nuevo, su voz seria y llena de determinación.

—Connor, necesito saber toda la historia posible sobre tu padre y lo que sucedió, si vamos a hacer esto, necesitamos estar bien preparados y tener todas las pruebas que podamos encontrar, tenemos que pensar con la cabeza fría para no hacer estupideces, si Kevin Hunt es tan embaucador como aparenta, debemos ir con cuidado.

Asentí, reconociendo la sabiduría en sus palabras.

—Tienes razón, Jordan, luego iré a la casa de mi padre y buscaré cualquier cosa que pueda servir, viejas cartas, documentos, fotos, lo que sea, necesito algo más que una foto para enfrentarme a  Hunt.