Capitulo 6: PAGARAS POR TU ERROR SARAH LOTTE

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- Amigo que paso aquí, que fue todo esto, ¿porque te golpeo esa mujer?

- te conté que hoy casi atropello a una mujer.

- no me digas que es ella?

-pues si le dice y ahora no solo soy un imbécil si, no también un vil ratero, pero que se cree esa mujer.

- qué piensas hacer Sam.

- pensaba despedirla, pero haré algo mejor.

- que vas hacer Sam, es una pobre muchacha, te conozco no le hagas daño.

-no se ya veremos dice Sam.

- sí que te pego en tu orgullo ya que nadie te había hablado así, espero y no seas tan cruel con ella.

- ya veremos, ahora a trabajar necesito la autorización del nuevo centro que se va a construir y los permisos, no quiero problemas a la hora de iniciar la obra.

- claro amigo todo está listo ahora te traigo toda la documentación, por cierto, tu padre me dijo que está tarde tenemos que ir a la planta, para ver el proceso de elaboración de todo lo que se fabrica en esta empresa

- si ya lo tenía contemplado, pero está tarde no puedo tengo la junta con los muchachos que van a trabajar en el nuevo centro, mostrarles los planos y ver con el ingeniero que todo se haga bien como debe de ser, cámbiala por favor para mañana a primera hora.

- muy bien Sam así lo hare, ahora te traigo la documentación que pediste,

- Dantte sale de la oficina, me pierdo en mis pensamientos, recordando el beso que le había dado a Sarah, fue un beso firme pero suave, lo hice para callar tanta insolencia y no lo voy a negar me gustó y aún más ella respondió a mi beso, no era una escultura de mujer, mide como 1.67 cm, ojos oscuros, tez blanca, cabello rizado y castaño claro, tenía sus curvas definidas, sonrió, que estoy pensando, solo es una loca, en eso se me viene una idea de cómo hacer pagar todas sus malditas palabras con las que me insulto, a mí nadie me insulta quien se cree esa loca, pido a Matilde que le diga al señor Daniel Vázquez de recursos humanos que quiere verlo en mi oficina ya.

- suena el teléfono en recursos humanos.

- hola de nuevo Sarah.

- hola señora Matilde que pena con lo que pasó, pero yo creí que era un ladrón, la escucho reír atreves de la línea.

- no te preocupes ya pasó, oye está el señor Vázquez?

- si señora la comunico, no solo dile por favor que el señor Loringh lo espera acá en presidencia, gracias Sarah.

- Será que me van a despedir por eso pide ver a mi jefe, pues ni modo ya estaría de dios si me corren, viejo odioso y atrevido, me dirijo a la oficina de mi jefe y le doy el mensaje.

- bien Sarah ahora mismo voy a ver qué necesita el Señor Loringh, al rato te veo.

- sí señor, no voy a mentir me siento algo preocupada, una hora más tarde llega el señor Vázquez mi jefe y me dice.

- Sarah pasa un momento a mi oficina por favor

- ahora sí pensé me correrán, con ese pensamiento entro a la oficina del jefe.

- toma asiento, dice el señor Vázquez.

- señor me va a despedir, pregunté

- por dios Sarah que afán el tuyo por qué te despedirían acaso hiciste algo mal?

-no señor como cree yo me porto bien siempre y hago mi trabajo, nada de eso, solté un gran suspiro cuando me dijo eso, entonces señor, lo veo preocupado, pensativo, paso algo?

- mira Sarah tengo algunos problemas familiares y eso me trae preocupado, pero no es por eso por lo que te pedí que vinieras, ya tenemos tres años trabajando juntos y nos hemos acoplado bien.

- sí señor, que paso dígame por favor.

- pues verás a partir de hoy ya no eres mi secretaria, tú serás la secretaria de presidencia, así que prepárate por qué desde ya te tienes que presentar con el Señor Loringh, serás su nueva secretaria, felicidades Sarah, después de tres años has obtenido un buen asenso.

_ como que eh obtenido un acenso, eso no me los creo el idiota de Loringh seguro lo hace por fastidiarme la vida, maldita sea mi suerte, no podía creer lo que estaba escuchando, señor está seguro, como es que seré secretaria de presidencia.

- no lo sé Sarah son órdenes del señor Loringh así que apresúrate que hay trabajo y te están esperando

-Señor y a usted quien lo ayudará?

- no te preocupes, Danna de recepción pasará a ocupar tu puesto y buscaremos a alguien que cubra recepción, será mejor que te des prisa, el Señor Loringh dijo que lo más pronto posible tenías que estar en su oficina, que hiciste, me estás haciendo dudar, tienes un par de días pensando en si te van a despedir, te conozco y por algo has andado muy preocupada.

- con torpeza respondo, nada señor, mejor me apuro y salgo disparada de la oficina para que mi jefe no me hiciera más preguntas, recojo mis cosas las pongo en una caja y me dispongo a ir a presidencia, ya casi era la hora de salida, por qué tanta urgencia, antes de irme a mi nueva oficina me despido del jefe sé que nos seguiremos viendo.

FORZADA A CASARMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora