- Despierta niña bonita, le daba unas cachetadas para que despertara.
- ¿Dónde estoy que está pasando?
- Por fin despiertas niña bonita, ya era hora.
- ¿Quién eres dije, por qué me hacen esto?
- José, tu fierecilla ya despertó.
- José, será el José que yo conozco, será el mismo, no puede ser, y en eso aparece Pepe, riendo con malicia.
- Al fin despiertas linda, me extrañaste me acerco a ella y tomo su rostro con mi mano.
- Suéltame imbécil me das asco. Tremenda cachetada me suelta José, tan fuerte que me hace caer de la silla en la que me tenían. grito de dolor lágrimas de desesperación y miedo por mi bebé, no quería que le pasará nada.
- Vuelves a hablarme como lo hiciste y te mataré con mis propias manos, oíste niñita mimada. Estela marca al idiota de Samuel, del teléfono de Sarah.
- - está bloqueado a ver niña bonita, pon tu carita de niña buena para desbloquear, con mucha fuerza la volví a sentar y la tomé del rostro para poder desbloquear el teléfono, listo ves niñita que te costaba.
- Basta Estela marca ya.
- Mi teléfono suena y veo que es del teléfono mi esposa, ¿Sarah eres tú?
- Hola, hola señor Loringh, me apena tanto pero no soy su querida esposa.
- Idiota no le hagas daño déjala ir.
- Tranquilo Loringh, ahora es mi turno y yo decido y si quieres ver viva a tu esposa tendrás que hacer lo que te diga.
- Está bien haré lo que pidas, déjame hablar con Sarah.
- Mejor te mandaré una foto para que la veas.
- le tomo una foto y se la envío a Sam.
- al ver la foto, oh mi bonita que te han hecho, imbécil que le hiciste dime, te mataré desgraciado.
- O haces lo que te diga o la mato tú decides Samuel.
- Con un nudo en la garganta tragándome las ganas de gritarle al maldito de José. Está bien, tus ganas, solo no le hagas daño por favor.
- me rio a carcajadas al escuchar las súplicas de Sam.
- Te tengo en mis manos le digo a Sam espera mi llamada y sabrás que hacer y cuelgo.
- golpeo el asiento del auto con tanta fuerza por la impotencia que sentía.
- Así no nos ayuda Loringh le dijo el capitán Rosales.
- La han golpeado cómo quiere que esté.
- Se y entiendo su desespero, pero ya mis hombres están en la zona, están rodeados, solo esperemos a que vuelva a llamar, estamos por llegar.
- ¿Quién eres tú?
- Aún no lo sabes, soy la mujer de Sam, la única mujer en su vida, tú no eres nadie, solo eres una bruja mal parida que se metió entre Sam y yo, pero muy pronto morirás y me quedaré con Sam y todo lo que él tiene.
- Puedes quedarte con todo lo que quieras te regalo a Sam, déjame ir, no me mates, por favor le decía una y otra vez. solo pensaba en mi chiquito, mi bebe o no, oh Dios, no permitas que nos hagan daño, no me importa tener que suplicar, si fuera yo sola, no me hubiera importado, no tengo a nadie en el mundo, pero mi bebé no tiene la culpa.
- Maldita sea capitán, haga algo ya, le pueden hacer daño no lo entiende.
- Cállese señor Loringh, nos pueden descubrir, debemos tener paciencia, vea todo el almacén está rodeado, entradas y salidas, esperaremos la llamada, para saber qué es lo que van a pedir.
- Por qué José, yo no te eh echo nada, porque me haces esto, yo siempre fui buena contigo, por favor no me hagas nada, te lo suplico le decía llorando.
- Así me gusta que me supliquen, pero de esta no te salvas, maldita perra y voy a disfrutar cuando José te acribille.
- José quien esta mujer, porque lo haces, déjame ir yo no tengo nada, a mí no me importa Sam, déjenme en paz, yo no les eh hecho absolutamente nada, esta mujer está loca y tu junto con ella, son unos malditos enfermos, que les hice, ustedes son los que deberían de morir malditos desgraciados, apenas terminaba de decirle cuando me suelta otro golpe en la cara
- Cállate idiota, la única que va a sufrir y morir eres tú, pero también me las pagará tu querido esposo, no se salvarán de esta te lo aseguro, maldita y le doy una patada en las piernas.
- José pateo mis piernas, grite de dolor y lloraba. Con todas sus fuerzas me levanto José del suelo donde había caído del golpe que me había dado en la cara, estaba sangrando, me aventó en la silla, solo quería proteger a mi bebé, me dolía la cara y las piernas donde me había pateado.
- Es hora de marcarle al idiota de tu marido le digo a Sarah, Estela muévete y marca al imbécil de Samuel, pero muévete mujer, le grito.
- A mí no me gritas idiota, ya lo hare y que sea la última vez que me levantas la voz entendiste dije muy enojada.
- Ah si, mira Estela sacando una pistola de su espalda, apuntando la cabeza de ella, yo te hablo como se me pega la gana y tú haces lo que yo ordenó, si, no te gusta te mueres tú también, no te necesito.
- asustada por la reacción de José, cambio mi táctica con él. Está bien José, no te enojes solo no me grites, ahora quita el arma se te puede salir un tiro.
- Ves cariño así me gusta, que te cuesta hacer las cosas calladitas.
- Si tienes razón, marcaré a Sam.
- Antes envíale otra foto de su esposita.
- me preparo para tomar la foto, pero Sarah tenía la cabeza hacia abajo, sube la cabeza perra.
- A lo lejos escuchaba que decían algo, me sentía muy mal había perdido sangre, me sentía muy cansada y dolorida, tenía sueño o estaba a punto de desmayarme, cuando siento un jalón en mi cabello, que hace levantar mi cabeza.
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FORZADA A CASARME
RomanceCon el cambio del nuevo CEO todos en la empresa andamos a la expectativa y con mucho trabajo pues no sabemos lo que nos depara, es una incógnita nadie en la empresa sabe de quién se trata y eso nos preocupa a todos ya que vienen cambios, nunca pens...