CAPITULO 17 LA AYUDA DEL CEO

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- por Dios Sarah, por qué demonios dejaste que quedara libre, ahí era la oportunidad de que se refundiera en la cárcel, tienes que denunciar Sarah.

- no como crees, si hago eso y se entera se enojará y me buscará, no Danna, no, créeme tengo mucho miedo le decía llorando.

- veo como Sarah llora, estaba a punto de levantarme para abrazar a mi amiga, cuando suena mi teléfono era Dantte, discúlpame amiga tengo que contestar, hola buenas tardes, lo siento, pero ahora no puedo hablar.

- no cuelgues Danna el señor Loringh quiere verte y si estás con Sarah, que no se entere, ya que te reúnas con Loringh sabrás para que te necesita.

- es Sarah la que está llorando, ¿paso algo Danna?

- le arrebato el teléfono a Dantte, señorita Danna soy Samuel Loringh, le pasó algo a Sarah, ¿por qué está llorando? Responda por favor.

- hem señor no puedo decirle ahora y solo puedo decirle que está en lo cierto el motivo no puedo decirle y espero que comprenda el por qué y disculpe, pero no puedo hablar en este momento.

- espera no cuelgue por favor dígame donde están y voy por ustedes.

- no lo creo conveniente señor, está bien necesito platicar con usted dígame donde la veo, en un momento le mando la ubicación diré a Sarah que tengo que irme y lo espero aquí en el restaurante de Mary, aproveche de decirle al señor Loringh por qué Sarah se había ido al lavabo, señor, ya regresa mi amiga y no puedo hablar, hasta pronto y cuelgo.

- paso algo Danna, todo está bien?

- si amiga, tengo que irme, me daba pena mentirle tenía que hacerlo, para saber que era lo que quería el señor Loringh, discúlpame por dejarte en este momento cuando más me necesitas y tomo sus manos entre las mías, sabes que te quiero mucho, pero mi hermana me pide ayuda con las niñas, sabes cómo te dije antes o no sé si te comenté, mi hermano y yo estamos apoyándola, ella quedo muy afectada, lo entiendes verdad Sarah?

- Claro que si Danna, que pena por lo de tu hermana, ahora ve después seguimos platicando, pagamos la cuenta, tomo mi bolso, me despido de Danna y antes de irme me dice.

- Sarah, piensa bien en denunciar, no temas mi familia y yo estamos contigo y te apoyamos, no tengas miedo, es preferible que este preso y que no te asusten sus llamadas.

- lo pensaré amiga, nos despedimos y salgo del restaurante, en el camino a casa iba pensando todo lo que me había contado Danna, por qué no dijeron nada los doctores, Danna y su familia se habían encargado de todo, llegó a casa y me aseguro de cerrar bien la puerta, estoy paranoica por culpa del maldito de José.

- para que me querrá el señor Loringh, aquí sigo en el restaurante esperando, que será tan importante, mi duda era que no me conocía que será lo que quiere hablar conmigo, en eso veo que Dantte abre la puerta para dejar pasar al señor Loringh, me ubican en la mesa y avanzan hasta donde estoy, me pongo de pie para saludar y el señor Loringh me brinda su mano en señal de saludo y nos pide que nos sentemos.

- Señorita Manríquez gracias por esperarnos, sé que se está preguntando el por qué o sobre que quiero hablar con usted.

- le soy sincera señor Loringh, la verdad es que si, que pueda querer el director de la empresa con una simple empleada.

- tan igual una y la otra ya veo por qué son amigas.

- a que se refiere señor

- olvídelo Danna, Donde esta Sarah?

- ella ya se fue a su casa señor, dígame por favor para que me necesita.

- mire Danna, puedo llamarla así?

FORZADA A CASARMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora