CAPÍTULO 29. COMIENZA LA GUERRA.

12 4 3
                                    

―Hola Avis, ¿y el capitán? ―preguntó Alastair entrando en el comedor seguido por Alexia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

―Hola Avis, ¿y el capitán? ―preguntó Alastair entrando en el comedor seguido por Alexia. Ambos estaban vestidos con sus trajes tácticos.

―Este... se fueron a una misión ultra secreta él, Zeke y Ruber. De hecho, estaba por llamarlos a la sala de juntas, me dejó un plan de acción para el dispositivo de seguridad de esta noche.

―¿Te dejó a cargo? ―preguntó Alexia.

―«Síp».

―Pudiendo dejar a una mujer que evidentemente está mucho más preparada que cualquier hombre y te deja a ti ―dijo Maysha cuando llegó.

―Ay, ya nos calló el chahuistle ―se burló Alastair provocando que Alexia se riera por lo bajo.

Avis abrió la boca, pero decidió ignorar la pulla.

︵‿︵‿︵‿︵

La plaza estaba llenándose rápidamente con miles de personas, al parecer todos ya habían olvidado los eventos catastróficos del pasado, aparte el gobierno federal era experto en eso. Era la noche del quince de septiembre y se celebraba el inicio de la independencia con el tradicional grito de independencia por el presidente de la nación.

―Qué suerte que esta vez el gobierno tomó la mayor carga de seguridad ―comentó Avis mirando desde el balcón de un edifico aledaño al palacio de gobierno. Miraba a través de unos prismáticos rosados. Alastair, con una peluca tricolor y comiendo tacos; Alexia, en una azotea cercana, vigilando lista para disparar desde su rifle MacMillan Tac-50 modificado; y Maysha, custodiando al presidente directamente.

Todo parecía transcurrir con normalidad, la plaza y sus alrededores estaban al máximo de su capacidad, había música, mariachi y espectáculos.

―¿Es seguro tomar eso?

―Sí oficial Chuc, solo es tequila, por mi garganta han pasado cosas más destructivas ―ambos se rieron.

―Esta noche no puede salir mal algo, la Sede llevó a cabo redadas para atrapar a los rebeldes, ¿verdad?

―Sí, eso espero.

Escucharon por el intercomunicador que estuvieran preparados pues el presidente haría su aparición.

―Ay, ya me tomé media botella ―dijo Avis. Se puso de pie y se asomó por la ventana viendo como el presidente daba su participación. Dio un trago de su vaso, pero lo dejó caer al ver como el mandatario caía muerto en una lluvia de sangre―. ¿Qué?... que está...

―Avis ―habló Alexia―. Avis, el este de la ciudad está ardiendo y se está acercando un ejército de... ―se cortó la llamada.

―No, otra vez no... ―gimió Avis―. Se repetirá...

―¡Herel, Herel! ―Alastair intentó reestablecer comunicación―. ¡Carajos!

La gente corría despavorida, era un caos, el presidente había sido asesinado. Alastair corrió entre empujones hacia donde estaba Alexia, pero el suelo comenzó a temblar tan fuerte incluso activando a la alerta sísmica, lo que hizo que las personas entraran aún más en pánico.

Nuevo Génesis: la rebelión del ángel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora