Flavia subió el desayuno mientras su esposa salía de la ducha.
-Mi amor, que rico huele ese café. -secaba su cabello.
-Me esmere, hace mucho frío afuera. ¿A qué hora te vas?
-Después de desayunar mi amor, ya hoy enviamos todo hacia arriba y que allí se encarguen.
-Debo admitir que me da gusto que esto haya acabado.
-Lo sé mi amor. -sonrió. -Hablé con Ramiro.
-¿Para qué? Esta de vacaciones amor. -dejo la charola en la mesa del tocador.
-Necesito que alguien te acompañe mientras no estoy.
-Solo serán 3 días, no exageres. Hay algo bueno de todo esto. -sonrió tomando su taza de café.
-¿Cuál?
-Usare tu carro.
-Mi amor no toques mi radio por favor.
-Tranquila, que gruñona. -rió.
-Hablo en serio Flavia. -advirtió.
-Quédate calla' mejor. -rió.
Javiera acabo de arreglarse y dejó a su esposa en el restaurante.
-Flavia, ven acá. -Bautista llego rápidamente a ella.
-¿Qué? Es muy temprano aún.
-Son las 10 de la mañana. -afirmó.
-Bien. ¿Qué sucede?
-Angela esta esperándote, esta furiosa porque no quieres ir al viaje.
La pelirroja resoplo y allí se encaminó.
...
-Te dije que vinieras tranquila pero no a las 10 de la mañana Caceres. -hablo Gonzalo.
-Lo siento, me relaje demasiado. Además estoy pasando tiempo de calidad con mi mujer oye.
-No vas a ir a la guerra, es solo un viaje de trabajo. Tráete el computador, terminemos con esta cagada de una vez.
-Voy jefe. -volteo los ojos.
...
Teresa alcanzó a Emiliano al supermercado.
-¿Qué paso Emiliano? ¿Cuál era la urgencia? ¿Qué hacemos acá?
-Es que la Flavia me dijo que la flaca se va mañana, tu flaco también y la mía va a hacer unas cosas con la suegra, algo de la familia y se lleva a la güagüa.
-¿Y eso que tiene que ver? -pregunto confundida.
-Los hermanos Betancourt pasarán tiempo de calidad. -sonrió emocionado.
-Yo tengo hijos, te recuerdo.
-De hecho la Bianca los invitara a una pijamada de 3 días.
-Emiliano, ¿Flavia sabe de esto?
-¿Para qué le voy a preguntar? Somos sus hermanos po. Dale venga que haremos super.
-Ay Dios Emiliano, si Flavia se molesta te culpare de absolutamente todo.
-¿Y si no?
-Fue idea de ambos. -rió.
-Ahí si. -negó mientras tomaba un carro.
...
-¡Deja de gritar! ¿Qué chucha te pasa Angela?
Flavia ya estaba rayando los límites de su paciencia.
-Es que no puedes hacerme esto, al aceptar la publicidad aceptabas esto también.
-No, perdóname pero no. Acepte la publicidad porque los fondos iban a destinados a una buena causa, jamás mencionaste un viaje, y si mal no recuerdo Bautista tampoco lo hizo, créeme que a él jamás se le pasaría algo así.
-A ver Flavia, respiramos las dos, me disculpo por levantar la voz. ¿Ya?
-Ya. -asintió.
-¿Cuánto es lo que pides para ir a ese viaje? Se que Javiera no puede, pero tú si.
-Mi esposa se va a un viaje de trabajo y aunque ella estuviera aquí en esa fecha no iríamos.
-¿Por qué? Es trabajo.
-Porque no, no corresponde, entiende lo y para serte sincera yo no quiero ir, ni siquiera se me cruzo por la cabeza consultarlo con ella.
-¿Debes pedir permiso? Wow, no es muy diferente a Dante.
-Cierra la boca. -tenso su mandíbula. -No te atrevas a comparar a mi mujer con él. Esta platica se acabó, y si ya no hay nada más que decir te voy a pedir que te retires, gracias. -dirigio su vista a su computador.
-¡Eres una egoísta y terca!
-Ya deja de--
-Hey hey. -entro Javiera a la oficina. -¿Por qué estás gritándole a mi mujer? ¿Qué te pasa?
-Javiera.
-Es importante que asista al viaje. -trago saliva.
-Pero ella ya te dijo que no, no va a ir. ¿Por qué sigues insistiendo? Además yo no estoy.
-Ella puede asistir sin necesidad de que tu lo hagas.
Javiera rió.
-¿Y cual es el afán por qué mi esposa viaje contigo? -se cruzo de brazos.
-Trabajo. -la miro fijamente.
-Ya. -asintió y volteo a ver a su esposa.
-Angela ya se iba.
-Permitele a Flavia hacer esto.
-¿Crees que yo se lo prohíbo? Mi mujer ya lo tenía decidido, no quiere viajar contigo.
-¿O eres tú la que tiene miedo de que lo haga?
-Angela. -intervino Flavia.
-¿Miedo? ¿Miedo a que tú? -sonrió desafiante.
-Miedo a que a Flavia le de nostalgia y quiera--
-¡Ya! Basta, vete Angela, largo.
La morena las miro una vez más y salio de allí.
-¿Qué mierda con esa mina? -miro a su mujer.
-No lo sé mi amor, no se que le pasa.
-Esta buscando comer en cuchara.
-Ya, ya mi amor, no pensemos en eso.
-Entiende lo Flavia, esa weona busca algo más, esta esperando el mínimo descuido de mi parte.
-¿Qué te pasa? ¿Crees que yo te haría algo así?
-Tú no pero no sabes que malas actitudes haya tomado en todos estos años.
-Ya mi amor, ya ¿si? Mejor dime, ¿tienes todo para mañana?
-¿Te urge que me vaya?
-Obvio no, relajate porque estas molesta.
-Esa mina va a esperar a que yo me vaya para hacer de las suyas, creo que mejor no voy.
-¿Qué?
-Tengo que cuidar a mi mujer.
-¿Estas loca Javiera? Tienes que ir. -aseguró.
-¿Por qué? ¿Necesitas tiempo con ella? -indago molesta.
-No te lo puedo creer. -negó alejándose de ella.
-Dime Flavia, ¿es eso? ¿Me necesitas de viaje para que ella se acerque más? Contesta.
"Por la mierda" susurró la pelirroja.
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CAPÍTULOS UNICOS // LA VIDA DESPUÉS DE CASADAS
Hayran KurguDemente. Flavia & Javiera♡