Me gusta un ahueonao

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ADVERTENCIA
Este capítulo contiene temas sensibles como violencia física/ psicológica, relaciones tóxicas y abuso. Si te incomoda o eres sensible a estos temas, te recomiendo no leer.

Florencia.

Me encontraba arreglándome para ir a un carrete que había organizado uno de mis compañeros.

Después de huear toda la tarde buscando algo que me gustara, ya me había decidido.

Me puse una falda muy linda que nunca había ocupado y decidí que este era el momento, sin duda tuve que ponerme unas pantis porque el frío me mataría. La polera que elegí era algo sencilla, no me esforcé mucho en eso, porque sabía que lo que quería que resaltara eran mis bototos, los cuales los amaba.

Después de mirarme por quinta vez en el espejo me convencí que este sería, me sentía linda.

Sentí la puerta abrirse, dejándome ver al Cristobal.

—Hola amor —me dio un beso corto una vez que se acercó a mi—. ¿Estás lista?

—Hola Cris —le sonreí—. ¿Como me veo?

Este me observo por unos segundos y su expresión no decía mucho.

—¿Falda? —preguntó.

—Si... —aún mantenía la sonrisa, aunque no tan segura como antes—. Nunca la había ocupado y pensé que sería hoy podría hacerlo.

Este rodeo los ojos.

—¿Justo hoy? Justo cuando vamos a salir —su tono era acusador.

—Cristobal no tiene nada de malo, incluso mira —le mostré—. Ni siquiera es tan corta.

—Para ti —me miro obvio.

Me toque la frente frustrada.

—Sabes, si vamos a esta...

—Ya era —levantó los brazos en forma de rendición—. Si quieres ir así esta bien.

No dije nada, solo me di vuelta en dirección al espejo. Se me habían quitado las ganas de ir.

Vi como por el reflejo este me miró y se acercó.

—Disculpa amor solo... —pausó pensando en si decirlo o no—. Te ves preciosa... Solo deje que los celos me afectaran demás y no me fije en lo linda que te ves.

Vi como se acercó más hacia mi y me abrazo por la espalda. Apoyando su cabeza en mi hombro.

—No te molestes ¿si? —me dio un beso en la mejilla—. Eres muy linda para estar con la carita así.

Volvió a darme un beso pero esta vez en el cuello haciendo que me hiciera cosquillas.

—Con esa sonrisa si —sonrió.

Yo me giré y lo observé por unos segundos.

—No quiero pasarla mal hoy Cris —susurre.

Este me coloco una mano en mi mejilla y la acaricio suavemente.

—No lo haremos, no te preocupes.

Se acercó a mi dándome un beso suave en los labios, pero cuando colocó ambas manos en mi cintura y me acercó más hacia el, comenzó a ser más intenso. Lo sentí retroceder y llevarme con el, estábamos al lado de la cama. Las manos que estaban en la cintura bajaron un poco más y ahí fue cuando me empujó hacia la cama.

Vi como se puso de rodillas en la cama y se acercó a mi. No sabía donde llevaría esto pero... tenía que dejarme llevar solamente ¿no?

Una vez que volvió a estar cerca de mi me volvió a darme un beso, pero esta vez no era suave si no desesperado. Como si necesitara más. Sentí su boca bajar lentamente a mi cuello, dejando besos húmedos. Mientras que con una de sus manos libres trataba de desabrocharme la falda y ahí fue... Justo en ese momento, cuando los besos en el cuello no me causaron nada, nada más que incomodidad. Sentía como desesperadamente trataba de desabrochar la falda y la incomodidad aumentaba.