Seo Na-bi hija del gran Seo Jun CEO de SJPKM Private Security, volverá a Corea después de 5 años, pero lo que no sabe que su regreso trae con ella grandes consecuencias.
Na-bi descubrirá lo que es el amor, la ambición, la traición, la obsesión y el...
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Después del incidente con los chicos, a pesar de que Jimin hablo conmigo seguía con esa inseguridad en mi, ¿Teníamos secretos? Bueno, ¿Tienen?, esas preguntas seguían en mi cabeza, sentí como mi estómago se revolvió.
Pero tenía que seguir haciendo mi trabajo, en la empresa no podía derrumbarme por cosas que aún no tenían respuesta.
Hoy teníamos junta, teníamos que tomar la desición de dónde iríamos el aniversario de la empresa, ya que nuestros padres esperaban una muy lujosa fiesta.
Llegué a la sala de juntas, sentándome en mi lugar, los chicos aún no llegaban pero aún había tiempo tenían 10 minutos, fui checando mis documentos y la organización de la fiesta.
- Buenos días.- saludos el rubio asiendo un guiño.
Solo sonreí nerviosa.
- Buenos días.- saluda la castaña en compañía de su hermano.
- Hola Lía.- sonreí al verla.
Se acercó y me abrazo.
Tenía tanto tiempo sin verla, este trabajo y los chicos no me dejaban nada de tiempo libre.
Sin más entraron a la sala de juntas los guapos hermanos Kim, saludando a todos en el lugar.
Después llegó Jungkook, acompañado de Yoongi, saludando a todos.
Yoongi me regaló una calida sonrisa.
Pero faltaban dos personas, pero ya era momento de empezar.
Decidí que era momento, pero un toque en la puerta interrumpió el comienzo de la junta.
- ¡Buenos días¡.- saluda eufórica la rubia y se acerca para darme un abrazo, el cual recibo gustosa.
Detrás de ella su hermano, con el cual tenía una conversación pendiente.
- Hermanito, siéntate aquí.- dice la rubia señalando el lugar enseguida de mi.
Tengo tantas ganas de estrangular a la rubia, pero ignoro la idea, ya que están todos presentes.
- Primeramente buenos días a todos estamos aquí para ver lo de los 10 años de la empresa, también para ver lo del informe para presentarlo después a nuestros padres.- digo viéndolos a todos.- Bueno yo y el Señor Jung-Hoseok le tenemos una buena noticia...
- Se casarán.- interrumpe la rubia, risueña.
Al parecer hoy amaneció muy divertida.
Mientras el resto de los chicos clavan su mirada en mi y sus facciones se endurecen.
Mi-na deveria de ganar un premio por imprudente.
- No.- contesto secante y le lanzó mi mirada asesina a la rubia.- El señor Jung-Hoseok cerro negocios en Estados Unidos, así que por favor démosle unos aplausos.
Todos en la sala empezaron una ola de aplausos, pero la seriedad Hoseok me incómodo.
- Bueno Señores empecemos con esta junta.- los interrumpí.
****
La junta estaba por terminar, acordamos lo de la fiesta y nuevas propuestas, como también el entrenamiento de los nuevos guardaespaldas.
- Bien, Señores y Señoritas doy por terminada está junta, que tengan buena tarde.
Todos se empezaron a levantar de su lugar.
- Hermanito, tengo una cita para ti está noche.- menciono la rubia.
Toda la sala de juntas quedó en silencio total y los chicos miraron a Hoseok.
- Mi-na te dije que no saldría más a citas a ciegas.- menciono el castaño en un tono furioso
sabía que lo avía puesto en evidencia con los chicos.
- Sal Mi-na.- dijo el pelinegro serio, dando una mirada casi asesina a Hoseok.
Yo solo miraba perpleja aquella escena.
Yo no podía salvarlo de esta, solo mire a Jimin, la tención se sentía en el ambiente, de nuevo ese temor se apoderó de mi y un dolor en mi estómago y unas ganas inmensas de devolver mi desayuno se hicieron presentes.
La escena es aterradora para mí, ya que nunca eh visto a los chicos de esta manera, tranquilos pero furiosos.
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