Un regreso inesperado

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Derf: En verdad que sabes cómo pasar desapercibido amigo.- Opinaría su fiel espada.

Algo a lo que su portador sonreiría levemente, el atuendo con el que llegaría al baile era sin dudas diferente al de los demás jóvenes y prominentes figuras.

Era prácticamente al traje que su ancestro había empleado, la ropa característica de la familia real a la cual pertenecía el primer Dragón ranger. Obviamente adaptado para que no se viera su rostro.

Ryo: No tenía ocasión para usarlo, no hasta ahora por lo menos.- Dijo, mientras bebía un poco de ponche.

Derf: Si tú lo dices, aunque admito que si te queda bastante bien. Hasta pareces un príncipe.

Ahogaría una risa, esas mismas palabras las había dicho Ahim cuando se puso el traje por primera vez. A decir verdad, aunque el traje no era su preferido, admitía que se sentía bastante bien al usarlo.

Extrañamente, no necesito de adaptarlo para su forma. Era como si hubiera sido hecho para él...

Mientras observaba las múltiples parejas que se encontraban en el centro. Pero se concentraría en una en específico.

El aura de su hermana se sentía intranquila, como si algo le estuviera molestando. Y no le fue necesario saber de qué se trataba, dada la segunda aura que estaba con ella y, que parecía estar igual o peor que ella.

Ryo: (Al fin se confesaran, ya se habían tardado)- Pensó, viendo su reflejo en el líquido de la copa.

Luego de unos minutos, el aura de ambos se relajaría y en un solo instante en su mente brillarían. Ambos se habían alineado en sus sentimientos, pudiendo notarse el cambio en sus auras.

Ante aquella visión el pelinegro sonreiría, era una buena oportunidad para Louise de tener un momento de paz. Uno que en verdad se merecían...

Decidió tomar un poco de aire para refrescarse, y al salir de la gran sala a uno de los balcones, se encontraría con alguien.

Su semblante se volvería juguetón al ver, a una dama de cabellos rosados y de complexión juvenil. Una que miraba el cielo nocturno, con calma y una gran expectativa. Se trataba de "Louise", quien vestía elegantemente.

Lentos fueron los pasos que daría para llegar a ella, buscando con todo su ser no exaltarla. Cosa que conseguiría con rotundo éxito.

Ryo: Es una bella noche, ¿No lo cree señorita?

¡Meep!

Sobresaltada, "Louise" voltearía para encarar a quien la había sorprendido. Su rostro se enrojecería al ver la persona de quien se trataba, mas por la vestimenta que estaba utilizando.

Louise: E-Eh, Buenas noches... si, si es una bella noche joven Kurosaki.- Diría, intentando sonar lo más tranquila posible.

Todo mientras pensaba, que podría engañarlo y hacerle creer que en efecto, se trataba de Louise.

Lastimosamente para ella, Ryo conocía demasiado bien su aura y comportamiento. Pero decidió no romper su burbuja, por lo que únicamente sonreiría y depositaria un casto beso en el dorso de la mano izquierda.

El sonrojo se haría más fuerte en la chica, mientras intentaba no tartamudear por los actos del pelinegro. Cosa que le parecería algo divertida a Ryo; Habían pasado la noche juntos, además de haber tenido intimidad, ¿Y se sonrojaba por esto?

Ryo: Ya lo creo que si Lady Valliere, aunque si le soy sincero. Todas las estrellas del cielo, no se equiparan a su belleza.

Louise: E-E-Eh, no creo que sea para tanto.- Dijo, desviando la mirada y jugando un poco con sus dedos.

Un Destino DiferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora