First Love Never Dies | Jenlisa

Capítulo 21

Pov Lisa

—¡Lisa! ¡¿Estás bien?! ¡Llevas media hora en la regadera!

Los gritos de Rosé me hicieron reaccionar.

—¡Si! ¡Es que tengo mucha arena en el cabello!

¿Arena en el cabello? ¿No se te pudo ocurrir una mentira mejor? Que idiota.

—¡¿Te ayudo?!

—¡No Rosie ya casi acabo!

¿En qué momento me quedé media hora en la ducha?

Todos mis pensamientos se encontraban en "Ella" la salve, la sentí contra mi pecho, su voz, sus manos tomando las mías, mis labios en los suyos, sin embargo no recuerdo su cara, solo logro ver sus ojos.

Esa voz... Jamás la había escuchado en mi vida.

Apesar de que no recuerdo su rostro apuesto una mano en el fuego a qué es hermosa.

¿Quién carajos es?

¿Si le pregunto a Rosé?

No, mejor no, Capaz que me malentiende y piensa que no confío en ella cuando si lo hago.

¿Jisoo? Tal vez le pregunté a Jisoo.

¿Será que solo la salve y ya?

¿Será posible que nuestro encuentro se haya quedado así? En solo un encuentro...

Pero sus manos... Sus manos eran iguales a las de mi recuerdo en el avión.

¿Será que es la misma chica que vi en mi primer recuerdo?

Espero pronto saber que rayos pasa con mi pasado.

•~•~•~•~•~•

—Vamos Lisa no es tan malo ¡Está deliciosa el agua!

—¡No! ¡No voy a quitarme está toalla de enzima! ¡Se me va a ver todo Rosé!

—¡Ayyy por Dios Lisa! ¡Vamos! Ven a enseñar ese abdomen de acero.

—¡No! ¡Me Niego! N y O NO ¿Me entendiste?

Han pasado tres días desde que llegamos a Tailandia, todo a sido muy hermoso en realidad no habíamos venido al mar hasta ahora ya que nos la pasábamos paseando o comprando recuerdos.

Resulta que dejé a Rosé hacer mi maleta que porque según ella "No tengo estilo de la moda" y ahora me arrepiento ya que me trajo un traje de baño exageradamente revelador para mí gusto.

Estaba sentada en la arena con una toalla enzima, me sentía desnuda a los ojos de la gente.

No entiendo cómo las personas pueden ir a las playas nudistas.

—¡Roseanne Park! ¡Sueltame! ¡NO! —grité cuando Rosé me jalo del brazo haciendo que mi toalla cayera en la arena, automáticamente sentí su mirada en todo mi cuerpo.

¡Dios la voy a matar en la noche con mi almohada!

—Lisa, tienes un cuerpo tallado por dioses lúcelo ¡Mira esas largas piernas!

—¡Cállate!

Rosé soltó una carcajada pero a mí la situación no me tenía para nada contenta.

Con mis brazos intenté cubrirme pero Rosé fue más rápida y volvió a tirar de mi hasta que llegamos al mar y sentí el agua helada en todo mi sistema.

Rosé se hundió en el agua dejándome ahí sola.

Un sensación extraña entro en mí.

Miedo.