First Love Never Dies | Jenlisa

Jennie (7)

Maratón (3/3)

Pov Jennie.

Maldito vestido...

—Cierra por favor.

Aggggggg...

¿Y si ya no voy?

No, no. Ya quedé con Lisa, no voy a fallar.

¿Quién hizo los cierres de los vestidos en la espalda? ¿Que no ven que uno con brazos de Tirex no alcanza a cerrarlo?

¡Ya está!

Gracias a Dios.

Escuché la puerta de mi cuarto tocar.

Es Lisa.

—¡Ya voy!— grité mientras me ponía mis zapatos rápidamente.

Me lancé prácticamente a los brazos de Lisa cuando la vi en la puerta de mi cuarto.

Se ve hermosa.

Lisa aceptó mi abrazo con gusto y enterró su rostro en mi cuello.

Ha pasado casi una semana desde que regresamos de Tailandia. La despedida con Nana fue dura, se que llevo poco conociéndola pero me encariñé mucho con ella, todos los días le estaba mandando mensajes deseándole un buen día.

Me llenaba de ternura cuando me contestaba con puros Emojis, creo que no sabe cómo escribir en el teléfono, pero no importa.

Durante estos días el nivel de apego que tenía Lisa conmigo incremento notablemente, no me quería soltar para nada, se la pasaba a mi lado a sol y sombra, también el número de besos y abrazos que me daba incremento a tal punto que mis labios están totalmente hinchados, pero está bien.

Al contrario.

Yo disfruto de sus caricias y sus besos sin queja alguna.

Es viernes y como cada viernes hay fiesta en la casa de Rosé, por primera vez accedí a ir solamente por curiosidad, Lisa al principio no quiso acompañarme, me suplicaban que nos quedaramos en el cuarto a ver películas abrazadas pero me negué.

No sé, tengo ganas de ir, curiosidad más bien, además de que tengo el presentimiento de que va a ocurrir algo, no sé si bueno o malo pero algo va a pasar.

Lo siento desde hace días.

Lisa terminó accediendo a ir conmigo y Rosé evidentemente se puso feliz al saber que Lisa va a ir a su fiesta después de tanto tiempo.

—¡Nini, te ves hermosa!— dijo Lisa cuando se separó de mí para verme de pies a cabeza.

Estoy usando un lindo vestido blanco con pequeñas flores amarillas.

Lisa no se quedaba atrás, se veía completamente como rockstar. Tenía puesto una chaqueta negra y unos jeans a juego, usaba unos tenis negros y su cabello rubio caía por sus hombros.

Se ve tremendamente sexy.

Fue a arreglarse en su departamento anterior ya que todavía seguía teniendo un poco de ropa ahí, mi cuarto es muy pequeño para las dos.

—Tú no te quedas atrás Manoban.— le dije mirándola de manera coqueta, Lisa sonrió.

—¿Ya estás lista?— me preguntó, asentí emocionada —Vamos.

Tomó mi mano y salimos juntas del edificio, empecé a caminar por la avenida hasta que Lisa se frenó de repente.

¿Y ahora?

—¿Qué haces? El autobús nos va a...

Dejé de hablar cuando sacó unas llaves de su bolsillo, apretó un botón en la llave y el coche junto a nosotras sonó.