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Capítulo 66: A solas en la inmensidad

Tras un rato de vuelo, Ayme decidió replegarse. Devolvió a Janna la apariencia humana, a excepción de las alas. Por primera vez, experimentó la sublimidad absoluta. Se desplazaba en paralelo a la Tierra, a kilómetros de ella. No se percibían fronteras ni contrastes de infraestructuras. Lo animal y humano quedaba oculto bajo capas de agua, verdor y terrenosidad.

AYME: ¿Qué tal? Imagino que bien.

Janna no hizo caso a la voz de la nuca. Prefirió disfrutar del instante en las nubes.

AYME: Creo que lo mejor será que compartamos recuerdos. Nos ahorraremos diálogos. Aunque nunca está mal, pese a saberlo todo.

JANNA: ¿Me valdrá la pena tener tus recuerdos?

AYME: ¿Y a mí los tuyos?

Janna calló.

AYME: No pienses que me vas a dominar. Ahora, somos una. Estate a la altura de la situación.

JANNA: Acepto tus recuerdos.

AYME: ¿Ves? Hay que dar el paso para que haya confianza.

Janna cerró los ojos y relajó la mente. Entretanto, las alas seguían guiando el incierto trayecto.

Uno de los tantos recuerdos de Ayme se presentó ante ella. El paisaje, como de costumbre, era desde los cielos. Las montañas grisáceas rompían la monotonía verdosa de aquel lugar del mundo.

AYME: ¿Ves algo en mis recuerdos?

JANNA: Paisajes. Muy bonitos. Pero...

Janna volvió a abrir los ojos.

JANNA: Sí. Noto a cada segundo cómo fluyen tus recuerdos. Pero no hay ninguno que despierte interés.

Janna notó la lágrima de Ayme sobre la nuca.

JANNA: Bueno. Pues los tendremos juntas.

Janna descendió el vuelo para presenciar nítidamente el océano, pese a la ausencia de luz.

JANNA: Yo he conocido a una chica que, pese a tener gran parte del mundo en su mano, no hizo nada. No era Namuu.

Janna notaba el aroma acuático.

JANNA: ¿Qué cosa podríamos hacer juntas por primera vez?

AYME: Me gustaría ver a mis antiguos compañeros, pero sé que todos mis recuerdos son falsos.

JANNA: ¿Por qué?

AYME: No falsos del todo. Pero sí exagerados. Y creo que lo mejor es empezar una nueva etapa.

JANNA: Así que prefieres hacer algo útil a hacer algo que deseas.

AYME: Hacer algo entre los dos caminos.

JANNA: Entiendo.

AYME: Veo en tus recuerdos una serie de acontecimientos. No sé cuánto te condicionaron para lo que haremos juntas en el futuro.

JANNA: No quiero recrearme tanto en esos recuerdos. Quiero actuar. Hacer lo que nadie pudo.

AYME: Hacer por hacer.

JANNA: ¿Por qué no?

AYME: Porque dudo que quieras ver solamente paisajes durante toda tu eternidad.

Janna calló.

AYME: No solamente te adoro por darme de nuevo existencia. Sino por sentir que puede haber un camino en el vacío que ha sido mi vida. Janna, si seguimos volando así, solo habrá horizonte y horizonte. Por mucho que agitemos las alas y nos sintamos las más poderosas del universo.

Janna redujo el vuelo y descendió aún más, a punto de rozar el océano.

JANNA: ¿Por qué heriste a Ryvanna? Ni siquiera encuentro la respuesta en tus recuerdos.

AYME: Ryvanna... La chica esa. Quería acabar con nosotras. Le di un merecido a la altura. No todo es la muerte.

Janna, sin darse cuenta, salpicó el agua.

AYME: Aunque, viendo tus recuerdos, no sé si hice lo correcto.