Your daddy lives by himself

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Harry despertó al día siguiente, bastante hambriento y con ganas de comer frutas. Tenía la sensación de necesitar comer frutas para sentirse bien, pero no tenía ganas de levantarse. Draco lo abrazaba sin dejarlo despegarse ni un centímetro.

Él sabía que los alfas podían entrar en ese estado después de un nudo, pero nunca le había prestado mucha atención a esa idea, no era algo que le interesara realmente. Ahora que lo estaba viviendo, le parecía lo más adorable del mundo y se preguntaba si todos serían así de tiernos.

Se suponía que el alfa que acababa de enlazarse o de anudar a su omega, se pondría muy celoso de todo y de todos, por las cosas más simples y ridículas se podría poner violento con quien se acercara al omega, pero Draco no parecía en esos momentos uno de esos alfas vueltos locos por las hormonas que tan desagradables le parecían a Harry. Parecía que realmente lo necesitaba para respirar.

Cada vez que Harry necesitaba alejarse un poco, Draco intentaba evitarlo pero al final no hacía nada demasiado impulsivo. Cuando Harry volvía a su lado, lo más rápido que podía porque su corazón comenzaba a oprimírsele con cualquier pequeña distancia que tuvieran, lo encontraba muy quieto esperando por él, con cara de tristeza.

Espero por su fruta picada acostado en la cama, no le apetecía levantarse y Draco le había dicho que se la llevaría. Teddy también estaba disfrutando mucho de la nueva forma de convivir con Draco, se veía muy contento. Se había quedado con Harry en la habitación, pero luego de unos minutos se bajó de la cama para ir tras el alfa.

Volvieron juntos con el plato de fruta que Harry había pedido y ambos lo observaron comerla con tanta atención que lo hicieron sentir apenado. Después de comer todo excepto el melón, e ir por una segunda ronda de piña él mismo, se pasaron a la sala de estar para ver algún programa juntos.

A Draco no le interesaba mirar ningún programa, tenía toda su atención en Harry y sus reacciones ante lo que pasaba en la TV. No hacía más que abrazarlo y también a Teddy, pero tenía ganas de besar a su omega y lo deseaba intensamente. Aunque se hubiese dicho muchas veces que lo que había pasado solo sería una vez, era muy difícil no desear repetirlo.

No podía evitar necesitar tenerlo cerca, aunque supiera que era lo que menos debía permitirse. Podía notar como el cachorro también lo olía más de lo que él recordaba haber notado antes, pero podía estar equivocado.

Harry estaba viviendo en una burbuja de amor, pasaron los próximos tres días juntos, realmente juntos. No hablaron de lo que había sucedido, pero Draco estaba junto a Harry en cada momento del día y Teddy era cuidado por ambos.

El omega se sintió adorado con tan solo eso, no necesitaba palabras de amor, el alfa había logrado hacerlo sentir como si fuera lo más importante para él. Lo observaba embobado y lo tenía abrazado en todo momento no importando si hacía un poco de calor.

No se había vuelto un gran conversador ni había logrado expresarse de la mejor forma de la noche a la mañana, pero cuando el omega hablaba, lo escuchaba con la mayor atención que Harry había sido escuchado en su vida. Draco siempre lo había escuchado con atención, pero ahora que se permitía mirarlo, Harry se sentía muy apreciado.

-Entonces cuando volví a Canterbury, no pude volver a ver a las hamburguesas de la misma forma. Eran mi comida favorita mientras pensaba que era huérfano, y aunque mis tíos siempre hayan sido tan amorosos y cuidadosos conmigo, eso no cambiaba el hecho de que me había quedado sin mis papás...

Harry había estado hablando con Draco de cosas importantes para él, las cuales solo había hablado en sus terapias. Estaban viendo a Teddy jugar con la arena a pocos metros de distancia y el sol estaba a punto de ocultarse.

Stuck with you (DRARRY) (OMEGAVERSE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora