• Tu eres para mi. (Carlos Sainz jr. +18)

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Desperté y Carlos no estaba a mi lado... por un minuto eterno sentí que todo lo que había dicho ayer había arruinado todo hasta que escuché la puerta abrirse.

- Buen día mi niña- dijo mientras entraba con unas bolsas en sus manos...

Mi corazón se desaceleró y respire en paz porque no me había abandonado.

- Buen día mi amor- Le dije con un hilo de voz después de mi terrible susto...

- Te traje esto... espero que te guste.

Abri la primer bolsa que me dio y era un vestido negro hermoso, la segunda tenía un par de zapatos también negros y la tercera todavía la sostenía el...

- Me encanta mi amor, es un vestido muy hermoso... dije mientras me miraba al espejo intentando ver como me quedaría..

- Esta es especial, ven.- dijo haciendo gestos de que me sentara a su lado.

Saco una caja, la abrió frente a mi y dijo: - Vi esto y sentí que lo hicieron solo para ti.-

La caja contenía un collar de oro, con pequeñas piedras preciosas.

- Carlos... no... eso es muchísimo para mi...

- Nada, entiende bien, nada es mucho para ti, mereces todo lo bueno de este mundo y más y yo voy a dártelo hasta el último de mis días.

Lo mire casi llorando, no podía creer que ese hombre hiciera tantas cosas por mi.
- Carlos, a mi no me interesa tener el mejor vestido, los mejores zapatos o cosas carísimas, el hecho de que estés conmigo ya es motivo suficiente para que yo esté feliz.

- Estas conmigo y yo pienso cuidarte, amarte y llenarte de regalos porque eres mi niña

- Que locura estar viviendo esto...- dije y empecé a reír...

- Porque te ríes?- Pregunto sin entender nada...

- Mi amor, yo te miraba por la tele, te veía en revistas, Instagram y estaba enamorada de vos.. me parece irreal aveces tenerte tan cerca, poder besarte, acariciarte, siento que es un sueño y que en cualquier momento puedo despertar...

- Pues bienvenida a la realidad preciosa- dijo y me tomo en sus fuertes brazos para darme un abrazo que sanaria todo mi corazón...

Me puse el vestido, los zapatos y el collar que me había regalado para salir a almorzar, era nuestro último día en Mónaco y quería darme según el el mejor día de mi vida...