Capitulo 3

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- Entonces.. como has estado? - Pregunto dulcemente.

- Eso debería de preguntarte yo a ti. - Cassiopeia sonrio aún más. - No sonrías, sigo enfadado. -

- No es cierto, se cuando mientes - Afirmó - Me extrañaste? Si lo hiciste verdad? Quien es tu linda y preciosa estrella? Cassi lo es! - Exclamó lanzándose a sus brazos. - Vamos! Dilo! -

Severus rendido ante la niña, dejo que una sonrisa tirara de sus labios.

- Cassi es mi pequeña y linda estrella.. - Murmuró abrazándola más fuerte. - Que estará castigada por su padrino gruñón y malhumorado. - pronuncio divertido.

- Oye! Y eso por que? - Pregunto ofendida.

- Por traer a esa cosa horrible y rabiosa contigo. -

- Crucius, no es horrible.. - Murmuró con el ceño fruncido.

El hombre suspiro viendo al canino sentado en el sofá, atento a su conversación.

- No hablo de esa cosa, hablo de la otra cosa.. - Cassiopeia Inclino su cabeza suavemente sin entender. - Riddle. -

- Oh.. bueno.. tienes un punto. Aunque tampoco es horrible.. - Murmuró tranquilamente.

El azabache abrió sus ojos horrorizado.

- Dime que no te hizo nada. - Pregunto en pánico. - No te ha hecho nada verdad Cassiopeia? -

La rubia lo miro fijamente.

- Define "Nada" en tus palabras.. - Severus se tambaleó haciendola reír.

- Por Salazar..! - murmuró nervioso. - Por Merlin..! -

- Por Magic! Por Muerte! - Pronunció imitandolo. - Estamos nombrando deidades? También esta Lilith y.. - Ante el semblante de su padrino, decidió no seguir. - Vamos Sev.. no estas enfadado o si? Volví por que te extrañaba.. - Murmuró suavemente.

- Oh no, no no no! - Polaris agito sus pestañas inocentemente - Yo conozco esta técnica. Siempre es lo mismo, yo me enfado y tu luego usas tus cosas de niña mimada para que te perdone! -

- Y funciona.. - Murmuró divertida.

- Que has dicho? -

- Nada..! Y como no dije nada! Me iré. - Tomo las galletas sobre la mesa y tirandole una a Crucius, ambos salieron de allí. - Te amo Bye!! -

Al salir encontró a Mattheo fumando un cigarro molesto, pero al verla su semblante cambio a uno dulce.

- Por qué te retrasaste tanto..? - Murmuró escaneandola con la mirada. - Que te ha dicho? -

- Solo me regaño por no avisarle y luego se enfado por.. Olvídalo. - Vio como el azabache lanzó su cigarro lejos y la tomo de la cintura. - Theo.. - Murmuró nerviosa. - Puede haber gente aquí.. además tu también tienes que hablar con él. -

- Hmm? Puedes repetirlo? Me perdí en tu aroma.. - La chica se sonrojo - Puedo hablar con él otro día.. tu eres más importante ahora. -

Un golpe en la cabeza lo hizo detenerse.

- Te esperaré aquí. Ve y habla rápido, ni siquiera sabemos donde queda la sala común.. - Murmuró con molestia.

Obedeciendo entro a la oficina con desgano.

Severus lo miro fijamente para luego suspirar.

- Quita esa cara, yo tampoco estoy aquí por que quiero. - Mascullo sin paciencia. - Que quieres? Y ve al grano por que mi linda princesa me espera. -

Too Sweet (Mattheo Riddle, T.R) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora