Matthew
El sábado en la mañana nos reunimos en el colegio para de ahí ir hacia el lugar donde comenzaríamos la sesión de fotos.
En la tarde sería nuestro partido de fútbol, por lo que debíamos intentar hacerlo todo lo más pronto posible.
El lugar escogido para la sesión era el puerto de la ciudad. Nadie solía llegar hasta allí porque era zona restringida, pero al parecer la madre de Danya era alguien con muchos contactos.
Recuérdenme no hacer enojar a esta pequeña arpía nunca más.
Subimos a uno de los yates. La vista del lugar era increíble, el mar estaba hermoso y lucía unos colores espectaculares. La brisa nos golpeaba en el rostro y el sol resultaba reconfortante.
Cruzamos todo el muelle cargando la cámara, el trípode, algunos cambios de ropa y muchas cosas más que pesaban como el demonio.
—Primero que todo, hagamos unas fotos en distintas posiciones. Ya saben, para saber cuales son sus ángulos y esos detalles. Andy —ordenó Danya al chico que se había sumado a la sesión —: necesito que coloques la cámara de forma tal que se vean ambos de cuerpo completo, con su diferencia de tamaños marcada.
El chico asintió y comenzó a colocar la cámara, cuidando que cumpliera con los requisitos que la “jefa” había dicho. Otra chica se había sumado a la sesión y se encargaba de maquillarnos y peinarnos.
—¿Segura que podemos estar aquí? —inquirió Hajun mientras la chica de antes lo terminaba de maquillar.
—Claro que sí —respondió Danya con las manos en la espalda mientras estudiaba el resultado del peinado de Hajun —. Este yate es de mi padre. No tendremos problemas.
Era un poco difícil mantener su trabajo intacto cuando la brisa del mar azotaba constantemente.
El cabello un poco largo de Hajun se mecía hacia todos lados, sería mucho más difícil mantenerlo en su lugar.
Yo, por mi parte, ya estaba listo y al tener el cabello tan recortado, no tuve problemas.
La primera sesión era con ropa informal, ambos usábamos camisas, short de playa y sandalias.
La mía tenía unas palmeras, mientras que la de Hajun era de flores azules. Suponía que los trajes serían para otra sesión. Esto iba a ser un proceso largo.
Demasiado para mi gusto.
Nos colocamos cerca de las barandas del yate. Con el mar hermoso y brillante detrás.
—Bien, estamos listos —anunció Danya y se acercó para tirar de nuestros brazos como si de marionetas se tratara —.
Colóquense de frente. Hajun, dame un perfil y Matt míralo a él.Con una marcada incomodidad obedecimos. Me coloqué de frente a él, sin mirarlo a la cara.
—Chicos, por favor, necesito que se acerquen un poco más… y mírense… de eso se trata.
Cuando hicimos lo que pidió fue hasta la cámara y se inclinó para comenzar las tomas. Los flashes comenzaron a destellar.
—Bien, muy bien —nos celebró —. Han nacido para esto definitivamente. Se ven muy guapos los dos. Ahora, Matt mira a Hajun…con intensidad.
Bufé, pero lo miré. Solo por obedecer y terminar cuanto antes. Tenía muchas cosas que hacer, además de un juego que ganar en la tarde.
Nos habíamos mirado otras veces de frente, pero creo que nunca había reparado muy bien en él.
Realmente era…atractivo. Sus ojos eran achinados —obviamente—, de color oscuro, y prácticamente desaparecían cuando sonreía.
Su cabello era brillante y muy negro. El olor de su champú de frutas inundó mi nariz cuando la brisa vino desde atrás de él.
Sus labios eran pequeños y definidos, además de que el color que usaba en ellos le quedaba bastante aceptable.
¿Acaso estás halagando mentalmente a un chico? Ten un poco de decencia, Matt.
—Deja de mirarme así —me dijo entre dientes, simulando una sonrisa.
—¿Así como?
—Como si me estuvieras estudiando.
—¿Y qué si lo hago? Se supone que es lo que ella nos pidió.
—Nada, descubrirás que estoy mejor que tú y te sentirás inferior.
—Eso no pasará jamás, tengo demasiada autoestima.
Resopló y se movió a un lado.
La voz de Danya me hizo cambiar la mirada hacia ella.
Su pie repiqueteaba en el suelo.—Ahora necesito que Hajun ponga su mano en la espalda de Matt.
Él me miró un poco dubitativo, pero cuando asentí colocó una mano en mi espalda y tiró de mí hacia su cuerpo, presionándonos juntos.
Apoyé una de mis manos en su pecho. Su corazón estaba latiendo muy deprisa.
—Tu corazón se va a salir —le dije con un tono burlesco. Era hora de mofarme yo de él —. ¿Acaso te pongo nervioso?
—De ninguna manera… no despiertas nada en mí. —Presionó aún más su agarre en mi cintura.
Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo.
—Ya esto… creo que es demasiado, tengo novia… —dije y me aparté.
—Solo estamos posando.
—Está bien, creo que tengo suficiente material por hoy —concluyó Danya mientras salía de atrás de la cámara —. Editaré las fotos esta noche. La próxima sesión será en trajes. Gracias por su colaboración, caballeros. Hemos terminado.
¡Qué cínica! Como si no nos hubiese amenazado.
—Ah, y Hajun —ella fue hasta él y colocó una de sus manos en su brazo —. Puedo mostrarte el lugar ahora si quieres.
Él sonrió y la observó de arriba abajo con diversión.
—Me encantaría.
Ni siquiera pueden resistirse a coquetear así delante de todos. Repugnante.
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The love you're born to find
RomansaLa actitud desenfadada y liberal de Hajun solía atraer la atención de todos los que lo conocían. Matthew, quien goza de un excelente récord académico y una conducta impecable, detesta (y envidia) el desenvolvimiento del que presume el chico. Para t...