Ricky
Llegó como si no hubiera pasado nada, ignorándome como si me hubiera visto hace unas horas, como si no fuera un jodido año sin vernos.
La tengo contra la pared, mi mano está alrededor de su cuello. —"Dime qué demonio pasó"— dije buscando sus ojos.
—"Nada, regrese y eso es lo que importa".— contesta intentando quitar mi mano de ella.
—"¿Qué te hicieron? ¿Te torturaron?" —preguntó. Imaginar lo que le hicieron en un año hace que quiera destruir a todo.
—"Me ves como una mujer que fue torturada". — Habla señalándose su cuerpo. — "Solo me tomé unas vacaciones"
—"¿Unas vacaciones?"— contesté lo mismo con enojo porque estaba actuando como si no hubiera sido secuestrada.
—"Suéltame, a mi esposo no le gustará que un hombre tenga a su mujer contra la pared".
—"Qué demonio está diciendo, ¿qué esposo? — pregunté. Mateo me dijo que la vieron salir de una iglesia pero que me diga ella que se casó mientras yo estaba como un estúpido buscándola por el mundo me hacía sentir como el hombre más tonto del mundo.
—"Me hace con Noah".— dice.
—"Con ese estúpido que te secuestro".
—"No, él era solo Thiago su hijo, me casé con el verdadero Noah". — No entendía ni una mierda lo que me estaba diciendo.
Una pregunta resonaba en mi cabeza; miré que su cuerpo estaba igual para ser una mujer que estaba secuestrada incluso mejor.
—"Mi hijo, ¿dónde está? " — pregunté.
Sus ojos se abrieron de par en par, pero así como se abrieron lo cerró. Miré cómo respiró profundo, luego abrió sus ojos y era como si otra mujer se hubiera a ponderado de ella. Miré odio en sus ojos.
—"No sé de qué me habla".— contesta.
Apreté más mi agarre sobre ella. —"Mi hijo, estabas embarazada de mí cuando te secuestraron".
—"Debe estar completamente loco, nunca he estado embarazada, mucho menos de un patético como tú".— Sus palabras solo me confundían más, la solté. Ella se enderezó y me miró con arrepentimiento, pero luego volvió a ser la misma mujer de antes.
—"Te quiero fuera de mi casa hoy mismo, ya tu servicio no es requerido. Volvió la verdadera reina".
¿Quién era esta mujer y dónde está la otra mujer de la que me había enamorado, esta sin duda no era ella?
—"No me voy ahí de aquí sin hablar contigo".— contesté con enojo.
—"Mi esposo llega en 3 días, no quiero verte cuando regrese de hablar con Mateo".
—"Me importa una mierda tu esposo". — Hablé caminando hacia ella. — "Dime qué diablo pasó en ese año para que cambie tanto, qué daño te hicieron".
—"No me hicieron nada, ya deja de buscar un pretexto para actuar como un príncipe y salvar a la damisela".—Empezó a caminar.
—"No me iré sin hablar contigo".— grité.
—"Ya habló lo suficiente, te quiero fuera de mi casa".—habla mientras seguía caminando.
—"Me importa una mierda lo que diga, no me iré sin saber qué diablo está pasando".
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Guerra de Amor {2}
AcciónAdelaida. Es hora de volver a ser la reina de Italia pero esta vez sin corazón. Dispuesta a matar y a destruir a todo en mi camino. El tiempo solo te hace más fuerte, pero ¿dónde está la fuerza cuando vuelve a ver al amor de tu vida? Tanto tiempo y...