¿QUIZÁS UN NOSOTROS? (LIBRO 2 ) " BORRADOR"

CAPÍTULO CUARENTA Y UNO

Danis.

Me duele todo, intento abrir mis ojos, pero el dolor no me deja, sigo intentado y cada vez que lo hago gimo de dolor, juro que voy a matar a Lucas, ya he soportado mucho. Abro por fin mis ojos y veo una luz blanca, estoy en el hospital, eso es seguro. Harry me fue a salvar, aún no lo creer, mi enemigo y hermano del amor de mi vida fue por mí, pero antes de ser mi enemigo fue un gran amigo, yo fui un imbécil por hacerle tanto daño, pero espero que algún día el me dé su perdón, también espero poder volver a ver a mi Malysh, solo espero que no me odie y si él no me quiere cerca entonces me alejare, sé que fui duro con mis padres, así que tomare una decisión.

Dejo mis pensamientos a un lado cuando la puerta se abre y de esta entra el doctor, definitivamente ya sé dónde estoy.

—Es un gusto verlo de nuevo señor Danis.

—No puedo decir lo mismo, doctor. Soy yo el paciente y eso no me gusta.

—Lo sé, pero lo importante es que estas vivo.

—Pero a que costo, como sea. ¿Cómo están mis amigos?

El doctor se queda en silencio y eso encienden mis alarmas, maldita sea, algo paso.

— ¿Quién se murió?

—Nadie, ¿Por qué lo dice?

—Por qué te quedas callado y no dices, nada, ¿dime que pasa?

—Luciano, está mal, él se encuentra en coma en este momento, tú está mal, las heridas que tienes en tu espalda y abdomen sus muy fuertes, tu cabeza está muy golpeada así como el resto de su cuerpo. Andrews, está mal, perdió el oxígeno por mucho tiempo y eso le afecto a sus pulmones, él no puede respirar por sí mismo, en este momento está respirando por una máquina. Marco, está un poco mejor, pero los golpes que tiene lo mantienen inconsciente. Harry ya está un poco mejor.

Luciano, Andrews, no puede ser, es mi culpa, de suerte Harry ya está mejor e igualmente Marco, pero lo demás no, tengo que recuperarme rápido para poder lograr buscar venganza, esto no se quedará así.

— ¿Se van a recuperar?

—Eso depende de lo que pase, hay que esperar.

—Pregunte, ¿sí o no? — digo enojado, necesito saber que puede pasar y estar preparado, espero la respuesta con mucho nervios y preocupación.

—No lo sé, como doctor te lo digo, solo ahí esperar. Yo tengo que irme, pero me da gusto que este despierto, descansa Danis.

Veo cómo sale el doctor, suspiro, pero al hacerlo me duele el estómago, mejor dicho me duele todo el cuerpo, no me puedo mover mucho y eso me molesta, en este momento estuviera con Josué lejos de aquí, pero no estoy solo en un cuarto de hospital, mis amigos están heridos por mí, soy un mal amigo, pero yo sé que el doctor sabe algo de la salud de ellos y no me hizo decir, que coraje, en este momento necesito que ellos se levante de esa cama en donde se encuentran, me intento mover y me quema la espalda, ese látigo me lastimo la espalda.

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Definitivamente odio los hospitales, no tengo ni idea a qué hora, pero sé que ha pasado como media hora desde que se fue el doctor, he visto que entra las enfermeras y hacen revisiones y se van, me he acostumbrado a ver a la misma enfermera salir y entrar por la puerta como cinco veces. Cierro los ojos y en eso escucho como la puerta se abre de nuevo y seguro es otra vez esa enferma, no hago mención de verla y mantengo los ojos cerrados, solo necesito irme de aquí, siento que si en cinco más que venga de nuevo iré a golpear a Erick, yo no sé si ese imbécil cree que tiene a un bebé que manda a cuidar, odio que haga eso. Algo cálido sujeta mi mano, me enojo por que nadie puede tomarme de la mano, solo Josué, abro los ojos enojado para ver a la persona que se cree con derecho a coger mi mano. Lo primero que encuentro me deja congelado. Mi respiración se acelera, esto no puede estar pasando. Cierro los ojos para ver si estoy soñando, pero al abrir veo lo mismo.

Sus ojos verdes me miran fijamente. Es él. Mi chico. El amor de mi vida. Mi Malysh.

Él está aquí, ¿por mí? Espero que sí, pero seguro esta por sus hermanos, después de todo él me odia y entiendo la razón.

—Hola — susurra y eso hace que más mi corazón se acelere, extrañaba escuchar su voz. Sigue siendo igual de hermoso. Su ropa negra le queda perfecto, es muy bello, su cuerpo que es mío, donde yo hice lo que quise con él. Aún recuerdo todo lo que vivimos. Mis manos en su perfecto cabello.

—Hola. — hablo intento no mostrar la emoción que tengo a verlo al frente mío.

— ¿Cómo estás? — una pequeña sonrisa se forma en mis labios, después de todo él se sigue preocupando por mí. Dejo de sonreír, no quiero demostrar nada todavía.

— ¿Te preocupa cómo estoy? — fruñe el ceño con lo que le acabo de preguntar, por lo que veo no le gusto, porque una sonrisa sarcástica salió de su labios.

— ¿De verdad me estas preguntando eso?

—Contesta Malysh, te hice una pregunta. ¿Estas preocupado por mí?

Deja de reírse y me mira fijamente enojado, no lo sé, pero amo verlo enojado. Grita y eso me hace sonreír un poco. Mi chico siempre ha sido mío.

— ¡Si! ¡Maldita sea! ¿Cuándo lo vas a entender, Christian?

¿Me acaba de llamar por mi nombre y no por mi apodo? He extrañado escuchar mi nombre en sus labios.

— ¿Por qué te preocupas por mí?

— ¿En serio?

—Dime Malysh.

— ¡Te amo joder! ¡Estoy jodidamente enamorado de ti, Christian!

Una pequeña sonrisa se forma en mis labios, es mi chico, siempre ha sido mío, desde ese día que choco conmigo en mi bar. Lo jalo más a donde estoy.

—Yo también te amo, Malysh. Siempre te he amado y nunca lo dejaré de hacer.

Sello mis labios con los suyos, por fin vuelvo a probar el sabor de sus labios, tengo al amor a mi lado y eso me hace muy feliz, esta vez no lo dejaré ir, él solito vino a mí y esta vez ya no va a correr de mi lado, si es posible lo ataré, pero no lo dejaré. Tengo que tener a mi lado. 

Nota de la autora:

Hola diablillos, por fin viernes, le traje el capítulo que seguro estaba esperando. Este es el ultimo que tenemos de ellos, despídanse hasta nuevo aviso, ya va uno de los chicos despierto, quedan dos :( , nos vemos el miércoles, no se olviden de comentar y votar, besos.