Narra Addison
Hay una muy simple razón por la cuál no tolero a mi ex suegra. Ella pudo haber sido una madre ejemplar para Derek, lo ama por sobre todas las cosas. Pero nunca fué esa madre para Amelia, yo tuve que cargar con las consecuencias y los traumas que ella le causó, tuve que ser su madre porque ella nunca le dió el amor ni la seguridad que Amy merecía, jamás la perdonaré por haber lastimado a mi hermanita.
Ahora mismo, ella nos trajo a comer a un restaurante con temática de Disney, para seguir mimando a Harley y evadir sus constantes malos tratos hacia mí. Le he dicho en repetidas ocasiones lo que siento por ella y lo mucho que detesto su comportamiento hacia su propia hija, creo que debido a eso, tampoco soy su persona favorita. No quiero decirle de mi embarazo porque sólo me hará sentir incomoda y va a arruinar mi felicidad, no necesito eso, mientras menos contcto tengamos, será mejor.
- ¿Te gusta éste lugar, mi niña? - preguntó Carolyn, pero Har seguía molesta, por su culpa ahora no podría tener un celular.
- Es lindo - respondió ella con indiferencia.
Conversamos como si nada estuviera pasando, como la familia de Derek siempre lo ha hecho cuando Amelia o yo estamos presentes. Nos sirvieron la comida y un olor muy fuerte me provocó una arcada.
- ¿Estás bien, amor? - preguntó Mer, echando aire en mi cara para que pudiera respirar.
- Sí...uno de ustedes pidió pescado, el olor me está matando - respondí, dando respiraciones profundas para contener mis ganas de vomitar.
- ¿Estás enferma? - preguntó Carolyn, con un repentino interés en mí.
- Eso me temo, creo que cancelaré mi cena, mi estómago no se siente listo para comer - dije, apartando mi silla para evadir el olor a mariscos que me perseguía.
- Pediré un vaso de agua - dijo Mer, llamando al mesero.
- Gracias, linda, creo que necesito tomar aire, con permiso - dije, besando la mejilla de mi novia y levantándome para salir al balcón.
Me apoyé sobre el barandal, observando la vista directa al parque de Disney, se veía muy bonito de noche, sería más mágico si no tuviera éstas terribles náuseas.
- ¿Quieres que regresemos al hotel? - preguntó Mer, abrazándome por atrás y besando mi hombro.
- No, ya nos escapamos una vez, la bruja empezará a sospechar - dije, volteando para besarla bajo la luz de las estrellas.
- ¿Ya te dije lo hermosa que eres? - preguntó, dándome besitos en mi rostro que bajaban por mi cuello.
- Creo que me lo dijiste un par de veces - jugué, sonriendo y recibiendo sus besos.
Nos abrazamos y dimos un par de vueltas como si fuera una danza. Se sintió tan bien poder estar con ella, me da seguridad, sus brazos son como mi refugio de todo lo malo que pueda pasar en el mundo.
Narra Meredith
La cena continuó con normalidad, Harley hizo las paces con su abuela y Derek consideró tal vez dejarla conservar el teléfono, fue una discusión muy larga en la que yo preferí no meterme, sólo me dediqué a hacerle caras a Harley y pelearnos en voz baja como si no hubiera nadie más.
- ¿Ya podemos volver al hotel? Estoy cansada - dijo Addie, con un malestar que se notaba leguas de distancia.
- Claro, mi princesa hermosa, todo lo que tú quieras - dije, dándole un toquecito a su linda nariz.
- Deja de decir eso, me sonrojas - se quejó, con sus mejillas rojas como manzanas.
- ¿Cuánto tiempo de embarazo tienes? - preguntó Carolyn, haciendo que mi novia por poco se ahogue.
- ¿De qué hablas? - preguntó ella, al borde de un colapso nervioso.
- No finjas, linda, se supone que somos familia, podemos contarnos lo que sea - dijo, dejándola sorprendida por esa repentina actitud.
Carolyn abrazó a mi mujer con una tierna familiaridad, pero ella no estaba muy convencida.
- Sé que hemos tenido nuestros roces en el pasado, pero eso no me impide estar felíz por tí - dijo, acariciando el rostro confuso de Addison.
- Gracias...no sé qué decir - respondió ella con cierto nerviosismo.
Ni Derek ni Harley podían creer lo que veían, sólo espero que sea un gesto honesto y no sea sólo un truco para luego lastimarla, vigilaré muy de cerca a esa mujer.
Narra Addison
Los siguientes días de vacaciones fueron un poco extraños, por un lado, todos me están protegiendo y mimando, pero por otro, despierto cada mañana con náuseas, es muy molesto.
- Hola, nena ¿Lista para nuestro último día en Florida? - preguntó Mer, abrazando mi cintura mientras yo cepillaba mis dientes.
- Sí, nuestro bebé conocerá la playa antes de nacer ¿No es lindo? - dije, sobando mi vientre.
- Tú eres linda - dijo mi hermosa novia, besándome con ternura.
- Te amo...ahora cierra la puerta del baño y hazme tuya - dije, subiéndome al lavabo y abriendo mis piernas para enredarlas alrededor de su cintura.
- Me encanta ésta parte del embarazo - respondió, besándome apasionadamente y apretando mi trasero con fuerza.
Cada pequeño roce de su piel con la mía me hacía gemir como loca, las hormonas hacen que me excite demasiado, y con una novia tan sexy, es imposible resistirse.
Lo hicimos por casi dos horas, utilizando nuestras bocas, nuestras manos e incluso un pequeño juguete que ocultaba en mi bolso para ocasiones especiales.
- Amor, ya debemos irnos - dijo Mer, mientras yo besaba y masajeaba sus pechos.
- Un ratito más...- pedí, mordisqueando sus pezones.
- Aah...Addie...ya basta - rogó, sin detenerme cuando mi mano empezó a tocar su zona, haciendo presión y movimientos firmes.
- ¿Segura que quieres que me detenga? - pregunté, metiendo un dedo en su interior sin dejar de estimular su clítoris.
- Sólo un ratito más...- gimió, entregándose por completo a mis habilidades manuales.
Besé su abdomen perfecto y llegué hasta su zona, empezando a succionarla y besarla, haciéndola suspirar. Metí dos dedos, moviéndolos dentro y fuera de su cuerpo con un ritmo que aumentaba cada vez más. Lamí cada rincón de su intimidad, sintiendo una presión que empujaba mis dedos, como si algo fuera a estallar.
- Addie...creo que algo va a salir...- suspiró, mientras un chorro de líquido transparente saltaba de su vagina, empapando mis dedos.
Se retorció entre gritos y calambres de pasión, culminando en un orgasmo demasiado fuerte. Limpié con mi lengua cada gota que salió de su interior, disfrutando de su delicioso sabor.
- Me encanta empezar mis días con mi boca ocupada - dije, subiendo para besarla, mientras ella intentaba volver a respirar.
- Me encanta que me convenzas de éstas cosas - respondió ella, besándome y acercándome aún más, abrazándome y llenándome de su amor.
Luego de esa sesión mañanera, por fin nos decidimos a salir y empezar la jornada. Dimos un paseo por la playa, disfrutando de un momento romántico mientras Derek y Har disfrutaban de las olas.
- Algún día vendremos aquí con nuestro bebé - dije, apoyando mi cabeza en su hombro.
- Recorrería el mundo entero con ustedes - dijo ella, acariciando mi vientre y dándome besitos tiernos.
Creo que fue la forma perfecta de finalizar nuestro viaje, resultó ser mucho más bello y divertido de lo que creí, seremos una gran familia.
..................................................................
Yo también me dejaría convencer por Addie 🫦
ESTÁS LEYENDO
No Te Odio // Meddison // Grey's
FanfictionOtra historia, pero ésta vez las cosas son más complejas.