Henry no comprende nada aún, pero hoy estamos celebrando su primer cumpleaños, lo llevamos al parque y le dimos sus comidas favoritas para que pudiera disfrutar su día al máximo. Podría pasar todo el día en un columpio y sería el bebé más felíz del mundo, esa risa hermosa me tiene embobada, hubiera deseado estar columpiándolo el día entero, pero eventualmente tuvimos que regresar a casa.
Una vez en casa, sus tias y primos llegaron de visita, los gemelos de Arizona están enormes, son dos cositas preciosas que se parecen mucho a su mamá y aman jugar con Henry, son adorables.
- ¿En dónde está el cumpleañero? - preguntó Callie, queriendo saludar a mi pequeño.
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- Lo tiene su tía Amy, está loca por él - señalé, indicando quién tenía cautivo a mi bebé.
- ¿Quién es el niño hermoso de su tía? - repitió, con vocecita tierna mientras paseaba a Henry.
- Déjame saludarlo ¡Hola, precioso! Feliz cumpleaños - dijo Callie, dándole un gran beso.
Amo ver a nuestra hermosa familia reunida, me quedé parada apreciando aquellos hermosos momentos.
- ¿En qué momento creció tanto? - preguntó Addie, apoyando su cabeza en mi hombro.
- No lo sé, quiero que sea mi dulce bebé para siempre - dije, haciendo pucheros y pensando en que algún día será un adulto que sólo nos visitará de vez en cuándo.
El resto del día transcurrió con normalidad y con mucho amor alrededor. Nuestro pequeñín está empezando a caminar, balbucea algunas palabras sueltas y crece cada día más, soy una mamá demasiado sentimental.
1 año y 6 meses después
Narra Addison
Hoy empieza una nueva aventura, una nueva etapa para todas nosotras. Mer regresará de un viaje de trabajo, un voluntariado en África, Har está empezando la preparatoria y yo acabo de convertirme en la dueña del Mercy Grace de Seattle, estoy emocionada pero al mismo tiempo siento demasiada presión.
- ¿Ya estás lista? Tenemos que buscar a tu mamá en el aeropuerto - exclamé, entrando la cuarto de mi niña.
- ¡Mamá! Estoy semi desnuda ¿Por qué no golpeas antes de entrar? - gritó, aventando un almohadón.
- Lo siento, lo siento, no volverá a pasar- dije, saliendo rápido, mientras cubría mis ojos.
- Estaré lista en cinco minutos, no sé qué hacer con mi cabello - dijo, sintiéndose frustrada.
Es una adolescente de 15 años, a veces tiene conflictos con su cuerpo, se siente algo presionada por ésta nueva escuela y entiendo su molestia.
- Amor, se te ve precioso de cualquier forma, sólo péinate y baja, iré a darle a Henry su desayuno - dije, dándole un poco de espacio.
