(94) You and Me

0 0 0
                                    

El fuego intenso de mi amor por ti es lo que aún me permite estar de pie y luchar, luchar por ti, por mi y nosotros.

POV José...

La noche fue todo un caos con un giro tan drástico que a penas y lo ví venir, en serio estuve tan ciego todo este tiempo ¿Por qué nunca me lo dijo? Era lo que peor me hacía sentir, si fue como dijo no quería ni imaginarme como se estuvo sintiendo.

Al llegar a casa todo fue un silencio profundo y muy incómodo, no hubo rastro de ella en nuestra habitación y al intentar entrar a la de los niños no pude, me quedé tirado ahí afuera de esa habitación donde dentro se encontraba todo mi mundo.

Por estúpido quizá estaba a punto de perderla de nuevo y sin darme cuenta. Nunca imaginé que Sofía tendría ese tipo de sentimientos por mi, por ciego y estúpido.

A la mañana siguiente desperté exaltado a causa de una pesadilla, me levanté del piso con un fuerte dolor de espalda y fui a la habitación a darme una rápida ducha.

Me apresuré en vestirme y salí de casa hacia donde mi madre, sabía que ellos se habían quedado ahí y específicamente por pedido de ella. Al llegar a casa, me quedé observando a mi madre regando las flores del jardín.

¿Cómo era posible que después de tanto tiempo no podía aceptar a mi esposa? Me adentré al jardín y sonrió al verme, y abrió sus brazos para que fuera hacia ella. Me acerqué y la abracé en silencio.

- Que raro verte por aquí tan temprano hijo mío ¿Ya has desayunado?

Me quedé mirándola fijamente sintiendo un intenso dolor en mi pecho. Negué y me alejé de ella entrando a la casa, observé hacia la sala y quedé impactado al ver a mi hijo durmiendo en el carrito.

¿Qué demonios? Corrí hacia el y lo tomé en mis brazos.

- ¡Mama! - Grité fuertemente - Qué hace mi hijo aquí, en qué momento.

- Ah es que lo extrañaba mucho y lo mandé a buscar bien temprano.

- ¿Qué pasa contigo? No puedes hacer eso con el niño, eres su abuela pero tienes que avisar antes de hacer esto, ¿Hablaste con su madre?

- No tengo nada que hablar con esa

- Mamá, es mi esposa y son mis hijos, no tienes ningún derecho en hacer esto, te lo advierto que sea la última vez.

- ¿Cómo te atreves a hablarle así a tu mamá? Esa mujer está arruinando su relación.

En el momento que la vi todas mis alarmas se encendieron y fue entonces que lo entendí todo, esa mirada, esa expresión ¿Cómo no pude verlo antes? Esa mujer era la culpable de todo lo que estaba pasando últimamente.

Cuando Kathia llegó llorando en la tarde luego de que fueron al Spa, esas lágrimas no eran de felicidad estaba triste. Me abrazó tan fuerte como si me estuviera gritando que me necesitaba.

Dejé al niño en el carrito nuevamente y la tomé del brazo arrastrándola hacia la cocina, lloriqueo quejándose y me miró aterrada, la solté bruscamente sobre una silla y golpeé fuertemente la mesa logrando asustarla.

- He sido demasiado paciente contigo, te he cuidado, te protegi con mi vida ¡Y así me pagas! Eres igual que aquella maldita mujer, dices que solo quieres verme feliz pero solo vives haciéndome daño.

- D-de que hablas yo nunca te lastimaria, esa mujer te está metiendo cosas en la cabez...

- ¡Esa mujer es mi esposa! - Volví a golpear la mesa sin dejarla terminar y sollozo - ¡Y tú no eres nadie, no tienes ningún derecho en hacerle daño ni humillarla como lo has venido haciendo todo este tiempo!

LOS CHICOS DEL PROCESO ⏳ (Editando&Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora