(17) Ciclo 03 Fin del detonante 01

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Una semana más tarde.

Caminamos por los callejones escabullidas aunque nadie podría reconocernos llevamos el rostro tapado.

Bien, ya ubicamos la casa y no se le veía tan fea como yo imaginé gracias a mi compañera todo estaba listo a cambio de un poco de diversión; un intercambio bastante satisfactorio debería decir.

Gracias a esto me doy cuenta de lo bajo que pueden caer las personas y hasta donde pueden llegar alimentando su asqueroso ego.

Claro que yo no era muy indiferente a la situación tenía sed, algo que saciar y alimentar dentro de mi y estaba a punto de hacerlo pasando más allá de mis propios límites.

Entramos por el jardín en silencio de que nadie nos viera, los guardias de esta casa estaban más distraídos que mi difunta abuela.

- Traes lo que te encargué - abre su mochila y deja la pistola en mis manos

- Gracias linda, ahora entremos - subo por las escaleras y ella vigila

Me cuelo en la ventana y le doy señal de que suba. Enciendo la linterna y camino con cuidado de no chocar con nada.

Después de que ella entra seguimos, giro el pomo de la puerta que da paso a unas escaleras, estamos en el sótano, si señores era mas conveniente entrar por la parte trasera bajo perfil.

Subimos las escaleras y llegamos a la cocina, después de pasar por ahí nos encontramos con un montón de pasillos la casa estaba completamente oscura y en silencio. Seguimos subiendo y veo 5 puertas, la otra pasa y me mira negando con la cabeza.

Solo queda una frente a mí.

Giro el pomo de espacio y asomo la cabeza, entro y observo cada detalle para no olvidar esta noche, estaba pintada de un azul cielo con poster de Ariana grande en todos lados. La tenue luz de la lámpara iluminaba el rostro de la persona dormida.

La sábana fuera de su cuerpo me permitió ver un yeso en la pierna derecha y varias vendas en diferentes partes del mismo, sobre todo en las costillas.

Su rostro lucía destrozado.

Siento como mi rostro se ilumina y mi cuerpo se estremece una extraña felicidad acaricia mis entrañas por un momento y al instante vuelve el odio a mi.

No podía tolerar respirar el mismo aire que ella eso me estaba quemando por dentro.

Subo a la cama de espacio y se exalta tapo su boca antes de que grite.

- Hola Karen - susurro en su oído - te acuerdas de mí, a quién le robaste el mejor trabajo del curso - niega repetidas veces con la cabeza y sus ojos brillaron con terrir - Te dije que no había terminado contigo

Saco la pistola y acaricio su rostro con ella, se ve tan linda asustada me da hasta lástima y ternura.

- Ummm - se sacude debajo de mi

- ¡Estás loca! - empuja mi cuerpo y termino cayendo al piso.

Río a carcajadas  como una desquiciada últimamente me excita cuando me dicen "Loca" Me  mira horrorizada, tomo sus muletas y la dejé salir de la habitación.

Me puse de pie lentamente y la seguí caminando lo mas lento posible mientras observaba su lucha por escapar de mi, siento su miedo en cada parte de su cuerpo y sin querer una sensación de éxtasis recorría mis venas.

Provoqué unos pequeños ruidos en la pared solo para que supiera que no iba a dejarla escapar.

La tomé del cabello pegandola a mi pecho, mi compañera le quita las muletas y las lanza por las escaleras.

LOS CHICOS DEL PROCESO ⏳ (Editando&Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora