LOS CHICOS DEL PROCESO ⏳ (Editando&Corrigiendo)

(39) Un coco en la playa

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La hiena, bestia nocturna que ataca desde las sombras atrapando a su presa con garras mortales pero al final similar a una gata.

Varias semana después.

POV KATHIA

Mi primer día de trabajo todo un caos, no imaginé que tendría tanto movimiento de una empresa a otra instalarme aquí ha sido un proceso algo difícil ya que mi mente no estaba tan capacitada para memorizar tantas cosas, estar en juntas, y con tantas personas me enloquece los sentidos.

Pero me ayuda a olvidar el otro ritmo de vida que llevo sobre todo con dos personas que hacen de mi vida un caos mayor, mentiría si dijera que no estaba acostumbrada pero siempre llega algo nuevo.

Han pasado varias semana, los días simplemente vienen y van entre trabajo, estar en mi apartamento y salir con Kiro.

Pero de José, no sé nada y me preocupa hasta mentiría si digo que no lo extraño pues en todo este tiempo se convirtió en una persona muy especial para mí y ese vacío que dejó, Kiro no lo puede llenar es una amistad diferente.

Quiero decir, fueron dos años de mi vida donde el me ayudó sin perder la fé de que iba a recuperarme a veces despertaba y ni siquiera lo reconocía pero me sentía tranquila.

Tomaba su dedo meñique y me llevaba al jardín sin decir ni media palabra, pasó mucho tiempo así pero no importaba por que estaba segura.

Vuelvo a cruzar las piernas en mi sillón tratando de acomodarme el vestido que traía puesto no fue una buena elección ya que deja a la vista gran parte de mis pechos y no faltan las miradas lujuriosas de muchos sobre todo de Kiro.

- Si sigues así, vas a terminar violandome o peor - bromeo sin siquiera mirarlo.

- Estás demasiado sexy hoy - levanto la vista sorprendida por sus palabras llenas de morbo, su mirada es pura lujuria que me desnuda sin pudor.

- Ese lápiz sufrirá fuertes consecuencias querido.

Dejando atrás el juego de atracción seguimos concentrados en el trabajo de vez en cuando nos toca trabajar juntos ya que él me enseña todo lo que aprendió en estos dos años.

Hace una semana hicieron un pedido de cajas de chocolates con muchísima anticipación, una agencia de modelaje se inspiró en esta ricura y la idea no estaba nada mal.

Lo importante es que los clientes queden satisfechos y que la fábrica de chocolates cada día sea más famosa.

-¿Escuchas eso? - quito la vista del computador y lo miro confundida

- No, ¿De qué hablas?

Señala hacia afuera y efectivamente se escuchaba un escándalo entre los trabajadores, nos miramos confundidos por que ese tipo de cosas no solían pasar.

Me pongo de pie dispuesta a averiguar qué estaba pasando y Kiro me siguió muy de cerca, salimos de la oficina y doblamos el pasillo a la derecha, como estamos en un nivel medio podemos observar desde aquí todo lo que pasa abajo o bajar directamente por las escaleras que quedan a la derecha, era un lugar muy grande.

Me sostengo de la barandilla observándo a todos los trabajadores agrupados inmediatamente reina un incómodo silencio cuando se dan cuenta de mi presencia.

Sin pensármelo dos veces camino hacía las escaleras y bajo lentamente sin dejar de observarlos es muy extraño que estén todos amontonados de esa manera.

- Rogelio - llamo al supervisor de ellos - ¿Que está pasando? - hace una mueca dudando si decirme o no - ¿Sí? - insisto

- ¡Vaya vaya, así le dan la bienvenida a su jefa en esta empresa!