Solo déjalo fluir, deja que la tormenta consuma tu dolor.
Déjalo ser.
No podía evitar sentir una ráfaga de tristeza al observar sus ojos llenos de temor.
Mientras vivimos pasamos por obstáculos que solo cuando logramos superarlos es que podemos decir en voz alta que los hemos pasado.
Sabia que debía irme con todo el dolor de mi alma, y ella, ella iba a superar esta y todas las tormentas que se aproximaran por que de eso se trataba nunca podía rendirse.
Caes y debes levantarte y aunque hay personas que te apoyan llega un momento donde te das cuenta que debes enfrentar las cosas por ti mismo para poder superarlas.
La tormenta se hacía más fuerte a cada momento los rayos que se desplazaban del cielo caían con rabia y estruendo sobre las olas del mar provocando que el terror se colara en cada parte de ella.
Estaba aterrada, sola, enojada pero el miedo, era lo peor. No sé si llegó a sentir mucho esa emoción
Era una escena realmente impactante como si alguien desde el mismísimo cielo estuviera luchando por justicia.
Pareciera que en cualquier momento se abriría y terminaría exterminando todo ser vivo en cuanto existiese.
- ¿Por qué tienes que soltar mi mano? - Me fui alejando lentamente pero ella seguía atada a mí.
Acaricie su mejilla aunque las gotas de lluvia mojaban todo su rostro, era hermoso ese vestido blanco se ceñia a su cuerpo de una manera increíble no debería observarla con tanto deseo pero no lo podía evitar.
- Es que no estamos bien princesa - acerqué mi cuerpo al suyo - en vez de dejar el dolor nos aferramos a el, pero debes dejar que esa tormenta te consuma, déjalo ser.
Solté su mano y sostuvo su pecho, levantó la vista hacia el cielo sus ojos se enfrentaron con la tormenta y fui desapareciendo de su vista.
Mi cuerpo se levantó exaltado, mis manos sujetaron fuerte las sábanas y un sudor frío recorrió mi frente hasta mi pecho.
¿Por qué ese sueño? No, ese no fue un sueño normal, más bien fue una pesadilla.
Fue la sensación más fuerte que he sentido acaso era alguna señal.
No entiendo por qué la dejé sola.
Claro está que no creo mucho en estas cosas pero a veces los sucesos no tienen explicación.
Me encontraba demasiado aturdido, dejé la cama tal y como estaba entré a la ducha e inmediatamente abrí el grifo para que toda el agua cayera sobre mí cuerpo.
Inexplicablemente un fuego interno atravesó mi piel dejando un vapor que se esparció por todo el cuarto de baño.
No sabía que tenía la temperatura tan elevada hasta que el choque de temperatura me lo confirmó.
Después de unos minutos al salir me vesti rápido me quedé un momento observando la cama hasta que me digne a acomodarla, tomé algunas cosas y salí de la habitación buscando algún rastro de mi madre en casa.
Pero no se encontraba por ningún lado.
Cerré la puerta detrás de mí y presione el botón de mis llaves para abrir el garaje, monté mi coche y manejé durante media hora en la transcurrida carretera.
Estacione el coche del otro lado de la calle y crucé dándome paso entre la multitud de gente que había en este lugar.
Pasé la vista por los pasillos y solo noté la presencia de las nuevas enfermeras. Una sonrisa cálida de bienvenida me ofreció mi secretaria.
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LOS CHICOS DEL PROCESO ⏳ (Editando&Corrigiendo)
RomansMi vida se destruyó en el momento que la mire y sus ojos estaban vacíos, ¿La había perdido? ¿Que pasaría con nosotros? cuando mi vos, mi rostro y absolutamente todo era ajeno para ella; mi mundo se cayó en pedazos cuando tuve que soportar verla en b...