Enzo se estaba pudriendo un poco.
Estaba cansado de que Abril se la pase al lado de él. No paraba de tocarlo, de hacer comentarios cualquiera cuando estaba con sus amigos, y ya se estaba irritando de toda la situación.
Le gustaría estar un poco más como Julián, que estaba totalmente relajado y se había tomado bastante de la botella de Lautaro. Lisandro estaba saltando con él, mientras ponían música por los parlantes que había en el sum.
Todos habían mínimamente tomado algo salvo él. Hasta que en un momento Lautaro, teniendo una conversación, le ofreció del químico causa diabetes y tomó un trago larguísimo. No sabía que mezcla era, pero esperaba que después Lautaro mandara una lista de lo que vertió para hacerlo.
—¿Enzo? ¿Me estás escuchando? —preguntó Abril después de un rato que su novio no le habló.
Estaba prácticamente abrazada a él, diciéndole cualquier cosa, pero el otro no le prestaba atención y tenía los ojos fijados en todos, salvo ella.
Sabía lo que todos estaban haciendo: Cuti y Lara estaban con Phil, mostrándole todo mientras el inglés probaba de lo que le ofrecía y le daba una nota del uno al diez a las cosas dulces, Nahuel estaba intentando preparar fernet con Paulo, Leandro y Alexis estaban teniendo una conversación que se notaba que era sarcástica y con comentarios del colorado para ofenderlo, mientras que el de ojos claros intentaba hablarle de Boca, Lautaro se la pasaba dando vueltas ofreciendo para tomar, a lo que algunos aceptaban, y Lisandro, Joaquín y Julián estaban los tres juntos, saltando y boludeando mientras sonaba la música.
Y después estaba Enzo que estaba con su novia, aburrido, mientras le hablaba de cualquier cosa. Tenía las bolas llenas.
También había otros que parecía que la presencia de las chicas les re molestaban. Leandro, cada vez que Lara se acercaba a él, se terminaba por ir con Paulo para dejarle en claro ochenta mil veces que no quiere nada, por mucho que la chica no entienda. Después ella misma se iba con Cuti, y el que la miraba mal ahí era Lisandro, pero parecía que algo andaba mal, porque más que eso no se metía.
—No, Abril, no te estoy escuchando. —Dijo, un poco más enojado de lo que creía.
—Che, ese tonito no. No te dije nada malo, Enzo.
—¿Qué haces acá? —preguntó. Ya había preguntado esto antes, pero ahora estaba con una actitud diferente, más cansado.
—Amor... ya te lo dije que me tenías preocupada.
—Pero acá estoy, ya viste que no me pasó nada. ¿Para qué te estás quedando? —apuntó, sin siquiera mirarla. Se lo dijo directo, a ver si entendía bien.
—Nadie me dijo que me vaya.
Enzo bufó, rodando los ojos. —Sí querés te lo digo yo. No sé qué haces acá, Abril. Encima me saltaste con el cuentito de que estás preocupada cuando no te cuesta nada mandarme un mensaje.
—Bueno, no te enojes.
—No me enojo. Pero me parece que no da que te quedes acá. Nadie te invito.
—¿Me estás echando? ¿Eso querés decir? —pregunta, ofendida. Hay una sola persona que lo está mirando, y ese es Leandro; Alexis parece estar agradecido por no tener que seguir hablándole.
—No te estoy echando. Solo te pido que te vayas. Nadie te invitó, esto es solo para estar con mis amigos, vos no tenés pasé acá. —Explica Enzo, separándose de ella.
La chica suelta una risa dura, sin gracia. —Sos de no creer, Enzo Fernández.
Se va indignada a hablar con Lara que sigue con Cristian. Su amiga no le da mucha pelea, y termina por estar de acuerdo.
