57

2.6K 321 118
                                        

Lunes 4 de octubre

Lunes 4 de octubre

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


°CARREFOUR°


No hizo ni falta abrir la ubicación para saber donde tenía que encontrarlo. Todos iban ahí durante el mediodía, no era sorpresa que su profesor era uno más.

Estaba seguro que se iba a mandar la cagada a pedos de su vida. 

Aparecía a mitad de todas las clases, se iba temprano de algunas lecciones, entregaba trabajos ochenta días tardes. Su nivel había bajado y no volvió a ser capaz de subirlo. Ahora, iba a tener que bancarse las re mil puteadas de su profesor.

O algo así.

Él fue el último en llegar de los dos. Encontró a su profesor en una mesa separada al resto, como para dar algo de privacidad al resto del ambiente. 

Ya sabía lo que se venía.

—Hola. —Dice, y su profesor asiente con la cabeza y hace una señal para que se siente frente a él.

—Por lo menos no me dejaste plantado. Ya es media cosa tuya lo de escapar de problemas. —Le dice, su ceño fruncido y serio.

—A vos no te dejaría plantado jamás, profe.

La joda no le sale bien, y su profesor lo mira con lentamente, parpadeando e intentando encontrar algo de humor en la situación.

—Era joda.

Su profesor no le responde, solo se queda callado. Lisandro aprovecha el momento para pedirle a Lautaro—que obviamente está trabajando—algo para tomar. Al principio el de pelo oscuro levanta una ceja, pero no le pregunta sobre la otra persona que está con él.

Más o menos no tiene la oportunidad, porque su profesor empieza a hablar.

—Lisandro, si te cite acá, es para hablar. Me gustaría saber qué te está pasando. Estás muy raro, no vas a las lecciones, siempre que llegas estás medio dormido y no terminas por escuchar nada. La verdad es raro viniendo de vos. —Le explica, y el contrario se hace más chico en el asiento. Se siente incómodo. No quiere hablar de lo que le está pasando. —No sos la persona más brillante, pero tampoco sos un estúpido. Hasta hace un par de días te importaba hacer bien académicamente, ahora venís con una racha de malas calificaciones.

CARREFOUR ~ julienzo auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora