Viajaron en silencio, mirando por su lado de la ventana, Luke se tocaba los labios ansiosamente y desvío la mirada hacia el vestido de Nic que revelaba su muslo y quiso tocarla. Quiso sentir su piel suave en su tacto. Quiso dejar de añorarla y dejar de buscarla en cada mujer con la que tenía sexo. Entre ellas Jade, cada que estaba con la pelinegra no dejaba de buscar a Nic, no dejaba de buscar los labios de Nic, sus caderas, sus ojos y de hecho preferia evitar el contacto visual con ella. Y siempre se pregunto si podría desear tanto a Nic si volviera a el y si pudieran reencontrarse… definitivamente si. Malditamente si, pensó y alejo la mano de su tentación. Se agarró fuerte y solo percibió un suspiro en la rubia y fue algo que lo dejo hipnotizado. Amaba eso, amaba sus suspiros, sus risas y sus sonrisas… continuaba con ese amor maldito que le destrozo el corazón y le pulverizó el alma.
Aun cuando no entendía nada y el por qué de sus reproches recordó las palabras de la casera. Luke la creia muerta y eso era entendible. Pero su enojo se volvio asesino cuando Luke comenzó a acusarla de un montón de cosas que Nic no había hecho y que ni siquiera se atrevería a pensar en hacer. Era presa de Luke en cuerpo y alma era suya, amantes la acuso de tener amantes y no había pensando en nadie más y no pensaba en nada más que en el. El por el contrario, iba a casarse y con mucho cinismo coqueteo con la mujer con quién iba a casarse frente a ella y admitió haber follado con ella. Se masajeo la cabeza, las migrañas eran horribles y lo que menos necesitaba era sobrepensar y ser atacada por una migraña que la paralizaba.
Suspiro y resolvió que tenía que ser paciente con el, Pero no por ser paciente iba a permitir que la pisoteara. Sintió como su olor inundaba sus fosas nasales, sintió aquellas corrientes eléctricas y quiso abrazarlo y besarlo pero estaba tan molesta que se agarró fuertemente.
Estaba impresionada con el paisaje y por la enorme propiedad donde estaba aparcando el vehículo y de acuerdo a su nuevo estudio junto al doctor Hernan aquella era una propiedad de un duque el duque de Richmond nunca imagino vivir en ella, entre abrio los labios maravillada y jadeo por la impresionante belleza del castillo. En cuanto el vehículo se detuvo Luke bajo y le ayudo a bajar a ella del vehículo también. Dudo en darle su mano Pero al final acepto su ayuda ya que el personal los esperaba afuera.
-Señores, bienvenidos.-Se acercó a ellos lo que parecía ser el mayordomo y Nic sonrió amablemente.-Señora soy Dunwoory el mayordomo.
Nic soltó la mano de Luke para estrechar la mano del mayordomo quien se sorprendió por su gesto y le sonrió amablemente. Nicola estrecho la mano de cada sirviente y les sonrió con amabilidad, un gesto que Luke conocía en ella, no dijo nada, la siguió en silencio y fue educado con la servidumbre también era algo que a el no le incómodo ya que el era igual.
Entraron a la casa y Nic no podía dejar de admirarlo. Hasta que se vio interrumpida por el mayordomo.
-Preparamos el lecho nupcial. Cuando gusten pasar está listo.-Nicola asintió y miro a Luke con una ceja alzada.
-Prepararon un lecho nupcial.-Dijo Nic tocando un jarrón con la huella de su dedo y girando en su eje.- Al parecer no es para mí.-Dijo con cierto toque de sarcasmo.-Lamento haberte arruinado la noche.-La sonrisa guasona que curvo era un claro signo de que había disfrutado de haber arruinado esa noche nupcial.
-Sin duda, es triste.-Contesto Luke sin interés y era que no podía dejar de mirarla, el color resaltaba su piel y el escote, solo quería hundirse en ese escote e innalar su olor como si fuese una droga.
En el acto aparecio el ama de llaves y se acerco a la pareja.
-Señor, señora. Déjeme guiarla a su habitación. -Nic asintió y siguió a la ama de llaves. Quien la llevo hacia su alcoba, recorriendo un pasillo largo y simplemente magestuoso. La habitación que habían dispuesto para ella era muy bonita tenía una vista increíble. Pero estaba a 7 si no es que 8 habitaciones de la habitación de Luke. Las contó cuando el ama de llaves le mostró la habitación de Luke y añoro entrar, añoro estar entre sus brazos.
Pero la tormenta entre ellos se miraba demasiado densa.
-La dejo, la ducha está preparada y hay una pijama ya lista para usted.
Nic asintió y se quedó sola en la recámara. Salio al balcón y se sentó en el mullido sillón y suspiro.
-Estoy aquí…
Soltó algunas lágrimas y se abrazo así misma en un intento por calmarse por entender que había sucedido y por darse ánimos para poder llevar cada prueba.
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Se paseo como león cautivo, el caos en su cabeza lo estaba desquiciando, no podía creer que estaba viva, que había vuelto, no sabía cómo procesarlo y comenzo a beber sin control. Era resistente al alcohol no podía perder la conciencia y dejo de hacerlo no podía pelear consigo mismo, Pero necesitaba hacerlo. Observo su recamara y comió una fresa. Esa hubiese sido su luna de miel con Jade estaba preparado para tenerla a ella, sabía que pasarían la noche juntos y que la enviaría de vuelta a su alcoba por la madrugada y que la ignoraria siempre. Pero con Nicola con ella jamás a ella jamás la había ignorado, con ella era el hombre más imbécil, Nicola tenía el poder de sacar su lado más vulnerable, más imbécil, el enamorado era un imbécil. Pero ese imbécil le pertenecía solamente a Nicola a nadie mas.
Salio con paso decidido, se encamino hacia la habitación de Nicola el alcohol no lo noqueaba, lo envalentono en ese momento y no era por qué quisiera hablar con ella, estaba caliente y era algo que solo ella despertaba y quería probarla, quería fundirse en ella. Quería volver a estar en su interior y ser su imbécil una vez más. Abrió la puerta y la visión de Nicola con una toalla enredada sobre su cuerpo le hizo mas fácil el camino y sonrió lobuno, hambriento y febril.
-Ya que arruinaste la noche de bodas, estás tu. Y estoy caliente así que vengo a reclamar mis derechos de esposo.-Solto y la expresión de Nicola fue un poema.
-Sal de mi habitación…-dijo con las mejillas encendidas y Luke la atrajo hacia el le retiro la toalla y la vio con el conjunto de encaje que había encargado para Jade, recordó que había pedido que lo colocarán y le indicaran que era lo que quería que llevara puesto.
Se hundió en sus pechos era todo lo que había esperado y más, sintió a Nicola removerse incómoda pero cuando sintió como Luke devoraba sus tetas todo lo que pudo hacer fue dejarse llevar y enroscar sus cabellos entre sus dedos. Las manos de Luke viajaron hasta sus nalgas y acariciaron el delicado conjunto de encaje era demasiado fino, era tan fino que se adhería a ella como una segunda piel, su olor, la textura de su piel lo enloquecieron y lo hicieron explorar aún más. Bajo su rostro y sus labios devoraron cada pedacito de su piel, inhanlo su aroma, lamio y le supo dulce tal y como lo recordaba.
La escucho gemir, la escucho suplicar y su maldad pudieron nuevamente contra ella. La llevo a la cama y la coloco frente a el se desnudo, se quitó el traje de novio y lo lanzo escuchándolo caer pesadamente. Sus ojos se encontraron con los de Nic y mantuvo un contacto visual por qué estar hechizado por ella era algo que podía permitirse con varias botellas de alcohol encima. Cuando quedó completamente desnuda y la escucho resoplar y jadear le tomo la mano y la hizo arrodillarse cuando el tomo asiento sobre la cama.
Nicola se nego y trato de alejarse, pero Luke reaccionó rápidamente y la hizo arrodillar y llevar su rostro a su entrepierna particularmente a su boca, rozo su polla contra los labios húmedos de Nic y está aun cuando se resistió su deseo la hizo sucumbir a esa humillación abrió la boca y Luke comenzó a follar su boca, sintio como Nic se atragantaba y la follo aún más, cerro los ojos al sentir su calor envolverlo, el como Nicola comenzaba a enloquecer por el deseo y soltaba varios gemidos y jadeos pese a estar ahogándose.
Se detuvo y Nic le miro con anticipación, el curvo una sonrisa guasona y acaricio sus labios. La atrajo hacia el y metió una de sus manos a su ropa interior, palpo su coño húmedo y se llevó los dedos a la boca, sintió mirada atenta de Nicola sobre el y le atrajo de vuelta hacia si mismo. Bajo la ropa interior de Nic y la hizo montarlo haciendola descender sobre su polla lentamente, detuvo a la rubia cuando intento moverse. Y sonrió divertido cuando Nic le miro enfurruñada añoraba moverse y para el fue mejor idea detenerla.
-follame ya imbécil.-Nicola le miro y Luke le miro con sorpresa y decidió sonreír socarron.
-¿Cómo?-Nic le tomo las manos, las coloco sobre las nalgas y le miro encendida.
-Si haz decidido tratarme como una puta hazlo, que lo que quiero ahora mismo es que me folles como la puta con la que te ibas a casar.- Y eso le ardió y le jodió. Nicola estaba enfadada y eso le prendio aún más.
-Bueno, ya que quieres eso lo que tú pidas.-La tomo por las nalgas y comenzó a hacerla rebotar sobre su polla con dureza, Nicola comenzó a gemir y gritar mientras Luke la follaba con dureza y lamía su cuello húmedo por el calor y por el baño que había tomado.
-Ahh!-Clavo las uñas en su espalda, se deshizo con cada dura embestida que el castaño le daba y como le jodia el coño, su pecho se agito cuando el castaño la tumbó sobre la cama y elevo las piernas de Nic sobre sus hombros y la embistió tan duro que lo sintió hasta el útero, se mordió los labios haciéndolos sangrar se aferró a las sábanas de la cama con todas sus fuerzas ese placer duro y vengativo era adictivo, Luke mordió sus muslos y grito, cuando la giro y la coloco en 4 patas grito aún más, cuando en repetidas ocasiones dio varias nalgadas dejándole las nalgas enrojecidas la estaba nublando el deseo y las sensaciones, gritaba, gemía se aferraba a la cordura sin embargo cuando Luke le beso, después de atraparla por el cuello la hicieron derramarse en la cama y terminar duro.
Por su parte el castaño sintió su calor envolverlo y contraerlo, sus uñas en su espalda, los dientes enterrados en su cuello, no pudo evitar tomarla por el cuello y besarla, su instinto pudo mas que su razón y cuando se sintió explotar lo hizo explotó en su interior y grito fuertemente. Ambos se tumbaron en la cama y Nic se giro para no verlo.
Luke tomo su ropa interior, se la coloco y salió de la habitación dejando la copa de vino sobre la mesita de noche de Nic.
Despertó con una horrible resaca, le dolía la cabeza y se tapo hasta las orejas, cuando Dunwoory apareció en su habitación y corrió las cortinas.
-Buenos días señor, le pongo la ropa del trabajo o se quedará en casa.-Luke se incorporo y se mordió el labio. Le dolió y al tocarse se dio cuenta de que tenía una mordida en los labios y se sangro nuevamente.
-Me quedaré en casa.-El mayordomo asintió y le entrego su ropa de casa, un pantalón caqui y una playera básica. -¿La señora despertó?- comenzó a cambiarse y el mayordomo abrió los ojos al verlo.
-Si señor, bajo a desayunar y al terminar decidió leer en el jardín. ¿Necesita curaciones…?-Luke soltó una risita.
-Estoy bien, parece que tuve una pelea salvaje con un gato. Se miro al espejo y levantó su playera la cual estaba llena de arañazos y su cuello de marcas rojas.
-¿Todo bien?...-dijo el mayordomo con preocupación y Luke sonrió radiante.
-Todo en orden.
Bajo a la estancia y salió al jardín donde encontró a Nicola leyendo y en cuanto la vio su expresión cambio, si bien había tenido un sexo increíble quizá el mejor que podía recordar desde su partida, aún había mucho resentimiento hacia ella. Suspiro y se acercó al desayunador, Nicola continuo su lectura sentada en la banquita que había bajo el árbol y decidió ignorarlo pero a Luke no le pasaron desapercibidas las marcas que tenía la rubia tanto en el cuello y la mordida en sus labios.
Se ignoraron el uno al otro toda la mañana y desayunaron por separado. También almorzaron y comieron y finalmente cada uno ceno en su alcoba.
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Falling love again [Terminado]
RomanceNicola Coughlan una chica amante del arte y el amor, Estudiante de Actuación y canto, tenía una vida normal como toda chica de 21 años hasta que conoció a Camila "su mejor amiga" ¿Que creían? ¿Que diría que un hombre cambiaría su vida? Por supuesto...