Capìtulo 67 - Nada es lo que parece

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Este cap, esta dedicado a una fan.... Que he estado hablando con ella y me agrada mucho su forma de serrrr

Lo prometido es deuda 

Realmente no me se tu user pero ella es Sofia Calatrava


Alexander

Me doy el gusto de apreciar su rostro magullado y su camisa abierta que exponen los moretones en su blanca piel. De su boca y nariz, sale un pequeño hilo de sangre. Se encuentra colgando de cadenas que le aprietan bastante las muñecas, manteniéndolo quieto, así como de seguro tenía a mi mujer.

Solo me he mantenido golpeándolo porque no quiero torturarlo tanto, no quiero que muera, hasta que no sepa todo lo que necesito; lamentablemente esta escoria seguirá respirando. Aunque lo hace con mucha dificultad, así que lo voy a dejar un rato descansando para volver con la tortura.

— Salgan — le indico a mis hombres que me han estado ayudando — ahora el jefe de la mafia colombiana y yo tendremos una conversación.

— Si necesita algo, estaremos al otro lado — indica unos de los hombres y me limito a asentir.

Todos salen dejándonos solos. Lo rodeo, mirándolo de arriba abajo; es increíble cuantas personas he tenido en esta misma posición y lo peor de todo es que el que llega a estar aquí es porque tiene sus horas contadas, así como la tiene el mafioso colombiano.

Apenas se mantiene de pie. O eso creo; más bien, todavía está de pie debido a las cadenas que le sostienen la muñeca; incluso parece que en algún momento se la va a arrancar del resto del brazo.

Todavía no he logrado saber exactamente dónde está Lexa, pero creo que realmente no está en garras de ninguno de ellos. Tengo a Braulio frente a mí, tengo en cautiverio a sus hombres de confianza, y muchos de sus hombres están muertos; ahora mismo la mafía colombiana está hecha un desastre.

Quizás muchas personas se preguntarán cómo en menos de un día logré lo que la policía dura años. Deshacer una mafia. El problema radica en que la policía intenta atraparlos y a esas escorias hay que asesinarlas, ya que, si solo los dejamos en las jaulas, uno a otros se ayudan a escapar. A las plagas no se les caza; se les exterminan.

— Debo admitir — Braulio abre la boca y sonríe a pesar de tenerla llena de sangre — que esa táctica del helicóptero fue muy buena.

Sonrío. Cada vez que Braulio ejecutaba algo, siempre tenía un plan de escape, ya que en este mundo es probable que en cualquier momento te atrapen. Pero Braulio siempre usaba el mismo método; a donde iba había un helicóptero listo para escapar, incluso ese helicóptero tenía reserva de emergencia, por si tenían que aterrizar en una isla o un lugar fuera de la civilización humana.

Así que antes de ingresar a la casa de Braulio, rodeamos toda la zona, y encontramos el helicóptero entre un bosque que queda a algunos doscientos metros de la causa de Braulio. Solo tuve que matar a los pilotos y reemplazarlos con mis hombres, así si Braulio escapaba, como lo hizo, como quiera lo tendría.

Le dije que si no encontraba a Lexa, lo iba a atrapar a él.

Pero para mi mala suerte, el agente Herman, cuando llegaron al helicóptero, al parecer reconoció que eso no eran los pilotos e intentaron escapar, pero mis hombres solo atraparon al vejestorio que sí buscaba.

Todavía me tiene sorprendido el hecho de que él perteneciera a la mafia colombiana, digo, ¿No sabe lo de su esposa y Braulio? Pensé que al menos lo sospechaba, al parecer no, ya que son socios.

— Es que siempre he sido más inteligente que tú — me burlo — a pesar de la edad que me llevan, siempre he sido más inteligente que todos ustedes — escupo con arrogancia — mírate, comúnmente eres tú quien rodea a las personas cuando están colgadas de las muñecas y ahora eres tú el que está colgado sin salida alguna.

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