El ambiente en el Auditorio Telmex de Guadalajara estaba lleno de energía. Fernanda, Sebastián y yo habíamos conseguido asientos en la primera fila, y el lugar se sentía a punto de explotar de emoción. Las luces bajaron, los gritos aumentaron, y sabíamos que Tito Double P estaba a punto de salir al escenario.
—Fernanda: "Amiga, ¡esto va a estar increíble! No puedo creer que estemos tan cerca del escenario."
—Nicole: "Ya sé, ¡esto es surrealista!"
La música de fondo se detuvo y las luces apuntaron al centro del escenario. Tito Double P apareció, vestido con su estilo urbano característico: jeans oscuros, camiseta de diseñador y una cadena de oro que brillaba bajo las luces. La multitud estalló en gritos.
—Tito Double P: "¡Guadalajara, ¿cómo estamos esta noche?! ¿Listos para romperla o qué?"
Los gritos fueron ensordecedores. Tito tomó el micrófono y, sin perder tiempo, comenzó a cantar una de sus nuevas canciones, "La People II", un corrido que hablaba de la lealtad y la vida que él conocía tan bien. La gente lo coreaba al unísono, y las vibraciones de los bajos retumbaban en el pecho de todos.
—Nicole: "¡Me encanta esta canción!"
—Fernanda: "¡Es de las mejores! Mira cómo todos la cantan."
El concierto continuó con temas como "Primo" y "Tendido", canciones llenas de ritmo y que resonaban fuerte con el público. Tito movía a la multitud con una facilidad impresionante. Mientras cantaba, se acercaba a los fans de la primera fila, y no pude evitar sentir cómo nuestros ojos se cruzaban varias veces. Cada vez que lo hacía, mi corazón se aceleraba un poco más.
Después de una hora de pura adrenalina, Tito hizo una pausa para hablar con su público.
—Tito Double P: "Gracias, raza, por estar aquí conmigo esta noche. La neta, me siento bien agradecido con todos ustedes. ¡Guadalajara siempre responde chido!"
Los gritos no cesaban, y Tito aprovechaba cada momento para bromear con sus fanáticos.
—Fanática 1: "¡Tito, llévame contigo!" gritó una chica desde atrás, haciendo que todos estallaran en risas.
—Tito Double P: "¡Ya ni me aguanto yo, menos te voy a aguantar a ti, morra!"
El auditorio explotó de carcajadas. La gente adoraba su sentido del humor y cómo siempre sabía conectar con todos. Pero entonces, Tito miró directamente hacia donde estábamos.
—Tito Double P: "Esta noche, quiero dedicar una rola especial. Es para una persona que está aquí, una morra que... pues qué les digo, me trae loco. ¿Dónde está mi güerita?"
Sentí que el corazón me daba un vuelco. ¿Estaba hablando de mí? Fernanda me dio un codazo, claramente emocionada.
—Fernanda: "¡Es para ti, Nicole! ¡Te lo dije!"
Tito comenzó a cantar "Quédate conmigo " de edición especial, una canción llena de sentimiento, y sus ojos no se apartaron de los míos durante toda la interpretación. Yo me quedé congelada, sin saber qué hacer más que sonreír. El público no notaba, pero para mí, ese momento era tan personal como irreal.
Cuando la canción terminó, los gritos del público se elevaron aún más. Tito agradeció de nuevo, y el concierto continuó con sus mejores éxitos, pero yo no podía concentrarme en nada más que en la intensidad con la que me había mirado.
El concierto llegó a su fin con una explosión de fuegos artificiales y un último agradecimiento de Tito.
—Tito Double P: "Gracias por todo, Guadalajara. Esta noche la llevo aquí, en el corazón. Pero antes de irme, tengo una sorpresa para alguien especial."
El público se quedó en silencio por un momento, expectante. Entonces, los asistentes del equipo de Tito aparecieron con un gigantesco ramo de rosas rojas, de esos que son imposibles de ignorar.
—Tito Double P: "Esto es para ti, güerita. Para que no olvides esta noche."
Me quedé sin palabras cuando vi que traían el ramo hacia mí. Era enorme, las flores eran perfectas, y el gesto... más que romántico. No sabía cómo reaccionar. Fernanda gritaba emocionada a mi lado, mientras Sebastián simplemente sonreía, claramente disfrutando de la situación.
Tito bajó del escenario y se acercó. La multitud se abrió, dejando que llegara hasta donde yo estaba. Al llegar frente a mí, me entregó el ramo con una sonrisa que me hizo sentir mariposas en el estómago.
—Tito Double P: "¿Te gustó la sorpresa?" me preguntó, con ese tono seguro que siempre tenía.
—Nicole: "Es... increíble. No me lo esperaba para nada." respondí, aún un poco en shock.
Él sonrió, y sin decir nada más, se inclinó y me dio un suave beso en los labios, justo como siempre lo hacía cuando nos veíamos. La multitud alrededor de nosotros gritaba y aplaudía, pero en ese momento, solo existíamos nosotros dos.
—Tito Double P: "Nos vemos luego, güerita. Disfruta las flores." me dijo antes de regresar al escenario y despedirse del público por última vez.
Mientras salíamos del auditorio, todavía no podía procesar lo que acababa de pasar. Fernanda estaba emocionada por mí, y Sebastián solo reía, pero yo... yo solo podía pensar en lo increíble que había sido esa noche, y en lo que vendría después.
