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El viernes por la mañana me desperté con emoción. Aún tenía el concierto de Roberto en mente y no podía dejar de pensar en qué me pondría para ese día. Era el primer evento público importante al que iría desde que conocí a Roberto, y aunque intentaba no pensar demasiado en eso, la verdad es que quería verme increíble.

Mientras desayunaba, recibí un mensaje de Fernanda.

—Fernanda: "Oye prima, ¿qué onda? ¿Vamos a la plaza hoy? Necesito algo para el concierto de mañana."

Sonreí ante su mensaje. Me encantaba salir de compras con Fernanda; siempre encontraba las mejores tiendas y tenía un ojo increíble para la moda. Sin pensarlo dos veces, le respondí:

—Nicole: "¡Claro! Yo también necesito algo. Nos vemos en tu casa a las 11, ¿te parece?"

Confirmamos el plan, y una hora después, ya estaba en la entrada de su casa. Cuando llegué, Fernanda me estaba esperando en su coche, lista para salir. Subí y nos dirigimos a una de las plazas más grandes de Guadalajara, conocida por sus tiendas exclusivas y ropa de diseñador.

—Fernanda: "A ver, ¿qué tienes en mente para mañana?" me preguntó mientras conducía.

Me encogí de hombros, aún sin una idea clara.

—Nicole: "La verdad no estoy muy segura. Quiero algo que se vea lindo, pero que no sea demasiado arreglado. Es un concierto de corridos, no quiero parecer que me estoy esforzando demasiado."

Fernanda soltó una risita.

—Fernanda: "Tranquila, prima. Vamos a encontrar algo que te quede perfecto. Yo, en cambio, quiero un vestido. Algo sexy, pero no tan llamativo."

Llegamos a la plaza y comenzamos nuestra búsqueda. Las primeras tiendas que visitamos eran un poco más formales de lo que estábamos buscando, así que seguimos caminando hasta llegar a las marcas que sabíamos que tenían la ropa perfecta para nosotras. Nos detuvimos en una tienda que tenía todo lo que podíamos imaginar: desde vestidos hasta prendas más casuales pero con un toque de lujo.

Fernanda fue directa a la sección de vestidos y comenzó a revisar las opciones.

—Fernanda: "Este está lindo, pero no sé si sea muy corto..." murmuró mientras se miraba al espejo con un vestido ajustado de color rojo en la mano.

—Nicole: "Pruébatelo, a ver cómo te queda. Seguro te ves bien."

Mientras ella probaba el vestido, yo me dirigí a la sección de faldas. Sabía que quería algo que no fuera demasiado revelador, pero que tampoco pareciera que no me había esforzado. Encontré una falda negra de cuero que llegaba justo arriba de las rodillas. No era ajustada, pero tenía un corte que favorecía la figura.

—Nicole: "Esta podría funcionar." pensé mientras la sostenía frente a mí.

Luego me fui hacia la sección de blusas, buscando algo que complementara la falda sin robarle protagonismo. Finalmente, me decidí por una blusa oversize de la marca Off-White, blanca con un diseño minimalista en la parte de atrás. Tenía ese aire desenfadado pero chic que tanto me gustaba.

—Nicole: "Perfecto." me dije a mí misma, sonriendo mientras la llevaba al probador.

Cuando salí, Fernanda ya estaba esperándome. Se había probado varios vestidos, pero el que había elegido finalmente era un vestido corto de color negro con detalles plateados que le quedaba increíble. Me giré para mostrarle mi elección.

—Fernanda: "¡Wow! Me encanta la combinación. Es perfecta para el concierto, te ves linda pero no exagerada."

Asentí, complacida con su aprobación. Siempre confiaba en su criterio cuando se trataba de moda.

—Nicole: "Tú también te ves increíble. Ese vestido es todo lo que necesitas."

Después de comprar nuestras prendas, nos dirigimos a la zona de accesorios. Sabía que no quería sobrecargar mi look, así que solo me decidí por unos pequeños pendientes de oro y una pulsera fina. Fernanda, por otro lado, se inclinó por un collar brillante que combinaba con los detalles plateados de su vestido.

Cuando finalmente terminamos nuestras compras, nos sentamos en una cafetería dentro de la plaza para tomar un respiro.

—Fernanda: "¿Y qué? ¿Ya tienes permiso para ir mañana?" me preguntó, levantando una ceja con curiosidad.

Suspiré, recordando la conversación que había tenido con mis papás la noche anterior.

—Nicole: "Sí, hablé con mis papás y me dijeron que está bien, siempre y cuando vaya contigo y Sebastián. Pero claro, mis hermanos no están muy contentos con la idea."

Fernanda se echó a reír.

—Fernanda: "Ay, esos dos, siempre cuidándote como si fueras una niña. Ya deberías estar acostumbrada."

—Nicole: "Lo sé, pero igual no dejan de fastidiar. Por suerte, mis papás no se meten tanto y confiaron en que estaré bien contigo."

Pasamos el resto de la tarde charlando sobre el concierto y riendo acerca de los comentarios celosos que seguramente recibiría de mis hermanos cuando me vieran arreglada para el evento. Aunque en el fondo, no podía evitar sentirme un poco nerviosa. Era la primera vez que asistiría a algo así, y aunque me emocionaba ver a Roberto en el escenario, también sabía que llamaría la atención, sobre todo estando con Fernanda y Sebastián.

Cuando finalmente regresé a casa con las bolsas de nuestras compras, me encerré en mi cuarto y colgué la ropa en el perchero. Mañana sería un día interesante, y estaba lista para lo que fuera. Aunque por ahora, me quedaba disfrutar de la anticipación y esperar a que llegara el sábado.

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Perdón por no actualizar bellas, eh andado ocupada, quiero que me digan, les esta gustando la historia??
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