En el momento correcto. -Bucky Barnes-

Capitulo 46: Una Nueva Llegada a la Torre

Era una mañana tranquila en la Torre Stark. TN estaba revisando algunos informes cuando recibió un mensaje de su vieja amiga Clara, una chica con quien había compartido muchos momentos especiales durante la escuela. Clara tenía un bebé de siete meses llamado Matteo, y aunque hacía tiempo que no se veían, siempre mantenían el contacto a través de mensajes.

Clara: TN, ¿andas ocupada hoy o mañana?
TN: No tengo nada planeado. ¿Qué pasa?
Clara: Mi mamá está muy mal, tengo que quedarme con ella en el hospital y no quiero llevar al bebé allí. No tengo a nadie más, ¿crees que puedas cuidarlo por dos días?
TN: ¡Por supuesto! No te preocupes, tráelo cuando quieras.

Clara no tardó en explicarle todo lo necesario: las horas de comida, las siestas, los cambios de pañales, y lo más importante, lo que Matteo necesitaba para dormir tranquilo.

Horas más tarde, Clara llegó a la Torre con una pañalera y el pequeño Matteo en brazos. TN la recibió con un abrazo cálido y, tras despedirse, se quedó con el bebé.

Cuando TN entró al área común con Matteo en brazos, todos los que estaban allí se giraron con sorpresa. Sam fue el primero en reaccionar, como siempre.

—¡Oh, Dios mío! ¡TN y Bucky tuvieron un bebé y no nos dijeron nada! —exclamó dramáticamente, poniendo una mano en su pecho.

Natasha, que estaba cerca, arqueó una ceja y le dio un codazo.

—Cállate, Wilson. Déjala hablar.

TN soltó una carcajada y explicó:

—No es mi bebé, Sam. Es Matteo, el hijo de una amiga mía. Ella necesita ayuda por un par de días, así que lo estoy cuidando.

Steve entró en la conversación con una sonrisa.

—¿Y Bucky sabe que tienes un "colega de misión" tan joven?

Justo en ese momento, Bucky apareció desde el gimnasio, secándose el sudor con una toalla. Al ver a TN con el bebé, se detuvo en seco.

—¿Qué... qué está pasando aquí? —preguntó, confuso pero curioso.

—Este es Matteo —dijo TN, acercándose con una sonrisa—. Voy a cuidarlo por dos días.

Bucky miró al bebé y luego a TN. Una suave sonrisa apareció en su rostro.

—Parece que alguien está en buenas manos.

Matteo era un bebé tranquilo y sonriente, pero como todo niño pequeño, demandaba mucha atención. TN estaba completamente dedicada a él, siguiéndole el horario que Clara le había dado. Bucky, que parecía fascinado con la escena, se ofreció a ayudar en todo momento.

Cuando llegó la hora del baño, TN y Bucky se encargaron juntos.

—¿Así? —preguntó Bucky mientras sostenía una toalla lista para envolver al bebé.

—Sí, perfecto. Ahora, con cuidado, porque el agua puede estar un poco fría para él.

Bucky lo hizo con tanto cuidado que TN no pudo evitar sonreír.

—Eres increíble con él. ¿Sabías?

—Tú también —respondió Bucky, mirándola con calidez—. Te ves... perfecta así.

TN sintió que su corazón se aceleraba.

—¿"Así" cómo? —preguntó, aunque ya sabía la respuesta.

—Como mamá.

El comentario la tomó por sorpresa. Ella bajó la mirada, tratando de esconder el rubor en sus mejillas.

—¿Algún día te gustaría tener hijos? —preguntó finalmente.

Bucky asintió, sosteniendo al bebé con cuidado.

—Sí. Y si son contigo, mejor aún.

TN no pudo evitar sonreír, y mientras lo observaba jugar con Matteo, supo que hablaba en serio.

Por supuesto, Sam no podía dejar pasar la oportunidad de bromear. Mientras estaban en el área común, con Matteo jugando en su manta en el suelo, Sam apareció con un biberón vacío en la mano.

—¿Qué tal la vida de padres primerizos? ¿Ya están pensando en nombres para el próximo?

—Wilson... —gruñó Bucky, pero el tono en su voz era más divertido que molesto.

—Deberías aprender de mí, Barnes. Yo sería un padre espectacular.

Natasha, que estaba cerca, soltó una carcajada.

—Claro, Sam. Seguro.

El resto del día pasó entre risas y juegos. Matteo adoraba a Bucky, quien hacía todo lo posible para hacerlo reír, desde caras graciosas hasta levantarlo como si estuviera volando. TN no podía dejar de admirar la facilidad con la que Bucky interactuaba con el pequeño.

Esa noche, después de que Matteo finalmente se quedó dormido, TN y Bucky se sentaron en el sofá con una taza de té.

—Gracias por ayudarme hoy —dijo TN, apoyando la cabeza en el hombro de Bucky.

—No tienes que agradecerme nada —respondió él, rodeándola con un brazo—. Pasar el día contigo y con Matteo fue... especial. Me hizo pensar en lo que podría ser nuestro futuro.

TN lo miró, sus ojos brillando con emoción.

—¿Estás seguro de eso?

—Completamente.

Ella se inclinó y lo besó suavemente, sellando el momento.

Cuando Clara regresó a buscar a Matteo, TN y Bucky se despidieron con algo de tristeza.

—Gracias, TN. De verdad. No sé qué habría hecho sin ti —dijo Clara, abrazándola.

—Siempre que me necesites, aquí estaré —respondió TN con una sonrisa.

Mientras Clara se alejaba con su hijo, Bucky se acercó a TN y tomó su mano.

—¿Sabes? Esto me hizo darme cuenta de algo.

—¿Qué cosa?

—Quiero que algún día tengamos esto juntos.

TN lo miró con una sonrisa brillante.

—Yo también, amor.

que ondaaaa bellezas

Tengo varias ideas para el libro de one shots, ¿les gustaria que las subiera?

Byee, ilysmmm