Capitulo 47: Ataque a la Torre Stark

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El día después de que Clara y Matteo se fueron, la Torre Stark estaba tranquila. Los Vengadores se encontraban ocupados con sus actividades diarias: Tony y Bruce en el laboratorio, Steve entrenando, Natasha y Sam compartiendo café mientras bromeaban en la sala, y TN estaba en la cocina con Bucky, riéndose mientras preparaban algo para comer.

—¿Te diste cuenta de lo silencioso que es todo sin Matteo? —comentó TN con una sonrisa mientras revolvía su té.

—Demasiado tranquilo —respondió Bucky, apoyándose en la encimera—. Aunque no voy a mentir, fue interesante verte como mamá.

—¿Otra vez con eso? —se quejó TN entre risas—. Ya bastante tuve con Sam molestándome.

De repente, las luces parpadearon y la voz de Friday resonó por todo el edificio.

Amenaza detectada en el perímetro exterior. Defensa automatizada activada.

Los ojos de TN y Bucky se encontraron por un breve momento antes de que ambos se pusieran serios.

—Esto no es un simulacro, ¿verdad? —preguntó TN.

—Definitivamente no.

Ambos corrieron hacia la sala de control, donde ya estaban reunidos Tony, Steve, Natasha y Sam. En las pantallas se podían ver múltiples vehículos acercándose a la torre, cargados con lo que claramente eran soldados de Hydra.

—¿Hydra? ¿Otra vez? —gruñó Steve, ajustando su escudo.

—Sí, y vienen armados hasta los dientes —informó Tony mientras activaba los sistemas de defensa de la torre—. Están aquí por algo... o por alguien.

Bucky cruzó los brazos, su mandíbula apretada.

—Vienen por mí.

—No dejaré que nadie te toque —dijo TN rápidamente, con determinación en los ojos.

—Bien dicho, chica Stark —agregó Sam, cargando sus armas.

Los soldados de Hydra comenzaron a abrir fuego contra la torre. Las defensas automáticas respondieron de inmediato, pero no eran suficientes para detener a un ejército tan bien equipado.

—¡Todos a sus posiciones! —ordenó Tony mientras se ponía su traje.

Los Vengadores se dividieron en equipos para proteger diferentes áreas de la torre. TN y Bucky permanecieron juntos, defendiendo la entrada principal.

—Recuerda lo que te enseñé —dijo Bucky mientras ajustaba su brazo metálico.

—Siempre lo hago —respondió TN con una sonrisa nerviosa, sacando su equipo tecnológico para hackear los sistemas de Hydra y desactivar algunos de sus drones.

La batalla fue intensa. Hydra no solo quería causar caos; estaban claramente enfocados en capturar a Bucky. Los soldados intentaron aislarlo varias veces, pero él y TN formaron un equipo imparable.

—¡No se separen! —gritó Steve desde su posición, lanzando su escudo para derribar a un grupo de enemigos.

En un momento crítico, varios soldados lograron infiltrarse en la torre. TN y Bucky los enfrentaron con todo lo que tenían, pero el número era abrumador.

—¡TN, detrás de ti! —gritó Bucky, usando su brazo para bloquear un ataque dirigido a ella.

TN reaccionó rápidamente, activando una descarga eléctrica en su traje que derribó a los atacantes.

—Gracias, Barnes.

—Para eso estoy aquí.

Después de un largo enfrentamiento, los Vengadores lograron repeler a los soldados de Hydra. Natasha y Steve se encargaron de capturar a algunos sobrevivientes para interrogarlos, mientras que Tony comenzó a analizar el equipo que habían dejado atrás.

—Esto no fue un simple ataque —dijo Tony mientras estudiaba uno de los dispositivos de Hydra—. Tenían un objetivo claro: recuperar al Soldado del Invierno.

Bucky, que estaba limpiándose una herida en el brazo, se tensó.

—¿Están intentando volver a controlarme?

Tony asintió con gravedad.

—Todo indica que sí. Parece que alguien está reconstruyendo Hydra desde las sombras. Han mejorado sus tecnologías de control mental y creen que aún eres una pieza clave en sus planes.

El ambiente en la sala se tornó tenso. Steve apoyó una mano en el hombro de Bucky.

—No dejaremos que eso pase. No volverán a tocarte.

—Ni en un millón de años —añadió TN, mirando a Bucky con firmeza.

Natasha, quien estaba revisando los prisioneros, se acercó al grupo.

—Uno de ellos habló. Dice que están trabajando en un dispositivo capaz de reactivar viejos protocolos de Hydra. Y, por supuesto, te necesitan a ti, Barnes, para liderar su nuevo ejército.

—Eso no va a pasar —dijo Bucky con voz fría, su expresión endurecida.

—Por eso vamos a encontrarlos primero —declaró Tony, cerrando sus puños—. Y vamos a destruir todo lo que quede de ellos.

Esa noche, la torre estaba más tranquila, pero todos sabían que la amenaza estaba lejos de terminar. TN se encontró con Bucky en la sala de entrenamiento, donde él estaba desahogándose con un saco de boxeo.

—¿No puedes dormir? —preguntó TN, acercándose.

—No, demasiados recuerdos —admitió Bucky, deteniéndose para mirarla.

—Lo entiendo. Pero no estás solo en esto, ¿sabes? Tienes a todos nosotros... y me tienes a mí.

Bucky la miró, una leve sonrisa asomándose en su rostro.

—Eso significa más de lo que imaginas.

—Entonces recuerda eso, porque no voy a dejar que Hydra te toque.

Ambos compartieron un momento de silencio antes de que TN rompiera la tensión con una sonrisa.

—Ahora, ¿vas a seguir pegándole al saco toda la noche o quieres acompañarme a la cocina por algo de té?

—El té suena bien —dijo Bucky, siguiéndola con una expresión más relajada.

Sabían que el camino por delante sería difícil, pero mientras estuvieran juntos, no había nada que no pudieran enfrentar.

En el momento correcto. -Bucky Barnes-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora