En el momento correcto. -Bucky Barnes-

Capitulo 53: Días de Paz

Los días siguientes al ataque de Hydra transcurrieron con una calma inusual en la Torre Stark. La base había vuelto a su rutina habitual: entrenamientos, reuniones estratégicas y, en ocasiones, momentos de risas entre el equipo. Después de la intensa misión, cada uno intentaba recuperarse, tanto física como emocionalmente.

TN y Bucky parecían más unidos que nunca. Desde aquella noche en la que ella lo había rescatado, su relación había fortalecido un lazo de confianza que se sentía inquebrantable. Bucky ya no intentaba mantenerse distante como antes, al contrario, buscaba pasar tiempo con TN siempre que podía.

El sol apenas comenzaba a filtrarse por las ventanas de la Torre cuando TN entró a la sala de entrenamiento. Planeaba iniciar el día con algo de cardio antes de que el resto del equipo despertara, pero se detuvo al ver a Bucky ya en el gimnasio. Estaba concentrado, levantando pesas con una expresión de calma.

— ¿Empezaste sin mí? — bromeó TN, cruzándose de brazos mientras lo miraba.

Bucky levantó la vista y sonrió.
— No quería despertarte tan temprano. Aunque parece que madrugaste igual.

Ella dejó su botella de agua sobre una banca y se acercó.
— Bueno, después de todo lo que pasó, supongo que quiero mantenerme lista para cualquier cosa.

Bucky dejó las pesas a un lado y se secó el sudor con una toalla.
— No te culpo. Aunque espero que tengamos un poco de paz por un tiempo.

TN lo miró con una sonrisa divertida.
— ¿Tú queriendo paz? ¿Quién eres y qué hiciste con el Soldado del Invierno?

Bucky negó con la cabeza, pero la sonrisa permaneció.
— Tal vez alguien me está enseñando que no siempre tengo que estar alerta.

El comentario la hizo sonrojar un poco, pero rápidamente cambió de tema.
— Entonces, ¿quieres hacer cardio conmigo o prefieres seguir mostrando tus músculos?

Bucky rió suavemente y se puso de pie.
— Vamos, muñeca. Te sigo el ritmo

Después del entrenamiento, ambos subieron juntos al comedor. Tony ya estaba allí, sentado con una taza de café y leyendo algo en su tableta. Levantó la vista al verlos entrar.

— Buenos días, dúo dinámico — dijo Tony con una sonrisa burlona.

TN fue directo a abrazar a su padre, dándole un beso en la mejilla.
— Buenos días, papá.

— ¿Qué tal el entrenamiento? — preguntó Tony, mirando de reojo a Bucky.

— Intenso — respondió TN, mientras servía dos tazas de café, una para ella y otra para Bucky. — Pero nada que no podamos manejar.

Bucky asintió, tomando asiento junto a TN.
— TN es más dura de lo que parece.

Tony fingió sorpresa.
— ¿Estás diciendo que mi hija, la genio, heredó algo más que mi inteligencia? Impresionante.

— Oh, por favor — respondió TN, rodando los ojos mientras Natasha entraba al comedor con Clint detrás de ella.

— ¿Qué me perdí? — preguntó Nat, sirviéndose un vaso de jugo.

— Solo a Tony presumiendo — respondió Bucky con una sonrisa discreta.

Natasha rió mientras Clint tomaba un trozo de pan y lo mordía despreocupadamente. El ambiente en la sala era relajado, algo que todos agradecían después de los eventos recientes.

Más tarde, mientras Tony y Steve revisaban el sistema de seguridad mejorado de la Torre, TN y Bucky se encontraban en la sala de estar. Ella hojeaba un libro, mientras él limpiaba su brazo metálico.

— Oye, TN — dijo Bucky de repente, rompiendo el silencio.

Ella levantó la vista del libro.
— ¿Qué pasa?

Bucky se quedó en silencio por un momento, como si estuviera eligiendo cuidadosamente sus palabras.
— Quería agradecerte... por todo. Por no rendirte conmigo.

TN cerró el libro y lo dejó a un lado. Se inclinó un poco hacia él, apoyando el codo en el respaldo del sofá.
— Bucky, no tienes que agradecerme por eso. Estamos en esto juntos.

Él dejó de limpiar su brazo y la miró directamente a los ojos.
— Lo digo en serio, TN. Después de lo que pasó con Hydra... me di cuenta de que no quiero perder a las personas que me importan.

Ella sonrió suavemente y colocó una mano sobre la de él.
— No vas a perderme, ¿entiendes? Siempre voy a estar aquí para ti.

Por un instante, Bucky sintió que el peso de su pasado era un poco más fácil de llevar.