Información: esta chica fue un personaje ambiental en el primer capítulo. Si, la estuve guardando hasta ahora en espera sjdj.
Nueva York era una ciudad sumamente grande, muy diferente a Oslo y tenía muchos rascacielos, probablemente un exceso de ellos. En primera instancia te podías perder en aquella enorme ciudad, las calles eran muy parecidas y además se notaban las tendencias de la moda muy claramente con las socialité; el cielo no tenía muchas estrellas como estaba acostumbrado a ver por las noches y me hizo sentir algo solitario porque en mi mente, el cielo era lo único que me uniría a Liam.Cuando aterricé en la ciudad, realmente tuve esa sensación de querer irme en un instante de aquel lugar a mi casa cálida en vez de todos los condominios iguales, no me gustaba mucho sentirme como un extraño. Aquel día, llovía en Nueva York, pero al parecer eso no afectaba el curso del día porque todos seguían su camino, bueno, a excepción del tráfico que era muy escandalizante para alguien de oídos sensibles como los míos. La chica que hacía mucho tiempo que no veía, ¿cómo estaría ella? No la pude identificar entre la multitud que esperaba a pasajeros con letreros hasta que alguien gritó mi nombre y volteé por inercia, viendo a una chica teñida de rubio correr hacia mí y abrazarme con todas sus fuerzas.
Ariana.
Ariana había crecido. Realmente lo había hecho. Aquella chiquilla de cabello entre rojizo y castaño ahora lo traía rubio, llevaba una ropa menos conservadora pero aun así mantenía su modo de vestir aunque de un modo distinto, sus pecas estaban por todo su rostro y ya no tenía brackets, por lo que tenía una sonrisa realmente linda y destellante, aunque bueno... seguía sin poder superar más allá de mi hombro. Estaba algo bronceada pero seguía siendo una chica con palidez, enclenque, torpe y asquerosamente sentimental porque ella empezó a llorar al abrazarme y a montar una escena en pleno aeropuerto mientras berreaba y no tuve más remedio que brindarle una tímida sonrisa para que ella se calmara.
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Palabras de miel.
RomansEnamorarte de unas palabras es fácil. No, en serio es terriblemente fácil y más para Ian Hargitay. El responsable es Liam Belzer. Pero no sólo serán palabras de miel las que enamoren a ambos, también serán los actos que hagan participe el otro. "...