Como en mis libros...

CAPITULO X

Sosteniendo el celular con una mano, y utilizando la otra para apoyarse en la barra, Sophia intentó localizar a Natalie; cuando la vio concentrada organizando los nuevos libros en los estantes, una sonrisa conspirativa se adueñó de sus labios.

-Te digo que era increíblemente guapo...-. Aseguró emocionada en tono bajo. -Y ella lo llamó por su nombre. Aarón. ¿Segura no sabes quién es?

Al otro lado de la línea Cat se quemaba las neuronas tratando de recordar a un chico guapo con ese nombre; pero aparte de Nick, estaba bastante segura que no había otro hombre cerca de su hermana.

-¿Cómo era?

-Ya te dije. Alto, piel blanca, cabello oscuro, ojos intensamente azules, sonrisa creada para derretirte y voz sexy...Estuvieron juntos en...-. Sophia se atragantó con lo que estuvo a punto de decir. Contarle a Cat que su hermana estuvo con él en un hotel, y que encima la había descubierto con otro hombre... no, eso definitivamente no lo iba a decir ella.

-¿En...?

-Pues aquí, hablando...-. Eso había estado muy cerca...

-No, la verdad es que con esa descripción al único que conozco es a Nick; pero tú también lo conoces. Así que no, no tengo idea de quién puede ser...-. Por más que pensaba no daba con nadie en sus recuerdos; pero si sabía que estaba un 50% preocupada y un 50% emocionada. -Entonces ¿Es muy guapo?

-Pff ¡Guapísimo!-. Replicó Sophia abanicándose el rostro, recordándolo. -Si no trabaja como modelo debería considerarlo...Y estoy segura de haberlo visto antes, pero su nombre no me suena... Bueno como sea, eso no era lo más importante...

-¿No?-. Preguntó Cat divertida. La conversación entera había girado sobre el físico del pobre hombre

-No. Lo que es realmente importante...-. Ella volvió a revisar que la escritora no estuviera cerca. -Es que Naty había tenido un episodio antes de que él llegara...

Cuando escuchó esas palabras, Cat sintió que su estómago se contrajo, y después se le fue a instalar en la garganta. Dos ataques de ansiedad en tan pocos días no era bueno para su hermana; y podía tener consecuencias desastrosas. Ahora se sentía como la peor bruja del mundo por haberla convencido de ir a trabajar...

-¿Cómo que se sintió mal? Debiste haber empezado por eso, apenas el...

-¡STOPPP!-. Sophia hizo el gesto con la mano hacia nadie, pues era imposible que su amiga le viera. -Deja que termine de contarte...

-Pero es que Naty...

-Tú déjame terminar. Bien, ella se sentía mal, pero entonces él llegó causando un graaan revuelto...literalmente... digo, aun no me explicó como alguien puede comenzar a ahogarse con un chicle, pero el punto es que eso ocurrió y nadie tenía idea de que hacer.

-¿Naty se estaba ahogando con un chicle?-. En algún punto de la historia se había perdido.

-¡No! Pon atención, era el tal Aarón quien se estaba ahogando, y pum, que Naty sale y lo salva importándole poco estar rodeada de gente; y eso que minutos atrás se había ido a la bodega por qué se sentía mal ¿Qué tal?

-Que no te creo...

-Y eso no es todo; luego de que él se fuera, ella ha estado tan tranquila, que honestamente me da miedo...

-Ya me perdí de nuevo, se más específica...

-Mira, la escena que hicieron entre ellos, captó la atención de los clientes que teníamos; aun así, ella ni se inmuto; parecía que estaba en una burbuja donde solo estaban los dos y nadie más-. Explicó emocionada, de alguna forma aquello le resultaba extrañamente romántico. -Y cuando él se fue, Naty siguió atrapada en su hechizo...ha estado de lo más tranquila...-. Pensativa en realidad... -Y atiende a la gente con una calma que jamás había visto en ella. Es increíble.