7.

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         La chica rubia se giró aun hablando furiosamente a su teléfono y al vernos colgó inmediatamente acercándose con el ceño fruncido. Dejé de caminar y fruncí mi ceño también, ¿Qué diablos?

          —¿Dónde has estado? ¿Por qué no respondías a ninguna de mis llamadas? — preguntó mirando directamente a Zayn, para después girarse a mi y mirarme de pies a cabeza, examinándome, me miró a los ojos e hizo una mueca. —¿Y esta quién es?

          Abrí mis ojos, sorprendida y contesté antes que Zayn tuviera oportunidad. ¿Esta?

         —¡Hey! Pero, ¿Quién te crees que eres?— solté mirándola de la misma manera que ella a mi. Abrió la boca sorprendida, dispuesta a decirme algo, pero Zayn la interrumpió.

         —Alexis, ella es mi prometida, Perrie.

         —¿Estas de broma?— solté sin pensar, enfureciéndola más. Joder. Miré a Zayn y él me miraba con los ojos abiertos. Opps

         —¿Qué dices?— Chilló ella.

         Presioné mis labios, sintiendo las palabras que quería decir a punto de explotar. Pero me contuve, no la conocía, y además era su prometida. Negué levemente y afiance el agarré en mi bolso volteando mi mirada a Zayn. 

         —Lo siento, Zayn. Sera mejor que me vaya, tienes asuntos que resolver aquí.— le sonreí y él me sonrió de manera apenada. —Nos vemos luego.

          Asintió. 

         —Discúlpame con Louis y dile que le llevo el saco más tarde.

         Asentí repetidamente.

         —Claro.

          Me di la vuelta y empecé a caminar por donde antes habíamos llegado. Presione el botón del ascensor y unos instantes después se abrió, entre y me recargué en la pared de metal. Había olvidado completamente que Zayn estaba comprometido. Wow. Repase lo sucedido. La actitud de su prometida, la furia en su rostro. No podía creer que esta mujer sea la que él eligió para pasar el resto de su vida. Suponía que no siempre había sido así, ¿quizá un mal día? Joder.

          Salí del edificio y caminé hacia la camioneta de Louis. Abrí la puerta trasera y subí.

         —¿Dónde esta Zayn?— preguntó Eleanor.

         —Su prometida llego, y no se veía muy feliz.— Respondí, intentando sonar tranquila. —Dijo que te llevaba el saco más tarde.

          —¿Perrie llego?— soltó Louis sorprendido.

          —Si, que mujer más antipática.

           Eleanor dejó salir una risita y la camioneta arrancó. 

           Me dejaron en el departamento de Eleanor y ellos se fueron a quien sabe dónde, así que tenía unas cuantas horas para mi sola, me senté en uno de los taburetes de la barra de cocina y observé la foto de mi tatuaje que El me había tomado, en serio me gustaba. La subiría a instagram.

Uniéndome al club - @alexism

         Me levanté dispuesta a prepararme algo de comer, mi estómago estaba rogándome que lo alimentara, así que busqué en la alacena algo que pudiera servirme y dentro de las variadas opciones me decidí por espagueti en salsa verde y unos panecitos con ajo.

          Para acompañar mi cena, busque una película y me convencí por "Propuesta de año bisiesto", la había visto como mil veces ya, pero aun así seguía prestando atención a cada escena, me encantaba cuando mencionaban tradiciones en las películas.

Speak Now | zmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora